No Confies En Nadie

4. ¿Qué está sucediendo? Parte II

¿Qué hace él aquí?

-¿Lo puedo ayudar en algo? - le pregunto a Flynn. 

La caja comienza a resbalarse de mis manos y trato de sostenerla con mi rodilla izquierda.

- No creo que seas de gran ayuda- comento sin despegar la vista de su celular.

Elevo una ceja incrédula me limito a sonreír.

-Disculpe pero no debería estar aquí.

- Oh yo realmente me había creído lo de "Mi casa es tu casa"- hace un gesto de fingida pena.

-¿Perdón? - qué quiso decir con eso. De que me perdí.

-Claro con que encuentres a Claudia y le dices que me lleve un vaso de jugo de uva a mi habitación, estarás perdonada - explica con una sonrisa traviesa.

¿Claudia? ¿Cómo sabe su nombre? ¿Habitación? ¿Cuál habitación?

-¿Qué? -digo más perdida que nunca.

-es la tercera puerta del segundo pasillo- indica.

Antes de poder objetar.

Nuestros teléfonos suenan al mismo tiempo.

El me mira y su vista viaja de nuevo a su celular y se decide en contestar dando media vuelta.

-Sí, adiós- ironizo a pesar de saber que ya no me escucha.

Entro a mi habitación y automáticamente se cierra.

Dejo la caja sobre la cama y contesto antes de que deje de sonar.

- Black...necesito que vengas al taller- me responde Rick del otro lado de la línea.

-¡hola! ¿Cómo estoy? Pues ayer casi me atropellan dos veces pero estoy bien, gracias por preguntar - ironizo.

Lo escucho rier- solo ven, ¿quieres? - ruedo los ojos, que amigo me conseguí.

-Te veo en quince - termino la llamada.

Casi voy llegando a la puerta cuando me encuentro con Claudia.

¡Rayos! ¿Ahora qué hago?

-¿Vas algún lado?- me llama Claudia.

-No, te andaba buscando.

-¿para?

-Flynn dice que si le puedes llevar un vaso de jugo de uva a su habitación- le informo.

-ammm, en seguida se lo llevo- duda en irse pero finalmente se da la media vuelta hacia la cocina pero vuelve en sí.

-¿Se te ofrece algo a ti? -me pregunta con ¿incomodidad?

-No- subo nuevamente las escaleras.

No me gusta mentirle pero hay cosas que es mejor que no deba saber.

Corro a mi habitación, configuro la puerta para nadie entre y que cuando alguien toque mi voz salga diciendo que quiero estar sola.

Salgo al balcón y me paso del otro lado del barandal, con cuidado me acerco más a la orilla de tratando de pasar para el otro lado, salto para pasarme al otro balcón y me cruzo del otro lado pero antes que mis pies toquen el suelo, escucho un ruido provenir de la habitación.

Sin hacer ruido bajo del barandal y me pego a la pared, asomo mi cabeza pero no logro ver a nadie.

-¿Qué? que crees que estoy haciendo- exclama molesto ¿Flynn?