Notas a mi Muerte.

Tres.

Llegué a mi casa y mamá estaba en el sofá esperándome.

- ¿Tienes algo que contarme? - me dijo mientras me miraba seriamente.

- Nada. ¿Por qué? - pregunté tranquilo.

- Llamó Samantha. Esa chica linda, la amiga de Laura. El punto es que llamó para preguntar si estabas en la casa. Le informé que habías salido dos horas antes, y me dijo que no había rastro de ti.

- Ay. - no soportaba la mirada de mamá. Esa mirada de decepción en su joven rostro. En sus pequeños y oscuros ojos, bajo sus delgadas cejas. - Mamá, confía en mí un poco. No fui a la fiesta. Pero estuve en el Big Mall todo este tiempo. - sin darme cuenta, estaba sonriendo. La expresión de mamá se tornó a una de curiosidad.

- ¡Sebitas! Nunca vi esa sonrisa en tu rostro. Será que... - ahora su rostro tenía una sonrisa. Mamá siempre fue así de bipolar. Me mordí el labio.

- No sé, mamá. Estuve con una chica de mi grado. Quiero conocerla más. Eso es todo.

- Bueno. Con tal de que hayas seguido mi consejo de la protección. - riéndose, se levantó de golpe y fue corriendo a su habitación.

- ¡Mamá!

- ¡Te quiero!

- Yo a ti. - me reí.

Mi mamá siempre fue así de divertida conmigo. Es joven. Me tuvo a sus 18 años. No tengo papá. Bueno, lo tuve. Pero falleció antes de que yo naciera.

Mis papas estuvieron juntos mucho tiempo cuando mamá estaba en la preparatoria. Papá estaba en la universidad. Se llevaban con seis años de edad. Se enamoraron cuando mamá apenas tenía 12 años, todos los miraban mal por la diferencia de edad, pero eso no les importó como para dejar lo que tenían.

Ellos tenían peleas como todas las parejas que existen, pero lo que importó fue que ellos sabían cómo arreglarlo, juntos.

Los padres de mamá, es decir, mis abuelos, no aceptaban esta relación, los querían separar. Los primeros años que estuvieron juntos mis abuelos prefirieron pensar que era sólo una relación de colegio, de las que vienen y van, de las que sólo hay hoy en día, pero como vieron que ya iban más de cuatro años juntos, decidieron hacer algo al respecto.

Una época papá y mamá se veían a ocultas. Mamá decía que iba a ir a estudiar o algo parecido, pero en realidad salía con papá.

Cuando mamá estaba por cumplir los 18 años de edad, mis abuelos se enteraron de que mamá nunca había terminado con papá. Querían separarlos para siempre, definitivamente.

Escaparon juntos.

Al volver a casa, mis abuelos estaban muy enojados, pero mamá ya tenía 18 años. Hubo un problema, ella se embarazó.

Papá decidió hacerse cargo de mí. Todo iba bien. Pero cuando sólo faltaba un mes para mi llegada, papá fue asesinado.

Nunca supimos cómo murió exactamente.

Mamá se traumó tanto que el parto se adelantó. Y nací el día de la muerte de papá. El 21 de noviembre de 1997.

Mamá es una mujer para respetar. Yo la respeto.

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Hola!

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Gracias por leerme!

Comenten y Voten! Me ayudan mucho con la esta historia, y a seguir adelante.

- Alexia