a finales de 1520
La Sultana Madre Ayşe Hafsa caminaba a los aposentos de su hijo, quería cerciorarse de que hubiera pasado la noche con Hürrem Hatun.
— Díganle a su majestad que estoy aquí — les ordenó la Valide Sultan a los aghas.
— Su majestad se encuentra con su gözde — le informo uno de los aghas.
— Excelente, después de que Hürrem Hatun salga llevenla a sus nuevos aposentos — les dijo la Valide Sultan.
— Como ordene Valide Sultan — dijeron ambos.
— Mi sultana — se acercó Esra Kalfa.
La Valide Sultan la miró con incertidumbre y se acercó a ella para que le dijera aquello que le tuviera que decir.
— ¿Que sucede Esra? — le preguntó la Valide Sultan.
— Como lo ordenó Kemer Agha servirá a Hürrem Hatun como guardia personal y sirviente hasta que esté a salvo de las garras de la Sultana Mahidevran — le contó Esra a la Valide Sultan quien asintió con una sonrisa.
— Me alegra Esra, además no será sospechoso porque no es completamente un hombre — le dijo Ayşe Hafsa a su sirvienta personal.
— Me retiro mi sultana — le dijo Esra Kalfa a la Valide Sultan.
***
Mahidevran Gülbahar Sultan soltó un bufido, desde anoche no había podido dormir por el miedo de perder a su sultán en las garras de otra mujer.
— Madre, no estés triste — le dijo el Şehzade Mustafá a su madre.
— Oh mi león, ven a mi — le pidió la Sultana Mahidevran a su hijo.
— ¿Porque lloraste? — le preguntó el Şehzade Mustafá a su madre.
— Lloró porque tu padre está con otra mujer compartiendo el desayuno — le dijo Mahidevran Gülbahar Sultan a su hijo.
— El harén de mi padre no es más importante que tú — le dijo el Şehzade Mustafá a su madre.
— Lo sé, pero esto me duele mi şehzade — le dijo la Sultana Mahidevran.
— Entonces hablaré con mi padre para que ya no pasé la noche con su harén madre y tú seas la única — le sugirió el Şehzade Mustafá.
Mahidevran Gülbahar Sultan negó con la cabeza, ni quería que su hijo se metiera en problemas con su majestad por su culpa.
***Hürrem Hatun se divertía con el Sultán Süleyman, le platicaba acerca de su pasado en Polonia y su vida en el campo junto a su familia.
— Mis padres fueron asesinados majestad, pero no sé que pasó con mis hermanas — le contó Hürrem Hatun.
— Lo siento tanto Hürrem, pero recuerda que ahora estás en mis brazos — le dijo Süleyman a la muchacha.
— Es usted un hombre admirable mi sultán, estoy feliz de estar a su lado — le dijo Hürrem Hatun.
— "Eres hermosa Hürrem, tan adicto a tus besos y no puedo dejar de mirarte como lo hago" — le recitó una poesía ganándose un repentino beso de su gözde.
— Que hermosas palabras me dice, es usted un romántico — le dijo Hürrem Hatun.
Así se pasaron una mañana llena de comentarios y risas, Hürrem Hatun comenzó a cautivar cada vez más al Sultán Süleyman.
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Hürrem
Historical FictionMi nombre era Aleksandra Lisowska, llegué desde Polonia hasta Estambul en el centro del mundo, era una adolescente que corría por las praderas de su hogar junto a sus hermanas y queridas amigas, pero lamentablemente ese día esos hombres me llevaron...