Hürrem

13 Fiesta

Palacio Topkapi a inicios de 1522

Hürrem Kadin disfrutaba de la música y danza, Gülbahar Sultan la miraba con recelo, además no dejaba de hacer comentarios sobre la peliroja quien solo ignoraba lo que la pelinegra decía.

La Valide Sultan bebió del jugo que Esra Kalfa le había preparado, también invitó a Gülfem Hatun a disfrutar de la música junto a ellas quien no perdió la oportunidad de platicar sobre en los términos en los que quedaron Süleyman y ella.

El Sultán Süleyman entró al harén de Topkapi, todas las criadas bajaron la cabeza excepto la Valide Sultan quien recibió a su hijo con una sonrisa y le tendió la mano para que la besara en señal de respeto como era debido.

— Que gusto verte hijo mío — sonrió Hafsa Sultan.

Süleyman saludo a su hermana Hatice Sultan quien hizo una leve reverencia y tomó al Şehzade Mehmed en sus brazos para entregárselo al sultán.

— Mehmed ríe al verte Süleyman — le dijo su hermana.

Hürrem Kadin mantenía la cabeza baja.

— Mamá — le llamó Mustafá a Gülbahar — ¿Papá se olvidará de mi?

Aquella pregunta la hizo el Şehzade Mustafá en voz baja pero no pasó desapercibida por Hürrem Kadin quien no dijo nada.

— Tú eres su favorito hijo — sonrió Mahidevran Gülbahar Sultan.

Süleyman miró a su hijo Mehmed quien le sonreía a su padre, el pequeño tenía un año de nacido y siempre parecía estar feliz cerca del recién nacido.

— Mehmed se parece a usted majestad — le comentó Hürrem Kadin.

— Hürrem dice la verdad hijo — dijo Hafsa Sultan — heredó tus ojos.

Gülbahar rodó los ojos al escuchar las palabras de Ayşe Hafsa quien mantenía una sonrisa en sus ojos,

— Yo me parezco más a mí padre — habló el pequeño şehzade Mustafá con arrogancia — yo seré el sultán.

Süleyman miró con molestia a la madre del niño quien bajó la cabeza avergonzada por las palabras que había soltado en aquel momento.

— ¿Quién te enseñó eso Mustafá? — inquirió su padre.

Mustafa no miró a su padre, de reojo observó a su madre quien parecía furiosa.

— ¿Fue Gülbahar şehzade? — inquirió Hatice Sultan.

El şehzade negó.

— Las leyes padre — dijo el Şehzade Mustafá.

Süleyman dejó a Mehmed en los brazos de Hatice Sultan y cargó a Mihirimah Sultan olvidándose de lo que había pasado.

— Solo no vuelvas a decir algo así — le dijo su padre por último.

Hürrem Kadin creyó que era el momento para contarle a Süleyman la buena nueva, se tocó el vientre masajeandolo un poco, Süleyman le sonrió y se acercó a la muchacha.

— ¿Te duele algo mi Hürrem? — le preguntó preocupado.

Hatice Sultan sonrió.

— Hürrem es muy fértil hermano — le dijo Hatice Sultan — tendrá otro hijo tuyo.

El jugo que Gülbahar sostenía en su mano se cayó en aquel momento, la Valide Sultan le sonrió mientras ella solo se sintió más derrotada que nunca.

Hürrem está embarazada

Mi hijo corre peligro

Los hijos de esa ramera rusa son un obstáculo