Fantasies -Marvel

☁T w o A n d Y o u☁

—T h o r , S t e v e , T ú—

☁T W E N T Y  O N E☁

"La cama será el único lugar donde tienes permitido portarte mal"

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Sudabas, estabas agitada y sumamente cansada pero aún más que todo eso, estabas terriblemente satisfecha, en todos los sentidos posibles.

— ¡Demonios, eres magnífica! — la voz de Rogers se escuchaba de igual manera agitada a tu lado, retiraste el pelo de tu cara y sonreíste vagamente.

— ¿Impresionado capitán?

— Estoy realmente anonadado, ¿Haces esto diariamente?

— Siempre que se presenta la ocasión.

— Bueno basta, par de presumidos, aquí hay alguien muriendo por falta de aire y ustedes presumiendo, caen mal — Tony llegó a ustedes prácticamente arrastrandose, empapado hasta los huesos de sudor y sin nada de aire — Me duele el pecho, ¿Será posible que haya escupido un pulmón allá atrás? — te acercaste y le tocaste el hombro, Tony estaba recargado sobre sus rodillas tratando de recuperar el aliento.

— Muy posiblemente ¿Quieres que regrese a buscarlo? — Steve se comenzó a reír.

— No le dimos ni tres vueltas a la base Tony, ¿En serio te cansaste tan rápido? — el castaño volteó a verlo enojado.

— ¡¿En serio me preguntas eso?! — rebuscó más aire y siguió gritando — ¡No es fácil seguirle el paso a un super soldado y a una niña rara, perdón si no es suficiente pero habrá que ver quién vuela más rápido! ay perdón ¡Ninguno vuela, ¿verdad?! — morías de la risa, palmeaste más el hombro de Stark y trataste de tranquilizarlo.

— Ya tranquilo, que si no escupiste un pulmón hace un momento, lo harás ahora — Steve asintió y pidió disculpas — Vamos, hay que recuperar fuerzas, yo hago el desayuno —  Tony se relajó y aceptó la propuesta, después de hacerte prometer que harías waffles comenzaron a caminar de regreso a la base para desayunar.

No dieron más de tres pasos antes de que un estruendo se oyera en el cielo y una gigante luz cayera desde arriba, nunca en tu vida habías visto algo como eso y te preparaste para cualquier ataque, ni Tony ni Steve se preocuparon; quedaste confundida.

Cuando la luz brillante golpeó el césped de la base tardó unos segundos más para que pudieras ver que era lo que había llegado con esa cosa. Finalmente pudiste verlo, un hombre de cabellera rubia y larga, vestido con un traje un poco extraño y una capa roja que llegaba hasta el piso, en su mano derecha llevaba consigo un martillo y del otro lado, lo que parecía un barril de madera que contenía... no sabías que contenía; el hombre se veía extremadamente feliz al ver a Tony y a Steve.

— ¡Amigos! — dejó caer el martillo y puso el barril en el piso antes de extender ambos brazos ya abrazar a tus compañeros hasta alzarlos del piso — Los extrañé, ¿Qué hay de nuevo, cómo han estado, qué han hecho de sus vidas? — Tony tosio un poco antes de pedirle al hombre que lo bajara, Steve le sonrió como si nada y le palmeó el brazo — Uh, hola, buen día — hizo una reverencia con la cabeza hacia ti antes de escuchar a Tony presentarte — Un gusto, soy Thor, príncipe de Asgard — extendió su mano y la aceptaste con una sonrisa.