CAPITULO TRECE

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Disponerme a sacar a los padres de Jack de la estación fue algo sencillo y mucho más con la adrenalina que obtuve cuando se les escapó de su boca que la razón por la que estaban allí era porque les estaban pagando. En estos momentos no encuentro una palabra educada para llamarlos.

―El padre de Jack admitió que les estaban pagando una suma bastante alta de dinero por permanecer aquí en la estación.―explicó la jefa Carson después de interrogarlos.

Después de aquello que se le escapó decir en voz alta, la jefa Carson no dudo en pasarlos al cuarto donde se realizan los interrogatorios.

―¿Quién les pagaba?―pregunte.

―No saben, fue un correo anónimo que les llegó y ellos no dudaron en aceptar al ver de cuánto dinero se trataba.―los religiosos abnegados que juraban ser siempre cómo que desapareció de su chip cerebral― No dejaban de mencionar un montón de cosas religiosas y el perdón.

Luego volví a mi casa, con Henry. Me había pedido hablar conmigo sobre algo así que lo invite a cenar a mi casa, pedí pizza a domicilio ―la policía, quien aún seguía al pendiente de mi pero ya no tanto como antes, pensó que ya no es tan peligroso eso de pedir a domicilio y salir por ahí― y nos ponemos a comer en silencio. Yo no digo nada porque él era el que quería hablar conmigo, pero veo que tengo que hacer algo.

―¿Qué era lo que ibas a decir?

―Cierto... Bueno, yo quería saber...

―Henry, puedes preguntarme cualquier cosa, yo no muerdo.

¿Porque simplemente no hago la pregunta? Porque me siento malditamente nervioso, eso pasa.

―De acuerdo, quería saber si... ¿tu quieres ser... mi novia?

Listo, lo dije.

¿Yo escuche bien? Sí, estoy segura de que él dijo la palabra 'novia'. También estoy segura de que no sé qué responder, en estos momentos una parte de mi quisiera decir que si, un rotundo sí, pero otra parte de mi quiere decir que no, la razón es que no estoy segura de si es el momento correcto para empezar una relación ¿No es algo precipitado? No lo sé.

Una guerra está comenzando dentro de mi cabeza, la razón contra el impulso.

¿Será que hable muy pronto?

―Quiero ser completamente sincera contigo, Henry.―respondo después de analizarlo por unos pocos segundos―No tengo idea de que responder, sabes que están pasando muchas cosas que están ocupando nuestros tiempos completamente y aunque una parte de mi diga que si, hay otra que aún se lo está pensando.

―Sabía que era muy precipitado...―murmura por lo bajo, pero lo suficientemente alto como para que yo lo escuche.

―Y todo eso no indica que no quiera, lo sabes ¿No?

―Entiendo.―que bueno que lo entendiera, aunque ver su cara de desánimo me hace querer hacer algo y algo muy loco quizás.

Estamos sentados en el suelo, la razón es porque colocamos la pizza sobre la mesa de centro de mi sala, dejó lo que me queda de mi trozo de pizza en el plato y gateo hasta su lugar. Nunca había hecho lo que estoy a punto de hacer y sé que no es igual como en las películas, pues allí te lo pintan demasiado fácil y sencillo, pero lo intento.

Sé que le dije que no quería ser su novia, iniciar una relación seria ahorita no creo que sea el momento, pero eso no indica que no me mueva un poco el piso.

Cuando llegó hasta él comienzo a besar su cuello y a morder el lóbulo de su oreja. Luego solo nos dejamos llevar, como siempre lo hemos hecho, con ese toque mágico.

RESPLANDOR©️Where stories live. Discover now