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Arian.

Al día siguiente me había levantado con un  horrible dolor de cabeza, era como sentir dos taladros en cada extremo de mi cabeza perforándole a cada segundo sin detenerse. Pero aún con todo ese tremendo dolor que sentía y las inmensas ganas de recostarme y hacerme bolita en la cama, me vi en la  necesidad de levantarme y responder a los constantes llamados de Anny. Que estoy segura que estaba apunto de subir a levantarme ella misma.

— ¡Arian! ¡Levantate ya! — grito desde el piso de abajo —¡Arriba niña floja!.

— Ya voy — susurré, sabiendo que ella me escuchaba perfectamente aun estando en la planta baja. 

Quejando me internamente por tener que levantarme de la cómoda cama, entre en la ducha con mucha pereza. ¿No les a pasado que duermen mucho pero no descansas nada? ¿Si? Bueno eso es justo lo que me esta pasando justamente hoy, y juro que es lo peor de la vida.

Al terminar de bañarme salgo con mi toalla alrededor de mi cuerpo camindo hacia el armario de madera para buscar algo decente con que salir al exterior. Me topo con una blusa gris con mangas negras que cubrían hasta mi codo. Era una de mis favoritas, recuerdo el día en el que mi madre me lo entrego, fue en mi cumple años diecisiete y después de un desolado cumpleaños un pastel enorme solo para nosotras dos, mi madre me la entrego envuelta en una bolsita de plástico. Al solo verla me había enamorado de ella completamente por el simple hecho de ser linda, sencilla y de un color tan triste como el de mi cabello.

Enseguida me la coloque en conjunto con un pantalón negro, este no tenia una gran historia detrás pero igual era uno de mis prendas favoritas. Para finalizar mi atuendo me coloco mis lentes, los cual uso solo por que me gusta usarlos, no entiendo como a las personas les fastidia usar estas maravillas a mi me encanta.

Suspiro.

No se que cambios habrá en la manada con el nuevo Alpha al mando pero tengo el presentimiento que no serán buenos. En los últimos años e sido maltratada si, pero moderadamente pues no pueden pasarse de la raya si no el Alpha — el padre de Elliot — se enteraría, sin embargo con un nuevo líder joven y que probablemente sea igual o peor que su hermano no se si mis acosadores se seguirán conteniendo para lastimarme mas haya de los limites.

Como si de un relámpago ( por lo rápido que es)  se tratara todos los sucesos de esta ultimas tres semanas se me vienen a la mente.

Los maltratos.

Las pesadillas.

Las voces.

Las extrañas palabras de mi madre.

Todo se a vuelto muy confuso. La verdad es que no se cuando esto se a vuelto un acertijo muy difícil de descifrar pero no veo la hora de que termine y por fin pueda tener paz y tranquilidad.  Aunque siendo yo, dudo mucho que llegue a tener "paz" y "tranquilidad" en algún punto de  mi vida.

Los golpes en la puerta de abajo me regresan a la realidad. Por el olor que me llega puedo asegurar que de nuevo es un guerrero seguro viene hablar con mi madre del trabajo o si tengo suerte la este en vitando a salir o algo por el estilo. Para ser sinsera me gustaría que mi madre tuviera alguien con quien compartir su vida y no digo que no lo puede hacerlo conmigo o que me vaya a ir algún lugar, no significa eso es solo que quiero que encuentre alguien que sea su confidente, tampoco es que no nos tengamos confianza de hecho si soy  su confidente pero hay cosas que no quisiera saber es mi madre y imaginarme algo tan privado como un barrito en el trasero o la ultima vez que tuvo relaciones, sea algo que una hija quisiera saber de su madre. En fin me gustaría que encontrara a alguien que la ame y ella a el que sea feliz y que le brillen sus ojitos con tan sólo mencionarlo.

El Rechazo De Una Estrella. (PAUSADA)Where stories live. Discover now