nieve en verano ❀ hyunmin

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SeungMin estaba demasiado sonrojado por el comentario que Hwang había lanzado luego de ver aquella foto ¿acaso HyunJin lo consideraba lindo?.

—Ay mira, se está sonrojado—comentó, llevando sus ambas manos a las mejillas de Min para empezar a sacudir su cabeza para detener el color rojo que pasaba por donde estaban sus manos, pero eso provocaba que el color se vuelva más intenso.

La puerta en ese momento se abrió dejando ver a una señora de unos cuarenta y algo años con una bata blanca abierta llegando hasta las rodilla.

—Ya estoy en casa—habló la mujer haciendo que Kim entre en pánico y rápidamente se aleje del pelinegro.

—Mamá, llegas temprano, mucho más temprano—comentó, rezando a los cielos de que ya no tenga un color carmesí en sus mejillas o que al menos no sea tan notable.

—Lo se, pero JongBum dijo que se iba a encargar de la sala y que me vaya a casa, así que aquí estoy—habló contenta acercándose a su hijo y regalándole un dulce beso en su mejilla—¿y este tu amigo es...?.

—Soy Hwang HyunJin, un gusto señora Kim—hizo una reverencia para luego darle una sonrisa encantadora, y Min quería morirse en aquel momento por lo que Hwang llamó a su madre señora Kim.

—Ay por favor, deje de ser la señora Kim hace años. Llamame señorita Yoo—respondió dándole una sonrisa algo falsa.

—Oh. Lo siento, Señorita Yoo.

—Esta bien, HyunJin. Así que ¿Iban a hacer un trabajo, o a que se debe tu visita?.

—De hecho, estábamos yendo a mi habitación a hacer la tarea de matemáticas. Con tu permiso, mamá—Min toco el brazo del más alto y con la cabeza le pidió que lo siga hasta el segundo piso.

—Ah, HyunJin ¿Te quedas a cenar?—preguntó, antes de que ambos terminen de subir las escaleras.

—Claro.

—No—ambos cruzaron miradas y por más que Hwang quería entender la del pelirrojo no podía.

SeungMin realmente no quería que se quedará a cenar, porque su madre o lo atormentaria con preguntas innecesarias o lo haría pasar vergüenza, y no quiere ni una.

—Quiero decir, claro acompáñanos a cenar.

Dicho esto, Min corrió hasta su habitación seguido de Jin, luego de cerrar la puerta con seguro se lanzó hacia su cama y lo único que quería en este momento era que la tierra lo tragara de una vez por todas.

Mientras tanto HyunJin empezó a observar las hojas de papel pegadas en la pared por encima del escritorio del dueño de la habitación, eran dibujos, tanto como de personas y paisajes, eran realmente muy hermosos y de repente recordó que Min de hecho le debe uno. Pero antes de que pudiera decir algo, este se adelantó.

—Lamento si te di la impresión de que no quería que te quedes a cenar, quiero que lo hagas solo que mi mamá es...

—Tranquilo, lo entiendo —lo interrumpió, sentándose en la silla del escritorio frente a la cama—igual yo lo siento por lo de tu madre, no sabía que tus padres estaban...

—¿Divorciados? Si fue hace unos siete o ocho años —respondió abrazado una almohada, no es que le afecte mucho él tema ya que no era totalmente cercano a su padre, y que además lo ve bastante seguido pero de todas maneras fue duro para un niño de nueve años entender que sus padres no se amaban como antes, que su padre ya no iba a vivir con ellos, que la familia ya no iba ser como antes.

—¿Puedo preguntar que fue lo que pasó?—Hyun no preguntaba por traerle malos recuerdos a SeungMin o por ser entrometido, solamente quería saber, porque la vida de Kim le parecía un total enigma.