0.13; guilty or innocent

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—Min—HyunJin estaba tocando la puerta de la habitación del nombrado por más de diez minutos, podría haberse ido de una vez, podría hablar con él mañana, pero tenía un sentimiento de que debería quedarse, quería quedarse porque Kim lo necesitaba—Soy yo, abreme la puerta, por favor.

Seung había olvidado que el mayor estaba en su casa, y se sorprendió como es que seguía dentro de esta después de escuchar esa pelea que tuvo con su madre, si fuera Hwang ya se hubiera ido corriendo.

El pelirrojo se encontraba mirando por la ventana, la vista no era del otro mundo más que su patio trasero, pero las estrellas en el cielo nocturno daba ganas de querer seguir viendo, y así no le daban ganas de llorar, pensaba que el pelinegro después de golpear la puerta sin recibir nada, se iba a rendirse e irse de su hogar, pero no, él seguía insistiendo por lo cual tuvo que ir a abrir la puerta.

—Gracias—contestó, para luego cerrar la puerta con seguro detrás suyo, y seguir a SeungMin hasta su cama.

—Lamento que hayas presenciado esa pelea—habló, mirando a los ojos del contrario e intentando no ponerse nervioso—solo que mi madre es muy terca con el tema de MinHo, y creo que todos lo son, a excepción de mi hermana, Félix, tal vez JeongIn...

—Esta bien, no te preocupes—respondió dándole una sonrisa pequeña—pero ¿qué paso con MinHo?.

Kim soltó un suspiro y se echo para atrás, frotandose lo ojos y quedándose mirando el techo.

—Está bien ni no quieres cont...

—Teníamos catorce años, fue el año que MinHo había entrado a la escuela—se volvió a sentar y empezó a contar la historia sin mirar esta vez a los ojos de Hwang—era el último día de la feria, y como siempre él y yo quedamos en ir, todo iba bien hasta que llegamos al final del día y ya habíamos recorrido todas las atracciones, después de eso yo tenía que ir a su casa. Me dijo que sus padres iban a venir a recogernos así que nos quedamos en unos asientos a esperar, luego Lee dijo que tenía sed y fue a comprar algunos refrescos; en ese momento dos personas se me acercaron a mi, diciendo que eran los papás de mi amigo y teníamos que irnos, ni siquiera me dijeron el nombre de MinHo, pero en ese momento no lo pensé y lo seguí, cuando empezamos a dejar la feria y acercanos a un auto negro, estaba suponiendo que algo andaba mal pero cuando quise correr o algo, esas personas agarraron de mis muñecas y me empezaron a jalar—Hwang empezó a entender el sentido de porqué lo habia golpeado el viernes—grité como un loco, podía ver como las personas seguían iguales y escuchaba la voz de MinHo gritar mi nombre y como cada vez se acerbaba más a donde yo estaba, pero cuando yo quería gritar el suyo ya era tarde, otras dos personas lo habían agarrado y llevado a quien sabe donde y las personas que me tenían a mi, me colocaron en la maletera, me taparon la boca con una cinta, me llevaron a una casa, o no se que habrá sido ese lugar pero me mantuvieron ahí unos cuatro días, con suerte me daban algo de comer o beber, me lastimaban mucho y...

SeungMin intentaba continuar hablando pero las lágrimas que bajaban por sus ojos no lo dejaban, además que su garganta se secaba y su voz no podía salir, Kim no recordaba al cien por cien ese episodio de su vida, tenía recuerdos fugaces, imágenes borrosas de lo que pasó en esos cuatro días que estuvo con sus pies y muñecas amarradas pero con tan solo imaginando que hubiera pasado le duele, y más le duele lo que MinHo tuvo que pasar por eso, a pesar que el no corrió la mala suerte de ser secuestrado, la culpa había caído en él luego que de Kim haya contado lo que pasó y su madre haya malinterpretado sus palabras “MinHo me dijo que me quede ahí hasta que sus padres llegarán” esas fueron las palabras de un SeungMin de catorce años que acababa de salir de un episodio traumatico; junto con esas palabras vinieron “MinHo tardaba mucho, empezaba asustarme, luego llegaron los que dijeron que era los padres de mi amigo” a la señorita Yoo no le importo lo que su hijo dijo después de que fue detrás de él, no le importo lo que dijo Lee diciendo que él no sabía, no le importo de que haya colaborado a encontrar a su Min, no le importo nada, la ex señora Kim solo creía que Lee MinHo era culpable y nada más que culpable, y eso le contagió a ChangBin y otros de sus amigos o familiares.

—Él es inocente, HyunJin. Lo es—el nombrado no tenía palabras, no podía hablar, no le importaba si Ho era inocente o culpable, solo le importaba que el menor había pasado por un secuestro, había pasado algo horrible en su vida. SeungMin no merecía eso, nadie lo merecía, pero Kim es una persona con una personalidad tan linda, tan buena, él simplemente era un ángel que no tenía derecho a pasar por eso.

Hwang se quedó callado y con sus brazos enrollo el cuerpo de Kim que se veía pequeño y lo dejó llorar en su pecho, en estos momentos no le importaba si le manchaba, en estos momentos no le importaba nada, solo le importaba alguien que tenía nombre y apellido aunque no lo recuerde muy bien.

—Esta bien, Minnie—Hwang agarro las mejillas de el nombrado e hizo que levante su cabeza, con sus pulgares limpiaba suavemente las lágrimas que caían, y para tranquizarlo un poco le regaló un beso en su frente, un suave y dulce beso que pudo hacer detener por un momento su llanto para dedicarse a ver el rostro del mayor—ahora todo esta bien—volvió a colocar la cabeza del contrario en su pecho mientras que acariciaba esta, y jugaba un poco su cabello hasta que Min se desahogara totalmente.

En ese mismo día se juro proteger a Kim SeungMin de todo lo malo que pudiera pasarle, porque por más que haya pasado clases de autodefensa, aún era una persona que se veía débil y podia llegar a ser débil en algunos momentos.
Además ese mismo día un sentimiento que aún Hwang no podía explicarse , empezó a salir de su corazón cada vez que se trataba del pelirrojo.

nieve en verano ❀ hyunmin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora