0.19; draw me

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—Pero no vinimos aquí a sentirnos mal ni hablar de mí, ¿o sí?—rápidamente Hwang levantó la mirada observando la ciudad y dándole un intento de sonrisa a su acompañante.

—Si te soy sincero no se que vinimos a hacer aquí—bromeó, pero rápidamente continuó—no es que me esté quejando, es un muy lindo lugar, y también es muy lindo estar contigo, es bueno salir de vez en cuando.

Habló de manera veloz causándole gracia y ternura al mayor, el cual revolvió el cabello del pelirrojo para luego agarrar nuevamente su mochila para sacar un cuaderno y un estuche de adentro, extendiendole al contrario el cual tenía un mirada confusa.

—Recuerdas que de las primera veces que nos conocimos tu estabas dibujando—dijo, recordando a Min en un columpio a la merced de la noche—y me dijiste que me lo ibas a hacer uno. Bueno, han pasado unas ¿tres semanas? y sigo sin tener uno.

Seung soltó una risita nerviosa, si somos sinceros Kim lo había olvidado, y el hecho de que Hyun lo haya recordado hasta ahora, ablanda su corazón y lo llena de amor.

—¿Quieres que te dibuje?—preguntó, abriendo el cuaderno en una hoja cualquiera.

—Si, solo que intenta no dibujar mi golpe—rió, poniéndose de frente del menor no sin antes sacar un parlante para poner música y que el ambiente no sea tan seco.

Kim asintió agarrando un lápiz del estuche de Hwang y comenzando con su trabajo, por primera vez iba a dibujar a HyunJin sabiendo que esta siendo dibujado y su corazón sonreía ante ese hecho. A medida que el iba haciendo arte sobre el pedazo de papel, el ambiente se volvió bastante silencioso apesar de tener la música sonando de fondo, a Min no le gustaba aquel silencio algo incómodo, por lo cual procedió a preguntarle más cosas al contrario, no importaba si ya sabía la mayoría igual quería escucharlas saliendo de su boca, quería conocerlo más a fondo, quería conocer quien era el verdadero Hwang HyunJin—para probarle a ChangBin que es una buena persona—, y de hecho él no era el único que quería conocer más del otro, el pelinegro queria saberlo todo, quiere saber los miedos, los sueños, los secretos de SeungMin, quería saber que clase de persona era, porque cada día que pasa con él le agradaba más y más.

Unos veinticinco minutos pasaron, el sol estaba a nada de esconderse, y el cielo estaba cambiando de color, empezando por un anaranjado rosa cerca del sol, y un celeste pálido más arriba, realmente un bello paisaje. Para eso, Min daba los últimos retoques al dibujo, no era uno de los mejores que había hecho porque teniendo al modelo tan cerca y mirándolo fijamente con una pizca de cariño no le ayudaba en nada, pero aún así está orgulloso; firmó en la esquina de la hoja le extendió el cuaderno al pelinegro quien respondió con una sonrisa.

—Vaya, deberías dedicarte a esto. Es realmente hermoso—aquel cumplido logró enrojecer las mejillas del pelirrojo—Lo voy a enmarcar y colgar en mi cuarto, ya lo veras.

—Quisiera ver eso—soltó una carcajada, sentándose bien y observando el hermoso atardecer que estaba delante sus ojos; deseaba sacarle una foto, pero sabía que la cámara no captaria lo que su ojos estaban viendo en este momento

Hubo unos minutos de silencio—sin considerar la música y los grillos que empezaban a escucharse—hasta que el sol totalmente se escondió tras los cerros.

—Hey, ¿puedo hacerte una pregunta?

—Dispara—respondio sin quitar la vista de la ciudad, la verdad le estaba gustando demasiado aquel mirador.

—¿Ya has dado tu primer beso?—preguntó de repente, y Kim casi se atraganta con su propia saliva, además que la sangre empezaba a colocar todo su rostro en un rojo carmesí.

—Una chica me beso cuando tenía diez años, creo—intentó hacer memoria de aquella chica que lo había besado en un obra escolar, el beso se suponía que tenía que ser en la mejilla pero la castaña se había arriesgado y había juntado sus labios por un tiempo fugaz—¿eso cuenta?

—Si... pero me refería a un beso de verdad ¿sabes? Uno que no sea un simple toque de labios.

Nuevamente las mejillas, más bien todo el rostro del menor empezaron a volverse rojas nuevamente ¿Debería de decirle la verdad sobre que ese fue el único beso que dio en su corta vida? ¿Y si se ríe de él? Eso sería algo demasiado vergonzoso para Min, pero aún si no puede decir que si dio un verdadero beso cuando eso es más mentira que la palabra.

—¿Tu sí?—evadió la pregunta hasta decidir en decir sí que si lo hizo o no.

—Unas cuantas veces—sonrió victorioso, como si fuera una gran hazaña. Kim rió en su cabeza, claramente HyunJin había dado un beso de verdad, no te podías perder en eso—ahora me vas a contestar ¿o no?.

—Si te digo que no, ¿prometes no reírte?—ahí iba Hwang otra vez, dándole esa mirada de cariño—No lo hice—bajo la cabeza algo avergonzado.

—¿Y no quieres darlo?—ahora esa mirada había cambiado por una de picardía, suficiente para poner al menor más nervioso de lo normal.

—¿Q-qué? ¿A-ahora?—empezó a tartamudear y Hwang podía morir de ternura en ese mismo momento ¿Por qué SeungMin tenía que ser tan tierno e inocente? Mierda, no podía evitar que lo mucho que le encantaba cuando se pone así.

—Si. Aquí. Ahora. Conmigo.

Bien, la verdad ese no era su plan exactamente, ese era el plan z pero se salto todo el abecedario solo por tener ganas de probar aquellos labios que puede apostar lo que sea a que son tan dulces cómo la persona que los posee. HyunJin no lo va a negar—aunque quisiera hacerlo—pero tener un beso verdadero con SeungMin lo estaba deseando desde que sus manos tocaron por primera vez su piel de porcelana, y desde ese momento quiso también tocar esos labios rosáceos, quería saber si eran suaves, dulces, si podía lograr poner su mundo de cabeza.

—C-creo que ese golpe afecto un poco tu cabeza—joder, si Kim no dejaba de actuar tan inocente, Hyun no podria controlarse más tiempo y atacaria esos labios sin siquiera preguntar.

—¿Me vas a decir que tu no quieres? —volvió a hablar con picardía, el pelinegro no es ciego y tiene bien en cuenta que el pelirrojo no se queda atrás con querer juntar sus labios, lo sabe por la manera en la que lo mira.

—No, no eso, solo que...

—¿Entonces, qué? Vamos, bésame—lo interrumpió acercándose más hacia el menor.

—¿P-por qué siento que tu estas más entusiasmado?—habló, haciendo lo posible para no salir corriendo de ahí por lo nervios o dejar que todo su rostro sea considerado un tomate.

—Por que lo estoy, cariño.

—¿Y por qué no me besas tu primero?—esas eran las palabras que Hwang quería escuchar, quería que Seung le diga que lo bese.

—Si así lo quieres—dijo antes de colocar su mano en la nuca de SeungMin y acercandolo hasta a él para poder unir sus labios de una vez por todas.

Al principio sólo fue una toque de labios, y eso fue suficiente para que Hwang confirmara que los labios del menor eran de igual de dulces. Podía sentir como SeungMin estaba básicamente temblando bajo su tacto, estaba nervioso eso era algo bastante obvio desde hace un tiempo atrás, pensó que nunca iba querer profundizar el beso, pero estuvo totalmente equivocado... las manos de Kim que se encontraban sobre su regazo fueron a parar en el cuello de la camisa del mayor atrayendolo más hacía él, separando un poco sus labios para que el beso pase a una segunda base, aun no había lengua, solo dos bocas conociéndose por primera vez, saboreando todos los sabores que tenían, sabiendo más del otro y experimentado la dulzura, la inocencia y la ternura además de la picardia y la necesidad.
Su beso tenía tantas emociones y sentimientos mezclados, que hacía a sus corazones bombear con más fuerza de la normal.

~ ★ ~
Actually, el golpe le afecto a la cabeza de hyunjin porque no esta pensando exactamente con esa ahre no bASTA.

Espero que les haya gustado el capitulo porque a mi encanto de hecho xd.
Gracias por leer, se les ama mucho 💞.

Preguntaaa: ¿de dónde me leen?

nieve en verano ❀ hyunmin Onde histórias criam vida. Descubra agora