«celo»

10.1K 271 17
                                    

.

.

.

Desde que Alma nació sabía que había nacido como una "beta", era raro que niñas nacieran "alfa" y le dio gracias a la vida que no nació "omega" cuando por fin entendió el significado de cada una de estas palabras. Usualmente las omegas son marcadas y tomadas por los alfas y a ella no le agrada la idea de ser posesionada por algún idiota mandón. Pero todo eso cambio esta mañana cuando se empezó a sentir extraña mientras caminaba para su clase de química.

Su cuerpo despide un olor extraño, un olor que hace voltear cabeza cuando camina por los pasillos de la universidad. Corre lo más rápido que puede a la enfermería en dónde sabe le iban a ayudar con su problema. Odiaba que su cuerpo al final haya salido omega y que justo ahora entre en celo en medio del ajetreado día.

—Oh. —una de las personas en la oficina dice cuando ella entra al pequeño espacio reducido.

—Necesito ayuda. —hace una mueca de disgusto.

—Ven para acá. —la enfermera la lleva para el baño. —si un alfa te huele... —

—Lo sé. —dice con la voz apagada.

La enfermera no puede llevarla al baño porque llega otra, le da una bolsa y le dice que se tiene que ir de allí antes que todos los alfas en la oficina la quieran marcar. Con piernas temblorosas sale del lugar y corre para los baños más cercanos. Se encierra en uno de los cubículos cuando escucha entrar a alguien. Por pura intuición subes sus pies para que quien sea que este allí no la mire.

—Sé que estas aquí. —la áspera voz de un muchacho dice, claramente un alfa. —solo sal no te hare daño. —

Alma cubre su boca con su mano, tratando de no hacer ningún ruido. Mira por hacia abajo y maldice al notar los zapatos desgastados del chico detrás de la puerta. Cierra sus ojos y llora en silencio. Ella nunca quiso esto, ella nunca quería que su cuerpo fuera el de una omega necesitada del nudo de un alfa cuando está en celo, ella no quería ser marcada y pertenecerle a alguien para el resto de su vida. Y especialmente no lo quiere ahora cuando está a punto de ser forzada.

El muchacho sacude la puerta con fuerza haciendo que su cuerpo se inunde de pavor. Cuando este ha quitado la puerta de su camino el alfa la vuelve a ver con unos ojos negros, llenos de lujuria y deseo. Ella sabe que el olor de las omegas en celo los vuelven locos y tiene miedo de que la lastime.

—Vamos princesa, ven aquí. —baja la cremallera de sus jeans, sacándose los zapatos al mismo tiempo.

—Por favor no lo hagas. —ella suplica con lágrimas en sus ojos, abrazándose a sí misma.

—Nada de eso princesa, ven aquí y deja que mi nudo te haga sentir mejor. —el tipo se baja los jeans y bóxer.

Al ver que el tipo no se detendrá por las buenas, la pelinegra hace la única otra opción que le queda: grita por ayuda.

—¡Sh, princesa! —le pega una bofetada. —no seas una chica mala. —

El tipo la toma de las caderas, poniéndola de pie enfrente de él. De un solo jalón baja sus jeans, sin siquiera desabotonarlos e inhala el olor de líquido que su cuerpo está despidiendo por el celo. Baja una de sus manos y rosa su vulva, mojando su dedo con su semen.

—Por favor no. —susurra con la voz quebrada.

—¡Que no escuchaste que te dijo que no! —la voz más imponente de otro alfa dice, paralizando al chico.

Lo siguiente que ve es al chico siendo lanzado contra los lavabos y aun castaño de pie enfrente de ella. Él hace una mueca al concentrarse en su olor, pasando saliva. Cierra sus ojos por algunos segundos y cuando los abre la ayuda a levantarse del escusado.

𝖔𝖓𝖊 𝖘𝖍𝖔𝖙𝖘 • 𝕮𝖍𝖗𝖎𝖘𝖙𝖔𝖕𝖍𝖊𝖗 𝖁𝖊𝖑𝖊𝖟 • +𝟷𝟾Where stories live. Discover now