Nine

11.2K 1.3K 401
                                    


Seokjin a pesar de querer ir a la cama y dormir, decidió levantarse mas temprano de lo usual y preparar un sin fin de platillos para el desayuno. Amaba cocinar, pero había una razón mas específica del por qué lo estaba haciendo: Taehyung.

El sábado después de que Taehyung saliera de casa, reacciono a lo que le había dicho. Desde ese entonces se sentía un verdadero imbécil, su hermano solo había querido ayudarlo a desestresarse y a cambio le había contestado de mala manera. Se arrepentía pues pudo ver la expresión lastimada de su hermano menor.

Estaba frustrado, se la pasaba estudiando para no reprobar una materia más, no dormía bien, además le habían contado de la pelea en la que supuestamente había estado involucrado su hermano menor. Esas cosas habían sido la gota que derramó el vaso asi que le hablo de esa forma sin pensar. No pudo haberse sentido peor cuando se levantó de madrugada y se encontró tapado con un abrigo y en la mesa una nota con un número de teléfono, por lo que había leído en la nota era el número telefónico de alguien en el que era bueno dando tutorías de todos los grados.

Miró los platillos recién hechos deleitándose con su aroma, los llevó todos a la mesa mientras esperaba que su hermano bajara. Ese abundante desayuno era una disculpa por lo ocurrido hace unos días. Taehyung bajaba a pasos lentos mirando el suelo, Seokjin se sorprendió pues tae ya estaba vestido para ir a la escuela cargando su mochila en su hombro, aclaró un poco su garganta antes de hablar:

–Buen día TaeTae. —dijo Jin de la forma mas suave y amable que pudo.

–Buen día Seokjin Hyung.

Jin se puso rígido, que lo llamara por su nombre completo en vez de Hyung o jin Hyung era preocupante, aun así, sonrió.

–Que bueno que despiertas, hice mucha comida, ven siéntate. — palmeó la silla a su lado, Taehyung observo la comida un momento y negó.

–Lo siento, pero ya tengo que irme. —Taehyung abrió el refrigerador y saco una botella de agua, Jin tragó saliva.

–Pero todavía es temprano. —murmuró.

–Lo es, pero tengo cosas que hacer —Taehyung se acerco a la mesa y tomo una tostada untada con chocolate — ¿Puedo comer esto en el camino? —preguntó

-–l-claro — Jin asintió, el teléfono del pelirrojo comenzó a timbrar desde su habitación.

–Mierda. —Taehyung dejó la tostada en la mesa y subió en busca de su teléfono. Cuando jin lo perdió de vista se apresuró a buscar un recipiente y metió una buena porción de comida, lo cerró y lo metió en la mochila de su hermano.

Taehyung hablaba por teléfono con alguien, Jin lo miro atento hasta que colgó, tomo la tostada que dejo en la mesa.

–Nos vemos Hyung. - se despidió sin mirarle, jin asintió, al cerrar la puerta tomó su teléfono y la nota que le había dejado Taehyung, marcó el número y esperó.

–¿Hola?

Empezó a comer la tostada una vez se sentó en el autobús, la masticaba sin prisas, puesto que sería lo único que tendría en el estómago antes de su hora de descanso, había tenido ganas de sentarse con su hermano y devorarse todo lo que había cocinado. Cuando Seokjin se sentía culpable hacia un sinfín de comida para disculparse, sabia que se estaba disculpando con él, pero tenía algo que hacer ese día en la mañana, luego se excusaría con cuando llegase de la universidad.

Como era su nueva rutina, se dirigió a la sala de usos donde escondía a ese lindo perrito, sintió como alguien lo tomaba del brazo y miró a la persona rápidamente, era Jungkook que lo miraba serio.

Agust D » ʸᵒᵒⁿᵗᵃᵉᵍⁱDonde viven las historias. Descúbrelo ahora