Agust D » ʸᵒᵒⁿᵗᵃᵉᵍⁱ

Ten

Cuando el pelimenta se hubo marchado Taehyung se levantó, se acercó al escondite del perro y quito las cosas que lo ocultaban.

–Jodido pulgoso —susurró pues lo halló durmiendo —pensé que en cualquier momento ibas a ladrar.

Acarició al animal, su pelaje era suave y esponjoso.

–Tu aguanta un poco más, mis padres vendrán pronto, cuando vengan te llevaré a mi casa —prometió.

Bajó del autobús, y se encaminó a la calle que le había dicho Jimin, después de mucho pensárselo en el camino desvío su ruta para ir a la casa de Jungkook. Se disculparía con él.

Jimin le había enviado fotos de la casa de Jungkook, una vez la localizo se acercó a ella, subió los peldaños y suspiró.

–Tu puedes Taehyung. —se animó, tocó la puerta y esperó. No tardó mucho para que una mujer joven y hermosa le abriera la puerta, por los rasgos se veía claramente que era algún familiar de Jungkook.

La mujer lo miró de pies a cabeza.

–¿Se te ofrece algo?

Taehyung reaccionó de su trance.

–S-si, yo vengo a ver a Jungkook.

–¿Eres su amigo?

–Sí, me llamo Taehyung. —la mujer al escuchar eso sus ojos brillaron.

–¿Taehyung? ¿Kim Taehyung? —preguntó con emoción.

–Si...

–¡Oh por dios! Jungkook me ha hablado mucho de ti — la mujer abrió la puerta — pasa, pasa, mi hijo está en su habitación, puedes subir.

–Muchas gracias —Tae hizo una reverencia y entró, subió las escaleras, no fue difícil encontrar la habitación de Jungkook pues la puerta estaba llena de pósters, tocó.

–Pase -escuchó la voz del otro lado de la puerta, Taehyung abrió, el pelinegro estaba sentado en su escritorio haciendo tarea. Ambos se miraron en silencio.

–Puedo... ¿Puedo pasar? -pregunto el pelirrojo inseguro, Jungkook solo se limitó a asentir, entró y cerró la puerta tras de sí.

–Escucha... —comenzó Taehyung.

–Si vienes a decirme de lo que pasó en la mañana no pienso escucharlo —interrumpió el menor —ya te dije que no te estaba obligando a hacer nada y que puedes hacer lo que quieras, yo solo...

–Querias que confiara en mí —esta vez interrumpió Taehyung —lo se, no le entendí, Jimin habló conmigo y me hizo entrar en razón. Solamente me confundí y me asusté, pero Jimin me dió seguridad y pues lo que te dije estuvo fuera de lugar, vine a que supieras que retomaré mi plan no importa que pase... también vine a pedirte perdón y recuperar tu amor.

Jungkook lo miraba en silencio sin decir nada, no muy convencido si lo perdonaría tan rápido, Taehyung rodó los ojos y alzó una bolsa que tenía en la mano.

–También traje hamburguesas y un nuevo videojuego.

–Te amo con toda el alma, además, error es humano.

–Entonces... ¿Orgía con americanos? —Preguntó Jungkook comiendo su hamburguesa.

–Asi parece —contestó Taehyung cuando terminó de engullir su hamburguesa

–¿Oye y que hiciste con Agust D?

–Hoy me reuní con él —dijo de lo más tranquilo, Jungkook abrió los ojos más grandes de lo que Taehyung pensaba que podía hacer.