Profesor Shipper. [Rubegetta]

O•C•H•O

¡Mi Profesor Es Shipper!
Estúpida obra... Estúpido proyecto.

-N. O.-

Salieron del aula y Rubén ni siquiera le dirigió la mirada a su amigo, estaba molesto.

Willy.- Hey Rub, venga ¿Por qué estás molesto?

No hubo respuesta, sus amigos querían reírse, la verdad, pero sabían que si hacían eso solo empeorarían las cosas.

Tras las clases haber finalizado, Rubén estaba decidido a irse sin más, no quería ver ni escuchar más a sus amigos por un rato.

X.- Oye Rubén...
Rubén.- ¿Qué quieres!

Dice molesto, girandose, percatándose de que quien le hablaba no era ninguno de sus amigos, si no Samuel.

Rubén.- Oh... Yo... Lo siento, Samuel, perdona, creí que era Guillermo o alguno de ellos... De verdad lo siento...
Samuel.- Ya, no pasa nada...
Rubén.- Ehm... Bueno... Eh... ¿Qué necesitas?
Samuel.- Es sobre la obra...
Rubén.- Oh, ya veo... ¿Qué pasa con eso?
Samuel.- Creo que lo más cómodo para ambos será hacerla en vídeo, así que quería saber si podríamos vernos esta tarde para ponernos de acuerdo
Rubén.- Sí, me parece bien...
Samuel.- Bien ¿A las cuatro en tu casa te parece bien?
Rubén.- Sí, esta bien, nos vemos

Samuel se retiró y Rubén suspiró, había sido un día agotador, y eso que aún no terminaba.

Willy.- Rub, ¿sigues molesto?
Rubén.- ¿Tú qué cres?
Willy.- Venga, si no es para tanto
Alex.- Además Ruben, debes admitir que te agrada la idea
Rubén.- ¿Agradarme? ¿Cómo podría Agradarme el hecho de tener que hacer una obra acerca de la homosexualidad y que mi compañero sea Samuel, además de que ahora tenemos que presentar esa dichosa obra frente a toda la escuela solo porque a Guillermo se le ocurrió la grandiosa idea de arruinar por completo mi vida diciendo mi número para ser obligado por Luzuriaga a presentarla?
Willy.-  A ver, en primera... No lo hice a propósito, el profesor Luzuriaga me pidió que dijera un número, y casualmente era tu número de lista
Rubén.- Anda, casualmente, claro que sí
Frank.- Ya no estés molesto Rub, piensa que entre más rápido hagas ese proyecto, más rápido terminarán esa obra
Rubén.- Para ti es fácil decirlo...
Miguel.- Ni siquiera entiendo por qué te alteras tanto, te estamos ayudando solo
Rubén.- Eh dicho que NO-ME GUSTA- SAMUEL ¿Lo entienden?
Willy.- Te haces del rogar...
Rubén.- Agh, tengo que irme ya, nos vemos mañana, los odio
Frank.- Vale, también te queremos

Rubén comenzó a caminar en dirección a su casa, dejando a sus molestos amigos atrás.
No comprendía la manía de sus amigos de molestarlo con ese falso tema, porque joder, a él no le gustaba Samuel... Podría jurar que llegaría el momento en el que sus amigos lo molestaran tanto que decidiría matarlos a todos y no sentiría culpa alguna...

En fin, de camino a su casa estuvo escuchando música con sus auriculares puestos.
Una vez llegó a su hogar, se sorprendió al ver a su madre ahí pues normalmente ésta estaría trabajado.

Rubén.- Madre ¿Qué haces aquí? ¿No deberías estar en el trabajo?
Elizabeth.- Salí temprano porque no había mucho qué hacer
Rubén.- Oh, ya veo
Elizabeth.- ¿Vendrá Sam hoy?
Rubén.- ¿Huh? ¿Por qué preguntas?
Elizabeth.- Pues no se, se han estado viendo estas últimas semanas así que supuse que hoy les tocaría hacer su proyecto aquí
Rubén.- Pues sí, sí viene
Elizabeth.- Que bien, iré a preparar algo entonces

La mujer se retiró sonriendo, y Ruben suspiró, las emociones de su madre eran muy transparentes en algunas ocasiones...
Subió a su habitación algo cansando y harto del tema de Samuel y se recostó en su cama.

No comprendía qué había hecho él para que la vida le diera un destino así, sus amigos lo molestaban demasiado, su madre también, aunque ésta no se diera cuenta, y para empeorar la situación el profesor Luzuriaga también se había unido a eso de emparejarlo con Samuel cada que tenía oportunidad... Creía que con el cambio de profesor se liberaría de tener que trabajar con Samuel siempre, pero se equivocó, pues lo que había obtenido con la llegada del profesor Luzuriaga era algo mucho peor... Trabajar en ese estúpido proyecto acerca de la homosexualidad... Seguía sin creerse que justo a ellos les haya tocado ese tema, y lo que mas detestaba de todo esto, es tener que presentar esa estúpida obra... Jamás podría perdonarle eso a Guillermo, jamás.

Rubén se estaba preparando mentalmente para la llegada de su compañero, pues tenían que comenzar con el borrador de la obra... ¿Cómo la harían?
Rubén, obviamente, no tenía pensando, por nada en el mundo, hacer el papel de pareja, porque joder... Qué incómodo sería... Y por ello se tranquilizaba un poco, pues a lo mucho tendría que hacer el papel de un chico homosexual, y eso no significaba que tuviera que ser afeminado, porque no, no todos los chicos homosexuales eran afeminados y eso Ruben lo sabía, así que se sentía un poco más tranquilo por esa parte... Pero... Aun así, presentar la obra frente a todos los alumnos... O al menos a los que decidieran asistir a su actividad... No le gustaba para nada. El castaño agradecía que Samuel pensara igual que él y prefiriera hacer la obra en vídeo, porque joder, que incómodo sería hacerla en vivo...

No sabía cómo resultaría aquello, solo esperaba que no fuera tan malo como él pensaba...

Estúpida obra... Estúpido proyecto, pensó Rubén.