Profesor Shipper. [Rubegetta]

V•E•I•N•T•I•C•U•A•T•R•O

¡Mi Profesor Es Shipper!

"Estúpido Guillermo..."

-N. O.-

Un día más comenzaba, Rubén se despertó temprano por la mañana, con pereza y sin ganas de hacer nada, se levantó y comenzó a prepararse para un nuevo día de clases.
No había podido dormir lo suficiente por estar pensando en cómo confirmaría los sentimientos de Samuel por él, por lo que tenía unas ligeras pero notorias ojeras.

El chico, una vez se bañó y preparo para salir, se dispuso a ir a clases.

Al llegar, lo primero que vio al entrar al aula, fue a Samuel, quien ya se encontraba ahí con nada más y nada menos que con Elyas... Frunció ligeramente el ceño ¿Por qué mierda no había aclarado el tema de Elyas aún? Había olvidado por completo preguntárselo a Samuel el día anterior.

Saludó a ambos chicos y sin más se dirigió a su sitio.
Poco después, Guillermo fue el primero en llegar de sus amigos.

Guillermo.- Buen día... Te ves cansado ¿No dormiste bien?
Rubén.- No... Estuve pensando en algunas cosas
Guillermo.- *Sonríe* Creo saber a qué "cosas" te refieres...- Responde, mirando con disimulo a De Luque.
Rubén.- Calla...
Guillermo.- ¿No le has preguntado sobre Elyas?- Susurró, para que sólo Rubén pudiese escucharlo.

Rubén tan solo negó en respuesta.

Guillermo.- ¿Por qué...?
Rubén.- Lo olvidé por completo...
Guillermo.- *Suspiro* Bueno, ya pensaré en algo después... Por el momento deja de pensar tanto en eso, no lograrás nada saturandote a ti mismo con tus pensamientos.

Rubén tan solo asintió, pensando que Guillermo tenía razón.
Poco a poco los alumnos llegaron al aula, incluyendo a los amigos de Rubén y Samuel.

Algunos minutos pasaron y su profesor aún no llegaba, por lo que los presentes se encontraban hablando o jugueteando, haciendo el tonto aprovechando que estaban solos.

El sonido de la puerta siendo abierta fue lo que alertó a los alumnos, haciendo así que guardaran silencio al ver a un hombre entrando al lugar.

Xx.- Buenos días, mi nombre es Raúl Álvarez, seré su profesor de Psicología... Tomen asiento por favor

La voz tan neutra del mayor, logró que todos obedecieran la orden dada, para que después su repentino nuevo profesor, volviese a hablar.

Raúl.- Como ya os dije seré su profesor de Psicología, asumo que ya se conocen entre vosotros, así que me ahorraré las presentaciones... Primero que nada quiero que estén conscientes de que en mi clase no pienso estar llamándoles la atención como a niños de primaria, ustedes saben lo que hacen, así que ya decidirán si prestan atención o no.

Algunos alumnos tan solo se dedicaron miradas entre ellos, aquel profesor parecía ser bastante estricto.

Raúl.- Bien, me alegra que entiendan, por ahora tan solo os explicaré cómo se calificará y los temas que iremos viendo y si nos queda tiempo comenzaremos con algun tema

El profesor comenzó a explicar la forma en la que calificaría, los alumnos se mantenían en silencio escuchando al mayor, quien de vez en cuando hacía algunas preguntas a sus alumnos.

Tras unas horas, la clase había finalizado.

Raúl.- Vale, es todo por hoy, van demasiado atrasados con los temas, así que espero que se preparen porque mañana tenemos que ver dos o tres temas para estar al corriente - Seguido de, Algunas quejas se escucharon por parte de los alumnos. - Recuerden que no los obligaré a nada, si quieren trabajar perfecto, si no, pues no lo hagan, no es a mi a quien me afectará en la calificación

Dicho aquello, el profesor terminó de guardar sus cosas y tras despedirse de sus alumnos, salió el aula.

Guillermo.- Joder... Algo que me dice que con este profesor no habrá descanso alguno...
Frank.- Solo espero que no sea tan estricto como parece...
Alex.- Tenemos clase con Luzuriaga ¿Cierto?
Rubén.- Sí
Miguel.- Pues deberíamos ir ya, para no llegar tarde

El ambiente en la clase de Luzuriaga era completamente diferente al que había con el profesor Raúl, con Borja sí podían relajarse un poco más y no se le veía con cara de odiar el mundo.

Durante la clase no sucedió nada interesante, lo más destacable es que Rubén y Samuel estuvieron dedicándose unas cuantas miradas durante esta... Acción que no pasó desapercibida ni por Guillermo, ni tampoco por el profesor.

Borja.- Vale chicos, nos vemos la próxima semana, recuerden que el Lunes comenzaremos un nuevo tema.

Tras despedirse, los alumnos presenciaron cierta escena, su profesor de Psicología se encontraba esperando a Luzuriaga.

Los chicos se dirigieron hacia la cafetería, y durante el trayecto a esta se toparon una vez más con sus profesores.

Al verles juntos, Guillermo no pudo evitar hacer uno de sus comentarios.

Guillermo.- Mira qué felices se les ve... Esos podrían ser Samuel y tú si no fueran tan ciegos...

Rubén golpeó al pelinegro en el hombro, obteniendo una queja por parte del contrario.

Rubén.- No asumas que son pareja sin saber nada... Además ¿No habían prometido no molestarme más con el tema...?
Guillermo.- Vale, tienes razón, mi culpa... Con respecto al profesor Borja y el profesor Raúl también tienes razón, quizá son amigos y ya está
Frank.- Pues para ser amigos están bastante cerca...

Comentó el chico, al ver a ambos mencionados tomarse de la mano y entrar a la sala de profesores.
El pelinegro asumió que posiblemente su vista le había fallado debido a que no les había prestado la atención suficiente y tan solo dejó el tema de lado.

Guillermo.- En fin ¿Qué es lo que sigue, Rub?
Rubén.- ¿De qué...?
Guillermo.- Tu siguiente movimiento para conquistar a Samuel, supongo que quieres hacer algo ¿No?

El de cabello teñido se quedó unos minutos pensando... ¿Cuál era su siguiente movimiento?

Quizá debía centrarse de una buena vez en descubrir la situación sentimental de Samuel y así confirmar si salía con Elyas o no.
Debía tomar el valor de preguntarselo, porque joder, si no lo hacía jamás sabría si tenía alguna oportunidad con el castaño.

Rubén.- Supongo que preguntarle de Elyas...
Frank.- Pero esta vez sí hazlo...
Rubén.- Olvidé hacerlo ayer ¿Bien...?
Miguel.- Y cómo piensas preguntarselo...
Guillermo.- ¡Tengo una idea!
Alex.- Gritalo más alto, macho, que Samuel no escuchó
Guillermo.- ¡TENGO...!
Rubén.- ¡No hablaba en serio, idiota!

Respondió, tapando la boca del contrario con su mano, para evitar que hiciera algo tan vergonzoso.

Estúpido Guillermo, pensó Rubén...