~ IX ~ SOLUCIONES

2.2K 70 0
                                    

Después de quedarnos un rato en silencio, empezaste a hablar de nuevo.

- Albi... yo... estoy pensando en lo nuestro... y en mi relación con Maik - hiciste una pausa y, después de respirar varias veces, continuaste - yo... estoy pensando en dejarlo.

Me quedé pierda. ¿Dejarlo? ¿El qué? ¿Lo tuyo con Maik? ¿O lo que quisiera que fuese lo nuestro? Supongo que notaste mi duda, porque añadiste:

- Lo digo en serio Albi

- Pero... ¿dejar el que?

- Pues... dejar a Maik... y... estar contigo.

- Pero Nat... tú lo quieres... y él a ti... no puedes romperlo todo por mi...

- Sí, Albi... sí puedo

- Pero Nat... piénsalo

- Albi... si es porque tú no quieres estar conmigo... dímelo... y yo lo acepto... te lo juro

- ¡¡Noo!! Nat, no es eso. Yo sí que quiero estar contigo. Te quiero muchísimo pero no quiero destrozar tú relación con Maik. Solo te pido que lo pienses con calma, churri. Y que tardes lo que quieras en decidir algo. Y que me va ha dar igual si prefieres estar con él. Yo lo voy a aceptar, pero solo quiero que tú seas feliz y, bueno, saberlo. Pero en serio, piénsatelo con calma.

- Vale cariño. Pero igualmente es posible que deje a Maik. Lo nuestro ya no es como antes. Cuando entraste... bueno...  la verdad es que por una parte agradecí que hubieses entrado...

- ¡¿¡Qué!?! - casi chillé y me tapé la boca al instante, recordando la hora que era y que todo el mundo debía de estar durmiendo.

- Si Albi,... pero no por ti... por mi... porque... bueno... no lo estaba disfrutando... en plan... contigo es duferente... contigo... como que quiero más... que me gustas mucho Albi... y... bueno,... que te deseo muchísimo y... que cuando follamos en mi casa... que... lo disfruté muchísimo.

Me puse roja. No esperaba que te confesaras de aquella manera. Sonreí, suspirando.

- Me alegro Nat... yo... yo también lo disfruté mucho, churri. Y... bueno, la verdad es que...  deseo volver a estar contigo a solas para volver a disfrutar tanto contigo. Te quiero muchísimo Nat.

- Y yo Albi. De verdad que siento mucho haberte hecho daño. Te prometo que antes de la gira iré algún día a Elche a saludarte. Y a estar contigo. Te echo de menos. Y siento mucho que no pudiesemos arreglar las cosas ayer.

- Yo también. Fui una estúpida al irme corriendo sin dejarte decir nada. Y encima después de haberte gritado como te grite. Lo siento Nat. ¿Me perdonas?

- Por supuesto Albi. Pero... ¿tú a mi?

- Si, tranki. Lo entiendo perfectamente.

- Bueno... mejor te dejo dormir, ¿no?

- Será mejor que si. Hablamos por la tarde, ¿vale?

- Vale. Buenas noches cariño

- Buenas noches Nat. Te quiero muchísimo churri.

- Y yo Albi

Me mandaste dos besos y yo te los devolví. Después colgamos. Y yo abrí la puerta de mi habitación y me metí en la cama. Ahora ya podía dormir tranquila.

Desperté con las voces y los pasos de mis padres. Miré el reloj, eran las 10:30. Se me cerraron los ojos al instante; estaba muerta. No podía levantarme. Escuché a mus padres entrar en mi habitación. Pensaba que me dirían que me levantase, pero no escuché nada. Al cabo de un rato escuché que se alejaban y se diriguan a la habitación de mi hermana. Antes de dormkrme por completo les escuché hablando.

- ¿Tú sabes porqué está tan cansada? - le preguntó mi madre a Marina.

- Creo que sí

- ¿Qué pasa? - dijo mi padre

- Pues seguramente ha hablado con Natalia. Que tenían un problemilla y querían solucionarlo.

- Bueno... pues espero que lo hayan solucionado. - suspiró mi madre.

- Sí. Y mejor la dejamos dormir. Tampoco hay prisa. - dijo mi padre. Y fue lo último que escuché antes de quedarme completamente dormida. La verdad es que era una alivio que me dejasen dormir un poco más.

Me despertaron mis padres. No sabía exactamente cuanto tiempo había pasado, pero me apetecía seguir durmiendo un poco.

- Va Alba, hija. Levántate ya, que es muy tarde. - me susurró mi madre.

- ¿Qué hora es? - conseguí decir, todavía medio adormecida.

- Es la una, cariño.

- Vale, ahora voy.

Escuché que cerraba la puerta y me levanté. Me desperezé y abrí el armario para cambiarme de ropa. Me cogí unos pantalones cualquiera y una camiseta cualquiera. Me senté en la cama y me quité el pijama. Me vestí con lropa que acababa de sacar y salí de mi habitación.

Fui al lavabo y después me fui al sofá. Mi familia estaba sentada, esperándome. Me senté junto a ellas y abracé a mi madre Rafi.

Después de un momento de silencio, Rafi comenzó a hablar.

- Alba... ¿nos puedes explicar qué ha pasado?

La miré. No les había dicho nada de mi relación contigo ni nada de mis sentimientos y los problemas que habíamos tenido en el último día. Tenían derecho a saberlo, eran mi familia. Así que empezé a contarles todo desde el principio, desde la Academia de OT.

- Bueno... sabéis que Nat y yo nos llevabamos muy bien en la academia, ¿no?

- ¿Nat? Ahh, sí claro. - dijo mi padre sorprendido de que te llamase cariñosamente.

- Bueno, pues... a ver... que lo que siento por Nat no es simple amistad.

Mis padres me miraron sorprendidos y asintieron con la cabeza. Mi madre me abrazó más fuerte y me dio un beso en la mejilla.

- Y... bueno estoy enamorada de ella. Y ella de mi. Pero el problema es que ella tiene novio... y... bueno - paré.

Mis padres me miraron. Querían que continuase, así que respiré profundamente y continué.

- No es nada fácil intentar tener una relación con alguien que tiene novio.

- Ayer por la tarde tuvieron problemas - me interrumpió mi hermana. - Porque Alba fue a despedirse de Natalia y se le olvidó decirle que iba a ir a su casa. Y... bueno...

- ¿Qué pasó hija mía? - me preguntó mi padre.

- Pues que me encontré a Nat con su novio.

- En la cama - añadió Marina - follando.

Mis padres se miraron y después me miraron y me abrzaron. Nos quedamos así durante un rato, hasta que yo dije:

- Pero ahora ya hemos arreglado un poco las cosas. Nat y yo hemos hablado por teléfono y me ha explicado la situación. Porque no me la pudo explicar ayer porque yo me cabreé y le empezé a chillar y a empujar. - recordé la escena y no pude evitar ponerme a llorar. Nunca había querido hacerte daño, y aunque ahora supiese que estabas bien y me habías perdonado, igualmente me sentía fatal por mi reacción.

¿Nuestra relación solo es en OT?Where stories live. Discover now