ADICTIVO © COMPLETA

Capítulo 43: Lazos rotos.

Travis POV.

Liam no me ha hablado durante todo el trayecto de ida al instituto y eso en verdad me preocupa porque Liam no se queda callado ni un maldito segundo de su vida. Es como si ahora mismo sus palabras lo ahogaran.

—Ya suéltalo que se te ve la angustia de poder hablar—suelto burlón.

Melanie decidió irse temprano porque según ella quería madrugar para arreglarse y ser la primera de su clase en llegar. Recuerdo que desde muy pequeños era así: siempre quería ser la primera en todo.

Liam niega sin verme a los ojos y sigue en silencio.

—¿Liam qué mierda te sucede?—detengo el auto bruscamente y veo como se golpea un poco pero eso parece no importarle—Tu no eres así, ahora dime qué te sucede.

—¿Quieres que te diga que me sucede?—me cuestiona con sus cejas elevadas y en su mirada se nota que está molesto.

—mmm ¿Si?—aprieto mis labios mientras lo veo fijamente.

—Eres un maldito cínico Travis. O sea si, te conozco, conozco de tí que eres un maldito desgraciado que le gusta jugar con las mujeres y más que todo con las inocentes como Abby.

Ahora puedo entender que le está pasando, seguramente al ir a la casa de Damien. Abby lo agarro en sus manos para reprocharle como niña pequeña acerca de lo que según ella "hice". Aunque la verdad no había hecho nada malo, no sé qué pasará si se llegase a enterar que después de todo si hice algo realmente malo.

—¿Qué te dijo?

—Me dijo lo más importante para darme cuenta, ella quería solucionar las cosas contigo pero al parecer tu no—bufa—Y eso es lo que odio más de tí. Qué siempre eres así; las buscas, las enamoras y luego te largas con su corazón en tu maldita boca. Mientras te ríes, te drogas y tomas después de haber salido victorioso. En verdad pensé que cambiarías Travis, en serio pensé que Abby o al menos que tú cambiarias por ella—suspira—Tenía la esperanza de que ella fuera la que te salvará de tu infierno—luego se pasa la mochila de estudio para adelante y saca de ésta un sobre blanco. Me lo pasa con su mirada fría—¡Ah! Toma, lo encontré ayer en la habitación de tus padres. Estás solo en esto Blue, ya me cansé de tí—abre la puerta del copiloto y sale de ésta después de dejarme la carta en su asiento al ver que no tenía ganas de recibirla. Da un fuerte portazo y veo como comienza a caminar sin dar vuelta atrás.

He perdido a mis dos mejores amigos. He quedado solo, mis padres me dejaron también. Todos se están alejando de mí ¿Por qué mierda al menos no me escuchan antes de mandarme a la mierda?. ¿Y ahora qué es ese sobre blanco?. Lo tomo en mis manos con miedo en mi de lo pueda  haber allí.

"Ojalá y no sea tarde para cuando la leas".
Maule.

Siento como mis ojos se agüita al leer el pie de aquel sobre. Esa es la letra de mamá. Decido abrirla después de unos minutos.

«Querido Travis, mi pequeño de ojos azules espero y algún día puedas perdonarme y perdonar a tú padre. Sé perfectamente que no te he demostrado cariño, al igual tu padre pero quiero que sepas que ambos te amamos con todo y lo que eres. Estamos muy orgullosos de lo que eres ahora, de los amigos tan fieles que tienes y de la chica que tienes como novia, la rubia, ella si no me cae tan bien y espero que la dejes, en serio.
Travis...El objetivo de esta carta es para hacerte saber que nos iremos lejos de ti, muy lejos. Quiero que sepas que te dejaremos de todo, jamás te faltó algo y jamás te faltará. Aún no se si decirte el verdadero motivo de nuestra huida...pero muy pronto te enterarás, lo prometo. Prometemos volver para poder construir mejor nuestra relación como familia feliz, como siempre lo has deseado hijo. Te escribo con lágrimas en los ojos porque me duele dejarte de esta forma, pero tu padre lo quiso así y sabes cómo es él. Por favor no te rindas jamás, afronta los problemas con cara fuerte sin importar que tan graves sean.
Con amor Maule y Dylan»