Heart and Soldier II - El Regreso de la Esperanza [Undertale AU] (Español)

CAPÍTULO 24 - ENSIMISMAMIENTO

Dentro de la ilusión de cada uno, Asgore acababa de salir de su oficina y mientras volvía a casa dirigiendo su coche, se dio cuenta de que había parado en un jardín inmenso, lleno de flores. Él extrañó que el jardín estaba ahí, creyendo que había errado el camino a casa. Sin embargo, él no parecía importarse, su curiosidad habló más alto y él quería explorar aquel jardín y pasar un buen rato al lado de aquellas flores exuberantes. Asgore salió del carro y empezó a caminar por ellas oliendo el dulce perfume que exhalaban. Era maravilloso estar allí, él finalmente encontró un pedazo del cielo en la tierra y no se sentiría mejor estando en otro lugar que allí. Asgore entonces decidió cosechar varias de esas flores para llevar a casa y montar un ramo.

Al elegir cada flor y cosecharla, él miró a una flor y percibió que ya la había visto antes. Entonces, él la notó moverse y girar el centro hacia arriba y verlo, era Flowey. Cuando Asgore lo vio, se quedó perplejo y acabó soltando todas las flores que había cosechado. Flowey le sonrió de manera aterrorizante y entonces, un tornado de viento surgió alrededor de la misma, haciendo las flores del jardín despetalar y desaparecer. Asgore se protegió de aquel tornado y cuando el mismo desapareció, Flowey se había transformado en su forma omega y rió diabolicamente a Asgore.

Flowey: Todo lo que has conseguido, ¡destruido en un instante! ¡Usted nunca tendrá su vida de vuelta!

Asgore miró alrededor y percibió que el jardín había desaparecido, y además, todo había desaparecido. Él estaba en un lugar totalmente oscuro y sólo podía ver aquella forma espeluznante de Flowey delante de sus ojos. Él miró aterrorizado y de repente, el recuerdo de haber perdido todo lo que fue valioso en su vida, esposa e hijos, reaparecieron en su mente perturbándolo. Asgore cerró los ojos e intentó hacer todo para olvidar aquello, pero era inútil, Flowey continuaba gritando más alto, dejándolo desesperado.

Mientras tanto, Undyne estaba saliendo del camerino para grabar otro episodio de una serie de acción en la que ella era la protagonista. Estaba todo listo para comenzar el rodaje cuando Undyne vio el escenario y percibió que había un monstruo aterrorizando y atacando a la gente de una aldea. Ella miró al lugar perplejo y no pensó dos veces en detener a ese monstruo, pero cuando ella estaba a punto de ir hasta allá, el director de la serie le impidió.

Director: ¡Undyne! La escena forma parte del episodio, ¡no te atrevas a atacar a ese monstruo!

Undyne: ¡Pero él está atacando a la gente!

Director: Si lo hace, no vamos a terminar la serie.

Undyne: Pero...

Director: .... Comenzamos en cinco minutos!

El director apresuró a los actores para comenzar el rodaje y Undyne se sentía dividida, ella no sabía qué hacer. Ella no quería arruinarla pues actuar en una serie de lucha era su sueño desde chica. Pero ella sintió que si no hiciera nada, estaría manchando su nombre y su honor. En medio de ese conflicto interno, una voz reconocible surgió en su mente y Undyne se quedó estática al oírlo.

?: "... ¡Undyne! Nunca va a ser una guerrera si no luchar por su pueblo.

Undyne: "... estoy tratando..."

Undyne había cerrado los ojos cuando recordó la voz de su padre. Al abrirlos, ella recordó su pasado y se vio más joven, entrenando con él para ser una guerrera. Antiguamente, él era el capitán de la Guardia Real y Undyne deseaba seguir el mismo camino de él. Al principio, él se rehusó a no entrenarla y después de mucho insistir, acabó cediendo, entrenándola severamente. En aquel momento, Undyne estaba llegando a su límite y paró de moverse, cogiendo aliento, pero aquello no lo dejó satisfecho.