Peligrosamente Irresistible© ✓ (1)

°•Capítulo 9•°

Lo único que nos iluminaba era la ciudad. El cielo estaba totalmente oscuro y empezaba a hacer un poco de viento, había dejado mi chaqueta en el coche y no puedo evitar abrazarme a mi misma.

—¿Qué te pasa? —Me mira serio pero me vuelvo a poner como antes, con mis manos apoyadas en el cemento.
—Nada —No va a servir de nada que le diga que tengo frío.

Veo como se quita su chaqueta negra, la cual se encontraba en el coche y se la había puesto antes de bajarnos de este. Me la coloca sobre los hombros y me llega un dulce olor el cual llega a mi estómago y lo agita formando un gran cosquilleo. ¿Por que está siendo ahora simpático conmigo?
Veo como me mira, parece que me queda bastante bien por el brillo de sus ojos.

—Gracias —Musito con una mueca.

El chico asiente mirando mis ojos y rápidamente los desvía a la ciudad. Yo hago lo mismo y decido interrumpir este ambiente tan incómodo.

—Chase Atlantic no es mal grupo —Veo como suelta una sonrisa.
—Te lo dije —Dice mirando de nuevo mis ojos.
—Vayamos a algún sitio —Se levanta y me ofrece la mano para poner levantarme.

Mi pie se dobla al levantarme y me balanceo hacia a tras en el vacío. James tira de mí antes de poder caerme y me apoyo en su pecho algo asustada.

—¡Hey! Cuidado —Me dice con voz firme.

James acaba de salvarme de caer por el acantilado. Miro sus ojos y puedo oler mucho mejor su perfume el cual huele genial ya que lo tengo a centímetros, le miro agradecida sin entender por qué seguimos tan pegados. Nuestras cabezas se juntan lentamente pero se me viene a la mente Loren.

—No —Musito mirando sus labios.
—No es buena idea esto —Digo nerviosa. Me separo de él y veo cómo me mira de arriba abajo.
—Gracias por agarrarme... —Le digo con voz ronca y asustada.

Llevo su chaqueta la cual me quedaba enorme y tengo la piel de gallina. Mi pecho sube y baja rápido debido a que casi me caigo, la adrenalina recorre todo el cuerpo y estoy muy confundida por lo que acaba de pasar, si no llega a ser por Loren nuestros labios podían haberse juntado, no quiero ni pensarlo ya que mi pecho sube y baja rápido y estoy tan ocupada de pensar en James que no se si es por el beso o por que casi caigo al vacío. El chico se encuentra parado y aún más confundido que yo, por su expresión no parece agradarle nada que le haya rechazado pero ¿Qué quiere? Tiene novia, no puedo hacerle eso a nadie y el no debería hacerlo. Me quito su chaqueta rápidamente y se la entrego caminando hacia los arbustos dejando al chico parado y extrañado en el cemento. ¿Seguirá pensando en mí?

Llego al coche y entro confusa, cojo mi chaqueta y veo como el chico camina hacia la puerta y entra. Le temo al trayecto de donde quiera que vayamos, si antes había un silencio incómodo ahora será doscientas mil veces peor. Me pongo mi chaqueta y entro al coche cerrando la puerta lentamente, arranca el coche y entra de nuevo en la carretera.

Me resulta incómodo mirarlo así que decido mirar al frente. Las luces del coche iluminan la carretera y la mitad de los árboles que se encuentran a los lados, eran enormes y debido a la oscuridad no se puede ver la copa de estos. En la radio suenan canciones románticas y James las cambia continuamente hasta poner una de rock bastante fuerte. Parece que lo hace para castigarme por no haberle besado así que bajo la música y me mira enfadado.

—No hagas eso —Su voz es firme y no tan burlona como antes.
—No me gusta esta música —Aprieto los puños y lo miro enfadada.
—¡Me importa una mierda que no te guste, es mi maldito coche! —No puedo evitar formar una "o" en mi boca y cruzarme de brazos algo dolida.

Y estaba en lo cierto, no le ha parecido bien que no haya rechazado. El hormigueo que tenía en el estómago desaparece y aparece un odio y un asco pleno hacia James. Rezo por que me lleve a la fraternidad ya que no podría sonreírle ahora que me ha dicho eso. El trayecto se hace largo y veo que entramos en la zona de las fraternidades, sí, parece que él quiere finalizar esta velada tan extraña y confusa.

Para enfrente de mi fraternidad y sin mirarle abro la puerta y la cierro de un portazo.

—¡Cuidado! —Me grita. Menos mal que no lo he besado, es insoportable.
—¡Que te den James! —Grito sin voltearme para verlo mientras camino hacia las escaleras de la fraternidad.

Su coche se pone en marcha y cierro de un portazo la puerta de la fraternidad enfadada.

—Estúpido —Farfullo.

Veo como todas me miran desde el sofá impresionadas por mi comportamiento, la verdad nunca le había dicho a nadie que le den. Subo a mi habitación enfadada sin darles explicaciones a ninguna y me tumbo en la cama para analizar todo lo que ha pasado.
Me paso la mano por mi cara y gruño avergonzada, debería haberle dicho que no, debería haberme quedado en la fraternidad.

Me miro al espejo y me intento imaginar con su chaqueta, seguramente estaría ridícula con ella. Se me viene a la mente su olor el cual había quedado en mi ropa, huele genial, pensaría que olería a tabaco o como al coche de Dan, pero tiene un toque dulce y eso llama mucho la atención.

Decidí dejar de pensar en ese odioso chico y pensar por ejemplo de que mañana empezaban las clases y debería tenerlo todo listo. Coloqué delicadamente la ropa que me pondré mañana, unos vaqueros y una camiseta color rosa palo, coloqué mis zapatillas blancas limpias junto a la puerta y miré el calendario para no llegar tarde a ninguna de las clases.

Me puse el pijama y coloqué de nuevo el mono en el armario, olía bien así que ¿Para que ponerla a lavar?
Me tumbé en la cama y me estudié el calendario repitiendo una y otra vez las clases.

«lunes: literatura, lengua clásica, literatura general, teoría de los géneros literarios...»

Estudios literarios no es nada fácil pero me parece fascinante todo ese mundo, estoy muy interesada por la literatura y espero que se me dé bien este año. Voy a hacer caso a lo que dijo mi madre minutos antes de salir de casa y poner rumbo a la fraternidad:

—Aléjate de lo que te distrae Madison —Y eso es lo que haré.

Nada de distracciones.

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