°•Capítulo 59•°

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—¡Madi! ¿Estás despierta? —Grita Tyler desde el pasillo.

Abro bruscamente los ojos y empujo a James para que salga de la cama rápidamente.

—¿¡Pero qué mierda haces!? —Dice molesto y con la voz de recién levantado.
—Esta el novio de mi hermana en la puerta ¡Tienes que irte! —Digo recogiendo toda su ropa y entre susurros.
—¿Por la ventana? —Niego viendo como Tyler llama a la puerta.
—¡Un momento me estoy alistando! —Digo empujándolo hacia el baño.
—¡Métete en la bañera! —El chico me hace caso y se tapa con las cortinas de esta.

Corro para ponerme mi ropa interior y hacerme una coleta alta.
Hago la cama rápido y corro hacia la puerta para que Tyler pueda entrar.

—Dos años más tarde —Dice con una sonrisa.
—Lo siento —Digo viendo como mi hermana sube las escaleras y camina hacia mi habitación.
—Tu habitación es preciosa —Dice observando todos mis libros y decoraciones.
—Si —Le digo con una sonrisa.

La chica se voltea para mirarme de arriba a abajo. Las pulsaciones aumentan por segundos.

—¿No tienes una camiseta igual Tyler? —Mis piernas empiezan a temblar y me quedo sin voz.

Tyler coge el pestillo el cual lo había dejado encima de mi escritorio y se voltea para mirarme.

—Si, es igual —Dice extrañado.
—¿Madi? —Mi hermana se cruza de brazos.
—Era unisex —Farfullo.
—¿Unisex? —Asiento veloz.
—Ya sabes, me gusta las camisetas largas como pijama —Digo con una sonrisa falsa.
—Vale... —Dice andando hacia mi cama y observando toda la habitación.

El ritmo cardíaco se dispara cuando mira hacia la puerta del baño la cual está cerrada.

—¿Un vestidor o un baño? —Dice caminando hacia ella.
—¡Espera! —Grito antes de que la chica toque el pomo de la puerta.
—Es un baño y esta sucio, mejor no entres —La chica rueda los ojos y no me hace caso.
—Madi tienes un problema con el orden y la suciedad seguro que es una tontería —La chica entra al baño y empiezo a rezar porque no descubra a James.
—¡¿Pero esto qué es?! —Corro hacia el baño con los ojos cristalizados.
—Puedo explicartel... —Mi hermana tiene un bote de champú en las manos y está observando la etiqueta.
—Es mío, así que fuiste tú la que me lo robó —Dice con una mirada asesina.

Suspiro aliviada y asiento con una sonrisa nerviosa. Nunca lo había pasado tan mal.

—Este baño es impresionante —Dice con una sonrisa.
—Si, salgamos a ver cómo va Tyler —Ella asiente y camina delante de mí.

Cierro la puerta del baño y me apoyo en ella para volver a respirar con tranquilidad. Si hubiese descubierto que James está en la bañera tendría un grabe problema. Mi hermana se sienta en la cama.

—¿Qué colonia usas? Huele a melón —Mis mejillas se ruborizan
—Se me acabó ayer, si me acuerdo del nombre te lo digo —La chica asiente y observa la habitación desde la cama.

Un papel reluciente de color plateado salta a la vista de mi hermana y no tarda en cogerlo del suelo y observarlo. El ritmo cardíaco vuelve a dispararse, esta vez no tengo escapatoria.

—Madi esto es... —Traga saliva y niego rápidamente.
—No claro que no, no sé cómo habrá llegado hasta aquí —La chica toca el grueso plástico plateado.
—Madi esto es el envoltorio de un... Condón —Traga saliva y Tyler se voltea para mirarme.
—Que no —Le respondo.
—Si Madi, si lo es, lo sé porque... Bueno lo sé ¿vale? —Miro el papel y se lo quito de las manos.
—¿Lo has hecho con Gabriel? —Dice con una carcajada.
—No —Le respondo nerviosa.
—Si que lo habéis hecho ¿Y qué tal? —Ruedo los ojos.
—Si, me has pillado —Suspiro haciéndola reír a carcajadas.
—Eso es fantástico, me encanta ese chico y a Tyler igual, ayer estuvimos hablando sobre él y hacéis una pareja espectacular —James tenía razón estoy empezando a utilizar a Gabriel cómo tapadera.
—Si pero, no quiero que le digas a nadie nada sobre esto ni a Gabriel, queríamos mantenerlo ya sabes... En secreto —Mi hermana asiente con una sonrisa.
—Claro que si Madi, Tyler tiene muchas gomitas por si Gabriel necesita —Dice con una sonrisa y un guiño.
—Claro yo le daré —Esto se nos está yendo de las manos.
—No, no hace falta de verdad —Tyler termina de colocar el pestillo y guarda su herramientas.
—Esta bien solo tiene que avisarme —Dice el chico haciéndome pasar un mal rato.
—Gracias —Digo tragando saliva.
—Iremos luego a comer y a seguir viendo la ciudad ¿Qué tal si vamos por la tarde al centro comercial los cuatro? —Asiento con una sonrisa.
—Si, me encantaría —Estos salen de mi habitación y no tardo en cerrar la puerta y echar el pestillo.

Respiro hondo, nunca antes lo había pasado tan mal. Puedo ver cómo James sale lentamente del baño y mira a su alrededor preocupado y más tarde me mira a mí.

—He estado a nada de no volver a pisar esta fraternidad —Toco mi cabello mientras respiro hondo.
—A faltado poco —El chico se pone sus vaqueros y me observa con su camiseta.
—Si, lo siento —Me quito la camiseta y se la doy rápidamente.

El chico me mira de arriba a abajo, no me había dado cuenta que estaba en ropa interior pero no me importaba ya que él me había visto sin nada. Camino hacia uno de los cajones y cojo una camiseta y unos pantalones para poder bajar a desayunar. Mi barriga gruñe y al voltearme puedo ver cómo James sigue con la mirada posada en mi cuerpo, el chico mira hacia otro lado y se coloca su camiseta.

—Iré a ver a Danna, así no sospecharán —Asiento y el chico camina hacia mí para darme un cálido beso en la frente.

Termino de arreglarme y bajo a desayunar, me llevo una sorpresa al ver a todas desayunado y a James sentado en el sofá viendo la televisión.

—¿Has pasado la noche aquí? —Le pregunta Hope.
—No —Dice rodando los ojos y soltando un suspiro.
—Esta bien... —Dice sentándose en su sitio y observando a Lydia.
—Buenos días —Digo haciendo que todos me miren
—Buenos días —Dicen todos al unísono menos James.

Camino hacia la cocina y me preparo un bol de cereales con un zumo. Miro a James el cual desvía la mirada de nuevo hacia la televisión y Lydia lo nota.

—¿Qué tal has dormido? —James sigue mirando hacia la televisión y puedo ver cómo los dos tragamos saliva.
—Bien gracias —Todas miran a Lydia extrañadas.
—¿La resaca bien? —Les digo a todas mientras me siento en la mesa.
—Si, bien —Dice Esme con una sonrisa.

Danna baja las escaleras y mira a James impresionada, más tarde me mira a mí pero me hago la loca.

—Asi que estabas aquí, pensé que te habías ido —Le dice Danna a James.
—Te estaba esperando —Responde él.
—Voy a desayunar y nos vamos —El chico no dice nada y continua mirando hacia la televisión.

Ya no recordaba al James borde, llevo tantos días sin saber de él que me resulta extraño verlo en la fraternidad. Tengo miedo de que Lydia sepa que ha pasado la noche conmigo en mi habitación, pero espero que deje de sospechar.

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Peligrosamente Irresistible© ✓ (1) Where stories live. Discover now