°•Capítulo 27•°

55.8K 2.1K 69
                                    

—Tengo que ir con las chicas, pasarlo bien —Le digo a todo ellos.

Me he llevado varias miradas de: rencor, asco, envidia, y sobretodo de mucho odio por parte de Loren. Yo de vez en cuando le echaba alguna que otra mirada de odio con una leve mueca forzada. Yo no estoy con James no sé por qué me tiene tanto odio.
Camino hacia el jardín donde se encontraban varios chicos sentados en una carpa repleta de luces, las chicas se encontraban en el mismo sofá que en el de Daniel todas ellas se reían bastante al oír algunas historias de aquel chico.

—Madi ven —Dice Esme entre carcajadas.

Me siento en un sofá individual el cual se encontraba enfrente de ellos.
Daniel tiene en las manos varias bolsas repletas de una planta verde.

—¿Queréis? —Niego rápidamente y miro hacia las demás chicas las cuales niegan también.
—Vamos esto es la hostia —Dice sacando un poco.

Mientras él intenta convencerlas miro mi teléfono y veo un mensaje de Sam:

Vas preciosa Madi.

Gracias Sam tu también vas muy bien.

Gracias.

Así que... Estás conociendo a Loren.

Si bueno, pero no creo que lleguemos a nada sé que lo hace para poner celoso a James.

Menos mal pensaba que no te darías cuenta.

Madi, no soy tan estúpido.

Ya veo.

¿Y tú cómo vas con James?

Oh, James y yo solo somos amigos.

Me alegro, ese chico es muy idiota y solo trae problemas.

Si...

Bueno Danna me está echando la bronca de que no estoy hablando con nadie ¿Te llamo luego?

Claro luego hablamos.

Me estaba aburriendo bastante así que decidí ver la enorme y preciosa casa de Drake.

—Ahora vuelvo —Les digo pero no me llevo ninguna respuesta, todas estaban fascinadas con aquel chico.

Camino hacia el interior de la casa pasando por aquella piscina con el suelo de madera oscura y fuentes. Al entrar me doy cuenta que hay mucha más gente, camino hacia las escaleras empujando y pidiendo permiso a la vez. Cuando subo veo varias habitaciones las cuales están cerradas con llave, me llevo una decepción pero entro en el baño el cual es enorme y tiene una gran bañera donde puede caber más de una persona. Me lavo las manos y me doy un par de toquecitos en la cara con aquella agua fría y me seco las manos con papel. En la bañera hay varios condones usados y un sujetador, también hay varias botellas de alcohol y vasos de plástico por el suelo.

—¿Quién limpiará todo esto luego? —Digo con asco al ver todo desordenado.

Me miro de nuevo en el espejo, no voy nada mal ¿Como no he podido impresionar a James? Me quito ese pensamiento de la cabeza, no me visto así para impresionarlo, solo quiero cambiar, ser una nueva persona, ser una chica adolescente de verdad.

Salgo del baño  y miro hacia el final del pasillo donde está James apoyado en la barandilla de la escalera, contemplado desde arriba a todo el mundo.
No se si se ha dado cuenta de que estoy detrás de él así que camino hacia él y me pongo a su lado para ver a toda la gente bailando y bebiendo.

—Debes irte —Lo miro enfadada.
—No sé por qué eres tan grosero cuando esta mañana querías saber más sobre mí —El chico rueda los ojos y toma un trago de su vaso lleno de alcohol.
—Me voy a ir de la fiesta —Parece dolorido pero intenta no parecerlo.
—Te estaba esperando para irnos —Su carácter es tan variable, tan impredecible.
—¿Es por Loren y Sam? —El chico camina hacia las escaleras y baja lentamente.
—Te espero en el coche —Dice enfadado.

Aprieto los dientes y me bebo de un trago aquel licor tan amargo y desagradable pensando que era agua.

—Quiero irme a la fraternidad —El se encoge de hombros y sigue caminando hasta desaparecer en aquella multitud.

Bajo las escaleras y dejo el vaso en una de las mesas del salón, James solo se limita a tirarlo al suelo y a salir de la casa. Camino tras él hasta salir de la casa y bajo las escaleras de la entrada lentamente para no tropezar con los tacones.

—¡James! —Grito enfadada.

El chico se voltea y me mira, sus ojos están inyectados en sangre pero parece que no le afecta tanto el alcohol.

— ¿Cuál es la parada de autobús más cercana? —Mi voz tiembla ya que ha bajado la temperatura bastante.
—No lo sé —Farfulla de nuevo.
—James estás borracho —Digo antes de que abra el coche.
—Déjame conducir a mí —Aunque yo haya tomado alcohol sé que no me hará nada, me siento bastante bien.
—Te he dicho que el alcohol no es nada para mí —Abre la puerta y se monta en el coche.

El chico abre la ventanilla, me mira serio y con una mirada fría y distante.

—Sube —Consigue decir después de mirarme unos segundos a los ojos.
—James es mala idea —Estoy hipnotizada por culpa de esos ojos azules.
—Madison ven conmigo —Su voz es ronca y parece dolorido.

Se me parte el corazón al verlo así y no me queda otra que subir al coche y mirarlo de nuevo a los ojos. Toca mi mejilla y más tarde mi labio inferior haciéndome retorcer y poner la piel de punta.
Besa mi frente y agarra el volante para poner en marcha el coche, la dulzura con la que acaba de tocarme me conmueve, cuando es así me lleva a las nubes me hace sentir lo que nadie me hace sentir, sabe cómo nublarme los sentimientos y como dejarme totalmente confundida, es tan impredecible.
Pone las canciones que a él gustan y le da palmadas al volante con las palmas de sus manos, mientras mueve la cabeza ligeramente, suelto de vez en cuando una sonrisa y el chico me enseña sus hoyuelos para que me quede sin respiración, no es la primera vez que sonríe cuando está borracho, creo que el James borracho es el James que quiero que sea; el chico simpático, sexy, peligroso e irresistible.

Íbamos al sitio de siempre, a nuestro sitio, al sitio donde siempre estaba él, al sitio favorito de James. La oscuridad y el sonido de los grillos y de la ciudad nos hacía estar en completo silencio.
No nos bajamos del coche, James apaga la radio y voltea para mirarme.
Estoy mareada y siento que estoy ardiendo ¿Qué demonios llevaba eso? Lo único que sé es que James está tan atractivo con esa camisa negra ajustada, sus ojos están brillando como nunca y puedo ver cómo aparecen cada vez que habla sus hoyuelos, son tan lindos.
Siento como todo me da vueltas y como derepente me hundo en mis pensamientos y dejo de oír a James. La cabeza me va a explotar pero solo quiero reírme de mi misma y de la cara que tiene James al verme así, esto es fabuloso.

•~~~~~~~•~~~~~~~•~~~~~~~•~~~~~~~~•

•~~~~~~~•~~~~~~~•~~~~~~~•~~~~~~~~•

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Peligrosamente Irresistible© ✓ (1) Where stories live. Discover now