°•Capítulo 24•°

59.9K 2.2K 197
                                    

La luz del sol entra por la ventana y me hacen abrir los ojos y mirar al reloj.

—¡¿La una?! —Grito

Me levanto rápidamente, no soy una chica de levantarse muy tarde y para mí esto es nuevo. Hago la cama muy veloz y me alisto para bajar a ¿Desayunar?
Bajo las escaleras observando que todas seguían durmiendo, mis tripas gruñen exageradamente así que cojo una galleta para callar mis gruñidos.
Lydia y Hope se despiertan con una mascarilla rosa en la cara y no pueden evitar reírse de ellas mismas.

—Buenos días Madi —Dicen yéndose hacia el baño.
—Buenos días —Respondo después de masticar.

Danna se levanta al igual que Esme la cual toca su cabeza dolorida, los ojos de Esme están rojos y su cara pálida, las dos bajan a la vez las escaleras.

—Vaya... Tienes una pinta asquerosa —Dice Danna mirando a Esme.
—Gracias Danna —Le sonríe sarcásticamente y se dirige hacia la estantería de las medicinas la cual está en la cocina.
—¿Qué tal si pedimos comida china? —Le pregunto a Danna la cual se encoge de hombros.
—He quedado con James —Me quedo callada y algo dolorida al recordar las palabras de ayer.
—Se lo preguntaré a Jess —Dice Esme con un vaso de agua y una pastilla para Jess.
—¿Comida china? —Dice Lydia con una sonrisa.
—Llama ¡Ya! —Dice con una carcajada.

Asiento y miro a Danna la cual me mira muy pendiente. Creo que James le ha contado lo de ayer y la mayoría de cosas, mi cara es seria y algo dolorida pero no me importa, no somos nada, no hay nada, ni nunca seremos nada.
Ando hacia el teléfono y marco el número del restaurante de comida china más cercano.

—¿Qué queréis comer? —Le pregunto antes de darle al botón para llamar.

Lydia corre hacia un pequeño cajón junto al televisor, coge un lápiz y un papel y escribe lo que cada una va a comer, Hope sube hacia la segunda planta para preguntarle a Jess y a Esme lo que quieren comer.
Una vez listo todo el pedido llamo a el restaurante y le digo al chico todo lo que vamos a comer.

—Todo estará listo dentro de 20 minutos —Le digo que perfecto y cuelgo.

Supuse que nadie quería ir a por la comida y no me quedaba otra que ir yo a por ella.
Subo a mi habitación, y entro en el baño para alistarme el cabello. Recojo mis mechones rubios oscuros en una coleta alta y me hecho un poco de agua tibia en la cara para dejarla limpia. Camino hacia la cama y enciendo mi móvil para ver si hay algún mensaje de Sam.

¿Qué tal si te llevo a comer a algún lado?

Cambio de planes, Loren me ha llamado para ir a comer más tarde ¿Que tal si voy a verte ahora para hablar sobre la fiesta?

Me lo había mandado hace una hora. Al oír el timbre de la puerta supuse que era el así que me miro al espejo observando que voy bien, me ajusto la coleta y los cordones de las zapatillas y camino hacia las escaleras. Bajo rápidamente pero me paro en seco al ver a James sentado en el sofá contemplado como bajo las escaleras.

Todas se encuentran en la cocina enfadadas mirando a aquel chico vestido de negro y mirada sería y fría. Lydia no se encuentra en el salón así que suelto un leve suspiro, no quiero que lo pase mal ya que cada vez que lo ve se le nota en la cara que se siente dolorida e incómoda.
El timbre suena y me quedo paralizada en el penúltimo escalón antes de tocar el suelo, James mira a la puerta y lo hace salir de sus pensamientos bruscamente. Me quedó sin respiración al ver a Sam entra con una maravillosa sonrisa y no puedo evitar querer que la tierra me tragase y me escupiera en un sitio muy lejos de aquí.
James se levanta del sofá y me mira cabreado.

—¿Qué tal? —Dice Sam antes de darse cuenta que James está allí.

Tiene la mejilla morada y en el labio tiene una pequeña tirita. Camino hacia él y toco su mejilla izquierda, el chico se queja un poco y no puedo evitar mirar a James el cual se encuentra con los puños cerrados y la mandíbula tensa.

Peligrosamente Irresistible© ✓ (1) Where stories live. Discover now