Capítulo 18

9.1K 447 13
                                    

Capítulo dedicado a: LuisaudryBonilla
Gracias bonita por votar y comentar, besos🌺
Disfruta del capítulo.

Un vestido plateado, con diamantes y mucha brillantina estaba dentro de una caja que había sido puesta en mi cama. La nota que traía la caja decía que era un regalo por parte de Will y vaya regalo. El vestido era muy bonito, era abierto por detrás, osea que dejaba ver mi espalda de una manera muy sensual. Era largo hasta los pies y a un lado, tenía una franja abierta, dejaba ver una pierna al desnudo. Era muy exótico y sexy.

Dejé todo en su lugar y fui a prepararme para ir a la oficina de O'Conner. Saqué un vestido vinotinto sencillo junto a unas sandalias plateadas y medias pantis. Entré a la ducha y me bañe lo más rápido posible, la hora corría y quería estar ahí lo más temprano posible. El miedo y los nervios me carcomían por completo, sentía pánico y terror pero era algo que debía calmar y decirme que todo saldrá bien, y aún así no lo salga, pues la vida sigue. Me vestí un poco más relajada y observé la hora, era un cuarto para las ocho. Me senté frente a la comoda y empecé a peinar mi cabello, haciéndome una coleta que me quedaba sencilla, también tomé una banda y me la coloqué como cintillo,me veía un poco de los años viejos.

Maquille mi rostro con solamente polvo, rubor y brillo.

Todo se veía como si fuera natural. Salí de mi habitación y cogí la cartera junto a mi celular, entonces Carolina se plantó frente a mí y esbozó una sonrisa.

-¿Estás lista?

-Sí-«No».

-Te ves muy bien, ese estilo me gusta-halagó y encogí un hombro.

-Gracias, supongo.

Llegamos al estacionamiento y nos subimos al auto. Mientras que Carolina conducía a mi destino, encendí la radio. En ella sonaba una canción de Ariana Grande, God is woman. Tarareé la canción bajito hasta que Carolina estacionó delante de mi ex trabajo. Los nervios hicieron presencia pero aún pero, empecé a redactar pequeñas imágenes de rechazo y dolor. Cerré los ojos por un breve segundo, y observé a mi hermana.

-Estaré aquí-posó su mano encima de la mía.

-Va a ser doloroso-digo con la voz ahogada-. Verlo colgando de los brazos de otra mujer que no sea yo...

-Eh, eh, Elisse-tomó mi barbilla con su otra mano libre y obligada me hizo mirarla a los ojos-. No te mártires, él echó a perder todo, él la escogió por encima de ti.

-Lo sé-admito y vuelvo a desviar la mirada-. Lo único que siento es dolor. Sé que me engañó y que en lo más fondo de mi ser, lo odio, pero aún así lo amo. Y espero perdonarlo algún día.

-Tienes que salir ahora-incita-. Se positiva.

Asiento.

Abro la puerta del auto y con el corazón en mis manos, salgo. Empiezo a caminar desconfiada hasta la entrada, los mismos guardias que he conocido siguen trabajando aquí por lo que los saludo amablemente. Entro por completo al edificio y pequeños recuerdos hacen flash en mi mente. Resoplo por lo bajo y espanto todos los recuerdos. Sigo con la mirada alta y llego al ascensor, marco el piso de siempre y espero. Le doy una ojeada rápida al bolso para mirar si aún siguen las evidencias ahí y es así.

Las puertas se abren y cuatro personas entran en mi lugar. Salgo del ascensor y con las palmas sudando llego a la recepción.

-Por favor con O'Conner-pido sonriendo falsamente.

Mi corazón bombea rápido que me da miedo.

-Él está en una reunión y saldrá en quince minutos-la chica, que es nueva, sonríe dulcemente. No parece ser igual a las demás víboras por lo que dejo mi sonrisa a un lado.

Secretaria del sexo©Where stories live. Discover now