Secretaria del sexo©

Capítulo 22

Capítulo dedicado a:
CelinaAlarc0n
¡Que disfrutes y disfrute del capítulo!
Besos.

-¿De q-qué casa hablas?

-De la mía-exclamó sosteniendo mi cintura con sus manos-. Vamos a mi casa, por favor...

-No creo que sea una buena idea-refuté nerviosa.

«La ropa quedaría tirada en todos lados».

¿Por qué hace calor? ¿Qué pasó con el frío?

-¿Por qué no? Me sentiría muy bien tenerte entre mis brazos otra vez Elisse.

-No me digas eso-farfullé mordiendo mi labio.

¿Y ahora qué hago? Mi corazón dictaba feliz que me fuera con él a su casa para pasar una noche mágica y yo realmente estaba nerviosa por quedar a solas con él, en un apartamento.

Aunque me quedaran muchas opciones, pensé en decirle que sí. No quería quedarme en mi apartamento y mucho menos quedarme aquí en éste lugar, por lo que, irme con Conner me parecía perfecto y algo espeluznante, porque sabía lo que vendría a continuación al estar en su apartamento. Observé los ojos de Conner y en ellos solamente había miedo. Tal vez el miedo a que lo rechazara, pero en mis planes ya no estaba eso. Que suceda lo que tenga que pasar y listo.

-Está bien-sonrío.

-¿En serio? -él parece no creérselo.

-Sí, ¿por qué no?-digo y paso mi mano por su mejilla-, no quiero quedarme aquí. Mucho menos sola en mi apartamento.

Él parece entenderlo y asiente.

-Vamos-toma mi mano y entrelaza nuestros dedos, tan sólo con hacer eso hace que mi corazón lata muy deprisa.

Caminamos hasta la acera dónde hay algunos autos aparcados y él se detiene frente a su Audi, le quita el seguro a las puertas y cómo un caballero-me sorprendió un poco, no tengo idea porqué-, me abrió la puerta de copiloto, a lo que yo le lanzo una mirada furtiva, podría haberlo hecho yo. Después de segundo entra al auto y lo enciende con calma, lo pone en marcha y quedamos en un silencio que me resulta cómodo. La música que suena en la radio es la de Justin Bieber con Ed Sheeran y la tarareo bajito mirando a la ventana.

La mano de Conner en mi muslo me hace sobresaltar de mi lugar, me asustó el muy capullo, encima se echa a reír. Mi corazón había empezado a latir rápido del susto.

-Es que estás loco-exclamo-. ¿Acaso me quieres matar de un infarto?

-De un orgasmo.

-¿Perdón? -sí, lo escuché muy bien. Sólo espero a que lo repita pero se queda completamente callado mirando al frente.

Mis mejillas las siento súper calientes,me hago la loca y nuevamente observo la ventana con ansias de llegar ya a su casa.

-¿Cuánto falta? -pregunto al cabo de minutos.

-Ya llegamos-sonrió.

Bajo sin prisa del auto y miro el edificio frente a mí, tiene pinta de ser el más lujoso de New Orleans. Espero a que Conner cierre el auto con seguro para avanzar, llega a mí con unas bolsas en su mano izquierda y con la disponible la deja en mi cintura, instándome a caminar con él.

-Vaya si es lindo-digo mirando el lugar por dentro.

-Cambié de apartamento después de todo lo que pasó con Kendall-confesó y hice una mueca-. Perdón. No debí haber dicho nada si aún te incómoda el tema.

-Vale, no te preocupes-sonrío algo tensa.

Entramos al elevador y marcó el último piso, obviamente que el Penthouse. Fue poco el tiempo en el elevador, las puertas se abrieron y dejaron mostrar una sala de estar grande y bien decorada, los ventanales dejaban ver una vista demasiado hermosa, me hipnotizó por completo ver la ciudad de New Orleans tan hermosa cómo esta noche. Había estrellas en el cielo y era luna llena.

-Es hermoso, ¿verdad?

-Sí-murmuré.

Me quité los tacones que me mataban los pies y los agarré con una sola mano. Seguí a Conner hasta la cocina y lo vi depositar comida en la alacena y nevera. Un paté de Limón llamó completamente mi atención, haciendo que la boca se me aguara pero no dije nada, con tan sólo Conner ver mi expresión se dió cuenta de lo que quería.

-¿Quieres paté?

-No yo... bueno sí-me sonrojé. Malditas hormonas, por todo tenía que sonrojarme-. Son los antojos, no me culpes.

-Es realmente fascinante, la verdad-sus ojos brillaron-, seré papá. Cuando te veo el pecho se me hincha de alegría, felicidad... me siento completo, eres lo mejor que me ha podido pasar Annelisse. Vamos a tener dos hermosos bebés. Te amo.

Los ojos me pican por querer soltar las lágrimas así que solamente cierro los ojos y las dejo salir. Esto ya no es un sueño, es mi realidad y está pasando. Realmente Conner me ama tanto a cómo ama a los bebés en mi vientre, realmente lo veo en sus ojos y me hace sentir segura, lo suficiente. En sus ojos hay tanta felicidad que me hace querer gritar. Lo amo tanto que caminará el brasas calientes con los pies descalzos sólo por él. Iría al mismísimo infierno sólo por él, haría de todo por él.

Es el amor de mi vida.

Realmente es el amor de mi vida.

Amo a este hombre, me hace sentir segura, feliz, amada, plena, en confianza...

-Santo-susurro-. No puedo con tanto.

No digo más y me lanzo a sus brazos. Nuestros rostros quedan a centímetros y sin perder más tiempo lo beso. Lo beso lento, pero de un momento a otro el beso empieza a volverse cachondo, húmedo y julio que me vuelve loca. Sus manos empiezan a bajar por el borde de mi vestido, quitándole el seguro para bajarlo por completo aunque no entiendo porqué no lo ha arrancado aún. Nos separamos por aire y entonces empieza a dejar besos húmedos de mi cuello hasta mis clavículas y gimo bajito.

-Vamos a la habitación-me toma entre sus brazos y va directo a la primera habitación que se encuentra.

Me deja sobre la cama y en un desespero me empiezo a quitar el vestido sin cuidado, ya cuando el vestido está en el suelo, quedo en ropa interior. Conner recorre mi cuerpo de arriba a abajo y hace que mis mejillas se tiñen de rojo.

-Eres arte-me dice-. Eres una maldita obra de arte.

Me llaman DJ tijeras...

¡No me maten! Jsjsksksksksks, los amo, gracias por votar, me hacen muy felizzzz. ¡Ya somos 5k! Gracias, muchísimas gracias. Los amo muchísimo.

Tal vez esta noche les tenga otro capítulo o mañana.

¡Chao, besos!