Daddy Issues // Kookmin

21- Daddy

Maratón 1/5

Cerró el grifo del agua y tomó una toalla para secarse. No paró de tararear aquella canción de Lana del Rey mientras se colocaba la bata de baño de color rosa pastel. Era viernes por la noche, ya había terminado de cenar con su hermano y decidió que no saldría esa noche.

Se arrojó a la cama, más tarde se pondría el pijama, y tomó su celular para ver sus notificaciones. Jin le había enviado un mensaje invitándolo a una fiesta de ricos, pero no se sentía de humor para tolerar a esa gente. Ignoró por completo el mensaje de Taehyung cuando su celular comenzó a sonar, el nombre de Jungkook apareciendo en la pantalla.

- Vaya, es raro que me llames- se acomodó mejor en la cama cuando atendió la llamada, una sonrisa tirando de sus labios- ¿No estás trabajando o algo así?

- Algo así- contestó Jeon- Estoy en la oficina de mi casa, firmando algunos papeles...

- Qué divertido, el mejor plan para un viernes por la noche- dijo con evidente sarcasmo.

- Lo dice el que atendió la llamada en vez de estar de fiesta- contestó de igual forma Jeon.

- ¿No se te ocurrió que tal vez esté preparándome para irme con algún chico?

La línea se quedó en silencio por unos segundos, entonces Jungkook rió roncamente- Eso no es cierto. Nadie podría complacerte como yo lo hago- Jimin intentó hablar, iba a decir que él no era el único que había estado entre sus piernas, una vil mentira por supuesto, pero el mayor lo interrumpió rápidamente- Y no puedes mentir, ya me lo has dicho.

- Y tú te lo crees, iluso- Jimin rodó los ojos. Últimamente, odiaba que él supiera el poder que tenía sobre él. No era ningún secreto entre ambos que Jimin sólo estaba interesado en él- ¿Para qué me llamaste, Jeon? Tengo cosas que hacer.

- No necesito un motivo para llamarte. Estaba aburrido y...

- Y caliente- terminó de decir Jimin- Quieres sexo teléfonico, admítelo de una vez.

- Tal vez- bufó- Así que, ¿qué estás usando?

Jimin se miró a sí mismo, le hubiera gustado estar usando algo más provocativo que una simple bata- Sólo la bata que me regalaste.

- ¿Sólo eso?- la voz de Jungkook bajó unos desiveles- Tendrías que haber venido a casa hoy, me tienes en abstinencia desde...

- Desde hace unos tres días, ¿tanto me extrañas?

- No te extraño a ti, sino a tu cuerpo- Jeon soltó un largo suspiro en lo que Jimin se paraba para cerrar la puerta de su habitación con llave y volvió a la cama- Dios, estoy tan duro ahora mismo.

- Adoraría tener tu polla en mi boca- Jimin también se estaba poniendo duro, se arrepentía de no haberlo visto en esos pocos días. Su mano libre fue hacia su entrada, apenas rozándola.

- ¿Vas a tocarte por mí?- el menor soltó una leve afirmación, y Jeon gruñó- Chupa dos dedos y mételos lentamente, ¿de acuerdo?

Jimin hizo lo que le pidió. Lubricó bien dos dedos, gimiendo en el transcurso sólo para provocarlo un poco más, y seguidamente los metió dentro de él, sin nada de delicadeza. Su interior lo apretó de inmediato, estaba algo estrecho por la poca actividad de esos días. No esperó siquiera a acostumbrarse, estaba tan caliente que no le importaba mover los dedos con brusquedad, deseando que fuera la polla de Jeon que lo llenara.

- Siempre tan impaciente- Jeon sonaba agitado- Mete otro dedo, ¿sí?- Park metió otro dedo, y tal vez eso ya era suficiente. Comenzó a moverlos, adentrándolos y abriéndolos dentro de él. Su próstata fue tocada una vez, soltando gemido tras gemido- Tus gemidos me vuelven loco, bebé.

- T-te necesito, Daddy- lloriqueó el menor- Necesito tu polla dentro de mí, no creo que pueda venirme sólo con mis dedos- ahora tenía cuatro dedos dentro de él, pero parecía no ser suficiente. Sólo Jungkook sabía dónde tocar para hacerlo delirar.

- Tienes que conformarte con eso, bebé- respondió entre jadeos- Córrete para Daddy.

Jimin dejó el celular a un lado cuando volvió a tocar su próstata, su cuerpo retorciéndose en placer mientras su otra mano masturbaba su pene. Movió sus caderas, empalándose contra sus propios dedos, gimiendo una y otra vez el nombre del mayor. Y ambos se corrieron a la misma vez, jadeando fuertemente.

- Necesito más, ¿qué dices si nos vemos ahora en tu departamento?- le dijo el menor momentos después, su respiración más calmada.

Jungkook suspiró- Ya quisiera, pero no puedo dejar estos papeles sin firmar- Jimin hizo un puchero involuntario- En realidad, esta llamada era para preguntarte algo.

- Por supuesto que sí- rió el menor- El sexo telefónico surgió de la nada, ¿verdad?

- Es en serio.

- De acuerdo, ¿qué querías preguntar?

- Más bien es una orden- Jeon se quedó en silencio y luego volvió a hablar- Ven conmigo a Tokyo. Ya reservé dos vuelos en primera clase.

- ¿Quieres que vaya a Japón contigo?- preguntó incrédulo. Eso era algo más personal que todo lo que estuvieron haciendo ese tiempo.

- Tú fuiste el que dijo que necesitaba vacaciones. Y las necesito, pero también te necesito a ti- y una vez más, Jimin se encontraba sonriendo- Quiero decir, no puedo tener vacaciones de tu culo.

- Arruinas el momento, como siempre.

- ¿Vendrás?

- Pensé que era una orden.

- Jimin...

- Jungkook- Park suspiró, simplemente no podía negarse, y menos cuando era un vuelo en primera clase- De acuerdo, envíame un mensaje con el horario.

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- ¿Qué?

- Lo que escuchaste- Jimin estaba de espaldas a su hermano, preparando algo de café en la cocina- Iré a visitar a papá- incluso la palabra "papá" sonaba rara saliendo de él. Cuando Jungwoo no dijo nada, Jimin lo miró- ¿No es lo que querías? Que tuviera una mejor relación con él y toda esa mierda.

- ¿Y toda esa mierda?- repitió su hermano. Se cruzó de brazos mientras suspiraba- No lo sé, es demasiado raro. ¿Qué hay del instituto? Perderás clases, y el trabajo...

- ¿No es más importante que vaya a ver a papá?- Jimin sabía que no debería estar mintiendo, y menos que usara a su padre de excusa. Pero tampoco podía decirle a dónde iba ni con quién- Sólo serán unos días, sobreviviré.

Jungwoo se lo quedó mirando fijamente por unos segundos que parecieron eternos, hasta que finalmente terminó aceptando. Jimin estaba contento de que no le hiciera más preguntas, y se dispuso a volver a su habitación, pero su hermano lo detuvo tomándolo del brazo.

- Con una condición- Jimin rodó los ojos, sabía que había sido demasiado fácil para ser verdad- Tienes que llamarme todos los días, y si no me llamas lo haré yo. Y si no respondes, llamaré a papá. ¿De acuerdo?

No era algo demasiado difícil de cumplir, sólo tenía que encargarse de contestar sus llamadas y todo estaría bien. Pensándolo bien, era algo fácil de hacer.

Jimin sonrió- De acuerdo.