5

22 3 0
                                    

——¿Te llevo?—— Dante apareció en el mismo coche en el que me secuestraron por primera vez

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

——¿Te llevo?—— Dante apareció en el mismo coche en el que me secuestraron por primera vez. Me guiñó un ojo y sonrió al tiempo que bajaba la ventanilla.

——Llévala a casa y no la dejes sola.—— dijo amenazante mi tío, acercándose mucho a él, realmente cerca, al nivel de tensión sexual.

——Volveremos sobre la hora de comer.—— el peliazul tragó saliva y Roberto asintió.

Hice que las perras se tumbaran en los asientos de atrás y yo me senté junto a Dante. Este arrancó, ya tenía mi dirección marcada en el GPS así que no tuve que preocuparme por dar indicaciones.

——Siento el trato que se te dió, pero debiste decirnos que eras familia del jefe.—— me encogí de hombros, a mí también me hubiese gustado saberlo de antemano.——Es un gran hombre.

——Si tú lo dices...—— no es que tuviese ninguna historia oscura de él durante mi infancia, pero tampoco estábamos muy unidos.
Lo cierto es que no tenía trato con mi familia más allá de lo estrictamente necesario (cumpleaños y navidades), ni siquiera mis padres mostraban mucho interés en mi vida. No siempre había sido así, pero digamos que me dejaron como caso perdido cuando suspendí la prueba para entrar en la universidad (había sido un año muy malo; me había teñido el pelo de color verde y se me caía a mechones, siempre estaba cansada, las jaquecas eran constantes, tomaba pastillas para concentrarme...). Aquello fue como clavar un puñal en el corazón de mis padres, pues su querida heredera a la que habían dedicado tanto tiempo y esfuerzo, era tonta.

 Aquello fue como clavar un puñal en el corazón de mis padres, pues su querida heredera a la que habían dedicado tanto tiempo y esfuerzo, era tonta

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Después de aquello, me alquilaron un piso en un barrio más malo que bueno y me dejaron vivir a mi aire. Aún no me atrevo a decirles que no pienso darles nietos, quizá me mandarían a una casa en Detroit.

——El jefe nos sacó de las calles.—— alcé una ceja, no esperaba que fuese un buen samaritano.—— ¿Sabes lo que pasa cuando un niño que está bajo la tutela del estado cumple 18 años?——negué con la cabeza.—— Que tienes que buscarte la vida como puedes... Por suerte para nosotros, llegó el jefe.

Sin duda, mi tío había encontrado la mano de obra ideal. Leales, ya que le trataban como al padre que nunca tuvieron. Baratos; comida, alojamiento y algo de dinero en ocasiones especiales. 99% de disponibilidad horaria...

——Creerás que solo se está aprovechando de nosotros, pero no.—— como si me hubiera leído la mente.——He trabajado para otra gente en la calle ¿sabes? Solo el jefe nos trata con tanta cercanía y se preocupa por nosotros, incluso debemos leer un libro al mes. Además, es uno de los pocos que no trafica con personas.

——Voy a empezar a trabajar para él.—— soltó una carcajada a modo de respuesta.——¿Qué tiene tanta gracia?—— gruñí asesinándole con la mirada.

——No sirves para esto.—— trató de parar la risa, pero seguía siendo demasiado divertido para él.

——Roberto dice que me encargaré de la homeopatía, pero yo quiero hacer lo mismo que vosotros.—— si Dante (que estaba obsesionado con el infierno de su libro favorito) podía hacerlo, yo también podía.

——El jefe sabe lo que hace, tú no estás preparada.—— fruncí el ceño.——¿Por qué crees que nosotros trabajamos para él? No tenemos nada que perder, somos unos kamikazes que solo buscan placer momentáneo.

——Yo también puedo serlo.—— "pero siempre con protección" añadí mentalmente.

——Es demasiado fácil herirte, tienes una familia, conocidos... incluso dejarías que te matasen con tal de proteger a tus perras.—— me di cuenta de que tenía razón, no podía permitir que hiciesen daño a mis seres queridos. Y si algo me pasase a mí, me echarían en falta.

——Todos estamos atados a algo.—— él negó con la cabeza y aparcó con un par de maniobras en una plaza a un par de calles de mi piso.—— Estamos un poco lejos.

——Lo sé, pero es imposible aparcar en tu calle a esta hora.—— me quedé petrificada mientras él se bajaba del coche. Aún no lo había asimilado cuando me abrió la puerta.—— ¿De verdad creías que el jefe no se había tomado la molestia de vigilar a sus seres queridos?

——¿He estado en peligro?—— mi cabeza estaba a punto de estallar.

——¿Ves esa frutería de ahí?—— señaló un establecimiento que llevaba cerrado por lo menos desde que yo me mudé.—— Ahí venden nuestra droga, en toda esta comunidad solo se vende nuestro producto.

——Pero... ¿estoy amenazada?—— de pronto me di cuenta de que no estaba preparada para unirme al negocio.

——Siempre lo has estado.

——Siempre lo has estado

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
El negocio familiarWhere stories live. Discover now