Capítulo 2.

1.6K 103 15
                                    

Dedicado a Celina-Mariana
————————————————

Dedicado a Celina-Mariana————————————————

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Peter.

Terminamos de arreglar todo lo que llevaríamos en nuestro viaje y prendimos nuestro camino. Yo iba frente y mis dos hermanos atrás de mi, seguidos por otros cuatros guerreros. Estamos preparados por si ocurre algo en el camino. Nunca se sabe si algunos enemigos quieran atacarnos.

— Oye hermano. — Pablo se pone a la par mía.

— ¿Qué?

— ¿Qué harás cuando lleguemos a las tierras Espósito?

— Ya se los dije. Nos vamos a unir a ellas para evitar que Amadeo tenga más poder.

— Sigo diciendo que es una mala idea. — está vez fue Nico que habló. — tú dejaste a la hermana mayor, por una zorra traicionera. ¿Crees que ella se va casar contigo? Sería muy tonta si de casa con el hombre que no cumplió su promesa.

— Ya Nico. Déjalo en paz.

— Solo soy realista. Ninguna mujer en su sano juicio va casarse con un hombre que la dejó por otra.

Hago una mueca. Nico tiene razón. Si mal no recuerdo, Lali estaba ilusionada con el matrimonio entre nosotros. La empecé a cortejar, para que nuestro matrimonio no fuera tan incómodo.

Éramos dos extraños. Aunque no quería casarme, sabía que era mi deber. Pero fue cuando conocí a Laila. Ella era tan diferente a toda la mujer que conocía, quedé cautivado ante su belleza. Todo fue tan ardiente y apasionado, pero sabía que tenía un deber.

Mis hermanos siguen discutiendo.

— ¡Basta lo dos! Nico, ella sabe que tiene un deber hacia su clan, como sus hermanas. Ellas saben que si no se unen a nosotros serán un clan débil.

— La chica quiere estar con Amadeo.

— Nico. Amadeo no es rival ante nosotros.

— Exacto. Somos Lanzani y todos nos temen.

Nico niega y encogiéndose de hombros dice:

— Si la chica es inteligente se negará a casarse contigo. Si se niega, tienes dos más para elijir. Si pasa eso toma a la siguiente.

— No va pasar. Ella va aceptar, la única manera que no lo haga es escapando y dudo mucho que lo haga.

Esa chica tiene mucha lealtad y sabe bien que no le conviene hacer algo estúpido.

Seguimos con nuestra marcha y poco a poco el sol empieza calentar y decidimos parar para descansar y darle de beber a nuestros caballos.

Lali.

Estoy cansada, estuve toda la noche cabalgando. Ya mi cuerpo está agotado y necesito dormir, pero sé que tengo que seguir hasta llegar a las tierras de Benja y todavía me queda un largo camino.

Guerreros Where stories live. Discover now