Aparición misteriosa

485 30 1
                                    

Capítulo seis.

¿Por qué razón tuvieron que hacer la enfermería en el último rincón del campus?

Llevamos alrededor de veinte minutos caminando por el enorme lugar intentando encontrar mi casillero, ya me perdí la clase de inglés y ahora no encuentro mi casillero para ir a mi siguiente clase. Jostin me ha ignorado desde que salimos de la enfermería y la verdad es que se lo agradezco, no tengo ganas de hablar ni con él ni con nadie.

Ahora si es cierto que, si antes tenía mala actitud, en este preciso momento estoy que hecho humo. Y ni siquiera se la razón, lo que me pone peor.

Maldita adolescencia y sus jodidos cambios de humor.

Me adelanto a paso rápido mismo divisó mi casillero, no tengo demasiada diferencia del chico que lleva mi mochila, pero algo es algo. Abro la puerta del casillero y busco mi libreta para mi siguiente clase, la aburridísima química.

Esa señora ya me odia y ahora voy tarde.

Pregunta: ¿Nunca nada puede salirme bien?
Respuesta: No.

–Bueno... ¿Como es que es tu nombre? – me pregunta entregándome por fin mi mochila.

–Soy Jennifer – sonrió de la forma más falsa existente y cierro la puerta del casillero de un portazo –. Si no necesitas nada más, creo que ya puedes irte.

–Está bien – antes de tener tiempo para obligar a mi boca a callarse y a mi cuerpo de caminar en la dirección contraria, hago todo lo opuesto.

–Oye... – él se gira para enfrentarme de nuevo y alza una ceja. Bueno, ya empecé ahora tengo que terminar – ¿Por qué me ayudaste? Bueno, lo digo porque todos estaban riéndose, fácilmente pudiste hacer lo mismo.

Lo veo suspirar antes de hablar

–Mira, niña. Tómalo como un acto de caridad ¿sí? Simplemente te vi caer cuando iba de camino a mi salón y te ayude porque vi que nadie más lo haría. No te creas importante por eso, ni hagas de esto algo mayor – dicho esto da media vuelta y se aleja del pasillo hacia Dios sabe dónde.

Si existe alguna manera de bajar la autoestima, ya bajo, de alguien y además lograr que se sienta jodidamente estúpida, es esta.

Cien por ciento comprobado, amigos.

Ahora si me siento una total, completa y enorme basura.

***

Después de sentirme el ser más miserable que ha podido pisar el planeta, duré entre deprimida y furiosa el resto del día. Las clases, aunque son pocas, parecen eternas y para colmo de males, tuve que volver a casa sola y caminando gracias a que Math tenía algo que hacer -ni idea de que- y mis hermanos tenían práctica después de cumplir su castigo.

En resumen; el camino a casa seria largo y solitario.

No vivo lejos del campus, me toma alrededor de treinta minutos llegar a casa a pie, pero con mi buen humor de hoy y mis increíbles ganas de existir esos supuestos treinta minutos parecen tres horas.

Camino a paso rápido solo por qué sé que si no llego a casa en el menor tiempo posible tendré un ataque de ira y golpeare a la primera persona que se cruce en mi camino. Hablo literalmente.

Cuando por fin llego, parece que en vez de ser una casa en donde vienen cuatro personas desde hace más de quince años; es una propiedad abandonada desde los años cincuenta. Esta en completo silencio y gracias a que las ventanas tienen las cortinas cerradas apenas es posible ver mi mano frente a mi cara. La poca luz del día tampoco ayuda con eso de iluminar.

Entre Tu Y Yo  © [Completa ✔️]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora