D O C E

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No tarde demasiado en quitarme el uniforme de la escuela una vez que llegue de clase y ponerme mi cómoda pijama para después tirarme a la cama e ignorar todo a mi alrededor, había sido un día agotador y además de eso hacía un frío horrible para ser casi primeros de octubre, por lo general el frío llegaba sentirse a principios de diciembre, ese mes y enero eran los peores, pero al parecer el otoño si que iba a darnos una lata con el frío.

Había pasado una semana después de que visite a Jooheon, constantemente seguíamos platicando por redes sociales y nuestra confianza había crecido un poco más, a pesar de que yo casi me moria de vergüenza tan sólo contestar un mensaje me ponía toda roja y con las orejas y mejillas calientes y ni hablar de cuando me llegaba un mensaje de él. Podrían asegurar que era casi el fin de mis días. Así, así de estupida estaba por Lee Jooheon.

Recuerdo que vi a su madre visitar el instituto un día después de mí visita y luego me enteré por él que había pedido un justificante por una semana para que sus heridas curaran, creo que su madre lo cuidaba cual bebé y por eso habia preferido que sanara en su hogar y estaba en lo correcto la verdad es que a mi parecer Jooheon necesitaba responso y no sólo de un día.

Fue una semana eterna en la que me pase observando el umbral solo por si por alguna razón él se presentaba, pero yo era tonta porque sabía que no iba a pasar sin embargo me la pasaba de boba observando su pupitre e imaginando que ahí estaba.

Me habría quedado en cama y hubiera dormido de no ser porque tenía tarea hasta para regalar, cuando entramos a clase a principios de septiembre la maestra dijo que nuestra primera evaluacion sería a fin de mes pero por alguna circunstancia eso no fue posible, así que ahora nos traía en friega y a carrilla para aplicar el examen esa semana. Era lunes, maldito y estupido lunes que no le bastaba con ser el día más feo si no que se le sumaba el extra de tener mil tareas. Vaya mierda de día.

Me quería rendir cuando llevaba tres cuartillas de 5 en un resumen tonto que dejo sobre la ética en lo profesional, como si no me bastara con la presión de que no tenía idea que iba a estudiar en la universidad ahora tenía que preocuparme por ser profesional antes de comenzar la universidad, o al menos eso pretendía la maestra que entendiéramos.

Cuando mi celular vibro después de horas, deje a un lado los apuntes y me apresure a revisar en mensajes previos quien era.

Joohoney

Buenas tardes Jihei ¡Hola! ☺️
6:46 pm

Pude haber respondido al instante pero tampoco quería quedar como una psicopata que estaba esperando mensaje. Aunque de cierta forma así era y cuando llegó, cuando vi en la pantalla de quien se trataba volví a tener esa sensación que tanto describían en las novelas, en los libros y que me llegaba a parecer cursi y exagerada pero era real porque desde que conocía a Jooheon lo experimentaba.

¡holaaaa Jooheon!
6:52 pm

Oye se qué te he molestado mucho estos días, pero necesito estar al pendiente con las tareas y I.m no responde, creo que está ocupado.
6:52 pm

Ah okey...te pasaré todo lo que hicimos el día de hoy y te ayudaré con la tarea vale?
6:55 pm

Si Jihei, me parece bien, por cierto me dijeron que tú eres quien está yendo a firmar por mí al club de robótica
6:56 pm
Muchas gracias
6:56 pm
Te debo algo😌
6:56 pm

Bueno si, que yo me estaba quedando hasta las 3 de la tarde en el instituto para poder firmar por Jooheon, el club comenzaba en unos días y no podía perdérselo, sabía que tenía muchas ganas de asistir pero si no contaba con sus firmas diarias no podría ingresar, tenía que haberlo ayudado de alguna manera y así lo hice.

Eyes on you; Lee Jooheon.Where stories live. Discover now