Madre de mis 4 Hermanos ©

Capítulo 3

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FIORELA

Lunes/24 de marzo/2015
Mañana

Desperté como todas las mañanas, pero con una pequeña diferencia, con un jodido dolor de cuello por dormir en un sillón que es más viejo que mi casera, (ok no, mejor no la invocó por que le debo mucho arriendo) bueno y como les decía me levanté para ir a la habitación y echar un vistazo de como durmieron los niños así que busco mis pantuflas de conejo y me dirijo al cuarto.

Entró y me encuentro con la escena más chistosa, triste y jodidamente tierna a la vez, Nathan estaba con el dedo del pie de Samuel en su boca y Samuel comía el cabello de Bárbara, tal vez estaba soñando que comía pastas o quien sabe luego le preguntaré, y Lía tenía todo su cachete lleno de saliva, era la escena más chistosa para otras personas pero para mí era la más triste, ellos merecen tener su propio espacio, no estar todos en una misma cama, pero las circunstancias nos llevaron a esto y hay que hacerle frente.

—Nathan, Samuel y Bárbara es hora de levantarse, debemos hacer muchas cosas hoy, el entierro de Papá y buscar un empleo para mi —Digo lo último en voz baja pues no quiero que Nath se preocupe por ello, es un niño de siete años, pero entiende muy bien estos temas.

—Así que niños se levantan ahora o no les compraré helado hoy.

Abro las cortinas a la par, que les iba hablando, pero ninguno se inmutó así que me temo que debo usar medidas extremas.

—Otro poquito más, por favor mamá la cama se siente muy cómoda no es nuestra culpa.

Me siento demasiado bien con lo que mis oídos oyeron, Nath me acaba de llamar mamá ¡oh! Dios mío esto es lo que sienten las verdaderas madres cuando su bebé dice por primera vez mamá, es la mejor sensación del mundo, a pesar de que verdaderamente soy su hermana, pero no me importa declare que mis 4 hermanos son mis hijos y así será.

—No señor, ya está muy tarde y debemos darle el último adiós a nuestro padre por más malo que haya sido.

—No, no quiero pararme madre es muy temprano aún, vayan ustedes yo me quedo.

—Conque temprano Samuel, conste ustedes lo pidieron. —No espero más y me lanzó a los pies de Samuel y Nath para hacerles cosquillas ellos sólo se retuercen y se echan a reír a carcajadas, en eso Babby y Lía se despiertan y se unen al juego haciéndonos cosquillas mutuamente, fue el despertar más lindo que pude tener, pues me hizo acordar a la forma en que mamá me levantaba para ir a la escuela de sólo recordarle me da tristeza, y por ello haré lo posible para que mis hermanos tengan la figura materna que pude apreciar.

—Mami tendo hamble. —Me dice lía con el puchero más adorable que una bebé tan linda como ella puede hacer.

—Bueno niños hagamos un trato sí, vemos una película en la noche cuando lleguemos vale.

—Sii mamá —me respondieron todos (chicas confirmó es la mejor sensación del mundo, pero si son ya mayores de edad, aclaró es mejor dedicarse primero a los estudios).

—Está bien el trato se pone en marcha si hacen todo bien ¿listo?, por el momento quiero que se vayan a cepillar los dientes y luego a la cocina en lo que yo prepararé el desayuno ¿estamos? —pregunto para saber si las más pequeñas me están entendiendo.

—Ah ¡baby ayuda a Lía con los dientes, por favor sí; te quiero princesa —Le doy un beso en la cabeza y ella toma la manito de Lía para ir a cepillarse, pero Lía no quiere ir así que le pregunto.