Please don't Bite • Stan x Reader • [South Park]

↳ «１３» 🐾

El camino de ida a la pizzería había sido aún más divertido que el de ida al partido. Las chicas estaban contentas por el resultado del partido, así que iban todavía más exaltadas, bailando en todo lo que el espacio reducido les permitía y subiendo la música y la velocidad a niveles que rozaban lo peligroso.

Bebe iba retocándose el labial en el espejo retrovisor mientras manejaba, algo que no me gustaba nada, pero intenté ignorar la sensación incómoda ya que, si ella lo notaba, era probable que acelerara solo para molestarme.

— ¡Eh! ¿Qué tal señoritas?

Un auto aceleró hasta alcanzarnos y me tomó unos segundos darme cuenta de que conocía al chico al volante. Era Clyde, uno de los chicos del equipo. Mi corazón empezó a latir con fuerza, si los chicos del equipo estaban ahí eso quería decir que Stan también se encontraba dentro del auto.

Me arreglé el cabello por reflejo, como si él pudiera verme entre la multitud de chicas en el asiento trasero.

—Disculpa, ¿te conozco? —bromeó Bebe, sonriendo con ganas y estirándose hasta asomarse por la ventana del copiloto.

El resto de las chicas parecieron exaltarse aún más con la llegada de los muchachos, ya que empezaron a silbar y gritar obscenidades por la ventana, haciendo reír a los chicos del auto contiguo.

— ¿Qué tal una carrera? —escuché gritar a Clyde, noté la duda en los ojos de Bebe, quien evitó deliberadamente una seña de Wendy— ¡Oh, vamos! No me digas que son unas gallinas.

Los chicos empezaron a hacer ruidos de gallinas y Clyde pisó el acelerador solo un poco, pasándonos y luego bajando la velocidad para alcanzarnos. Bebe seguía pensándoselo, aun ignorando a Wendy detrás de ella, susurrándole cosas al oído que no llegué a escuchar, pero no era nada bueno por el rostro contrariado de Wen.

Bebe le dirigió una única mirada a través del espejo retrovisor y luego lo movió de sitio para no tener que verla. Wendy se rindió y negó con la cabeza, como si no pudiera creerlo.

— ¡El último en llegar a la pizzería paga! —gritó lo suficientemente fuerte como para que Clyde la escuchara y luego subió el volumen de la música.

Las chicas chillaron animándola y la sonrisa de Clyde se ensanchó al tiempo que ambos pisaban el acelerador.

Me aferré al asiento delantero y le eché una mirada a Wendy, lucía igual de preocupada que yo, y luego me dirigí al auto de Clyde. Si Stan estaba ahí adentro, estaba segura de que se encontraba en la misma situación que yo. Me rehusaba a pensar que era tan insensato para apoyar esa carrera.

Ambos autos aceleraron, tanto que tuve que cerrar mis ojos para no marearme. Estuvimos a punto de salirnos de la carretera en varias ocasiones, gracias a pequeñas "bromas" en las que Clyde tiraba su auto contra el nuestro y giraba el volante a último momento. Pero finalmente logramos llegar al estacionamiento de la pizzería sin más incidentes, incluso ganamos la carrera gracias al espíritu competitivo de Bebe, que estaba más que dispuesta a tirarnos a todas del auto con tal de ganar.

Wendy fue la primera en abrir la puerta al llegar a la pizzería, llamando al instante la atención del resto de los clientes al ver un grupo de chicas con uniforme verde chillón y glitter por todas partes.

Nos encaminamos hacia un reservado, donde nos sentamos y esperamos a que los chicos, acompañados de una camarera, se acercaran a la mesa con más sillas. No pude evitar buscar a Stan con la mirada, sentado a un par de sillas de mí y riendo de alguna broma que Clyde le estaba contando al oído.

Kyle estaba equivocado al decir que Stan acabaría por dejarnos de lado por los deportistas, quizás a simple vista se camuflara entre ellos con esa chaqueta que todos llevaban en común, pero cualquiera que lo conociera notaría que no pertenecía ahí. Por más que riera de las bromas y supiera adaptarse a su slang, apenas desviaba la mirada se le notaba en la cara que preferiría estar escuchando discos en su cuarto.