Capítulo 8 - Amanecer

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Pasa un rato muy agradable con Jack, y la verdad es que me ha encantado estar con él... Y me encanta la sangre de lobo... Son tan temperamentales... A la vez fogoso, tierno, posesivo...

_Espero que haya disfrutado Luna _me dice Jack con una sonrisa y acariciando mi espalda.

_No sabes cuánto... _digo para pasar mi legua de su pectoral hacia su cuello recogiendo una fina hilera de sangre.

Puedo ver como este gesto hace que se le erice la piel. Lo miro con una sonrisa traviesa y él me mira sorprendido. Yo me levanto de allí y quito el olor de nuestros cuerpos para después vestirnos.

_Por cierto, si te dice algo Baltasar, ignóralo, le encanta atormentar a mis amantes... Me quiere sólo para él _digo riéndome. _Y otra cosa más, no digas nada a nadie, no me gusta que todos sepan de mi vida privada.

_Claro Luna.

_ ¿Quieres que te acerque a tu manada?

_Sería un honor, todos estarían encantados de saludarla.

_Bien, voy a avisar a Dante antes, no quiero que se preocupe.

Salimos de allí y voy a buscar a mi amor, el cual sé que está en el salón. Llegamos, entramos y vemos que está con el consejo de los demonios, incluido Azazel, mis hijos y Baltasar.

_Hola a todos.

Ellos me saludan y me acerco hacia mi amor y me siento en sus piernas. Me pongo a hablarle muy cerca, con su cara frente a la mía.

_Hola mi amor.

_Hola cariño, ¿estás mejor?

_Si, no te preocupes. Voy a la manada de Jack, ¿qué plan tienes?

_Veo que ya has encontrado con quien desestresarte...

_Tranquilo amor... siempre tengo más para ti... _digo besando sus labios.

_Pues creo que se van a quedar a cenar, ¿no es así? _dice preguntando en voz alta.

_Está bien, vendré para cenar entonces. ¿O prefieres quedar aquí? _le digo mirando a Jack.

_Me encantaría Luna, pero tengo que volver. 

_Lo que me faltaba... otro chucho... _dice Baltasar molesto, lo que me provoca risa. 

A Jack parece que no le afecta, o quizás lo ignora por el comentario que le hice. Azazel lo mira a los ojos y él mantiene la compostura. 

_Mamá, voy a salir con Ares y mis amigos _dice Diana.

_Claro, tened cuidado y pasarlo bien.

Yo le vuelvo a dar un beso a Dante y me levanto de sus piernas, pero se levanta conmigo y se acerca a Jack.

_Te voy a advertir una sola vez, si le haces daño o la traicionas como el último chucho, te cortaré cierta parte de tu cuerpo, y pasarás de alpha a Luna, ¿entendido?

_Nunca le haría daño, señor Morningstar.

_Más te vale....

_Te veo en un rato amor.

_Hasta después cariño.

Nos damos un beso ligero y luego pongo mi mano en el hombro de Jack y aparecemos en su manada. A todos los que nos vamos encontrando nos hacen una inclinación con su cabeza, por más que digo que no es necesario...

_Veo que te protegen mucho _me dice con una sonrisa.

_Te lo advertí... pero ellos son los de mi mayor confianza, pondría mi vida en sus manos sin pensarlo. Y he de decir que, por suerte, ese círculo es bastante grande.

Pasamos un poco por su manada para mostrármela. Luego vamos a su casa y me la enseña. Me presenta a los lobos de su confianza y me invitan a cenar.

_Lo siento, pero tengo una con el consejo de demonios, pero mañana si quieren podemos cenar juntos.

_Sería un honor Luna _me dice su beta.

_Hasta mañana Luna.

_Hasta mañana Jack.

Yo me desaparezco de allí y aparezco en el salón donde están todos. Disfrutamos de una cena muy agradable con varias indirectas de Baltasar y algunas tensiones por parte de Azazel. Tras la cena, nos vamos a la habitación.

_Dime amor, ¿qué tal con el lobito?

_No es como tú, claro, pero me va a venir muy bien para desestresarme...

_Y dime... ¿te hace esto?

Dante quita mi camiseta y mi sujetador, se sienta en la cama y me pone delante de él. Empieza a tocar mi zona más sensible mientras pone su lengua en la base de mi tatuaje, en la cadera, y con su lengua va recorriendo mis costillas, mi espalda y llega a mi cuello donde acaba el dragón y me muerde. Yo empiezo a gemir fuertemente mientras termino de desnudarme y me subo sobre él. Hago que entre en mí y ambos gemimos de placer. Yo empiezo a moverme sin poder hablar, ya me tiene mordida por el cuello y extasiada. Tras poco tiempo, entre la mordida, su virilidad dentro de mí y las caricias que me hace con su mano llego al orgasmo.

_Eres único mi amor... nadie me conoce como tú...

Aún sentada sobre él, empieza a besarme con pasión, y me encantan sus besos, ya que es el único que puede besarme. Dante hace que unos lazos se agarren a mis muñecas y se agarren al dosel de la cama levantándome entre sus brazos.

_Quiero tocarte mi amor...

_Tranquila... tenemos toda la noche...

_ ¿Alguien quiere demostrar que es mejor que el lobito? _le digo con una sonrisa pícara.

_Yo ya sé que soy mejor... conmigo gime más fuerte...

_ ¿Desde cuándo te gusta espiarme? _le digo sensual.

_Sólo vigilo lo que es mío...

_M... ¿y quién te ha dicho que soy tuya? _digo levantando las cejas y mordiéndome el labio.

_Voy a tener que castigarte... estás siento una diablilla mala...

Adoro cuando me mira con esa sonrisa pervertida y me come con la mirada. Me deja en el suelo aún atada. Va hacia una cajonera y saca un látigo erótico. Está juguetón hoy... Me da unos azotes suaves en mis nalgas, para luego recorrer mi espalda con su lengua, lo cual me encanta, yo me doy la vuelta y me agarro con mis piernas a sus caderas y muerdo su cuello. Así pasamos parte de la noche.

Estamos durmiendo, pero me despierto muy temprano, me visto y bajo a la cocina. Preparo el desayuno para llevar y lo meto en una cesta. Desaparezco de allí y me aparezco en el cielo con las vistas de las pirámides, en Egipto. Creo una gran nube, y hago un campo protector y a la vez para que no nos puedan ven. Aún es de noche por lo que es perfecto. Yo vuelvo a la habitación me acuesto junto a mi amor, y lo traslado a esa nube.

_Despierta cariño.

_Tengo sueño...

_Vamos... no querrás perderte estas vistas...

Dante abre los ojos curiosos, y cuando se da cuenta de dónde estamos abre los ojos como platos.

_Buenos días, mi amor... quería traerte a ver un hermoso amanecer, y a tomar el desayuno con la mejor compañía... _digo dándole un beso tierno en los labios.

_Gracias por la sorpresa amor... aunque no hay nada más hermoso que tu...

Y así comenzamos un hermoso día, con un hermoso amanecer y la compañía de mi amor. Vendrán tiempos difíciles, pero mientras, pienso aprovechar cada momento.

Entre los colmillos de los Bartholy VII: En el corazón de las tinieblasWhere stories live. Discover now