Entre los colmillos de los Bartholy VII: En el corazón de las tinieblas

Capítulo 25 - Visión

Paralelo al día de Diana.

NARRA HELENA

Tras el entrenamiento, voy con Jack al lago de mamá, o ex-lago, mejor dicho. Yo me quito la ropa y me meto en el agua. El agua me ayuda a relajar la mente. Yo miro a Jack, y sus ojos brillan de deseo.

_ ¿Me haces compañía, lobito?

_Faltaría más...

Jack entra conmigo en el agua. Y yo me pongo a nadar para que no me alcance. Empezamos a jugar nadando, y me relaja mucho, la verdad. Un rato distendido me hacía falta. Le hago muchas jugarretas con mis poderes, como zambullirlo cuando me va a alcanzar, lanzarlo con un chorro de agua, que lo aleje una ola... Me dejo alcanzar y me abraza.

_Por cierto, creo que estás un poco tensa, déjame darte un masaje.

_No sabes cuánto...

Jack se pone a mi espalda y empieza a masajearme y yo me dejo llevar por el placer que me produce.

_Luna, lo de esta mañana, ha sido impresionante.

_Gracias. Son muchos años de entrenamiento con los mejores y de todas las especies.

_Te admiro muchísimo, y no sabes cómo me honra que me dejes formar parte de tu vida.

_No hay de qué, me has demostrado confianza.

_Luna, ¿de qué hablaban el otro día en el despacho? Sé que estuvo llorando, y luego la escuche con Dante. ¿Tiene algún problema con él? _yo doy un largo suspiro.

_No exactamente, pero no quiero hablar de ello, es algo muy personal y se remonta muchos años atrás.

_Está bien. Respecto al lobo que dijo eso... Ha venido para disculparse.

_No me interesa la verdad. Se va a disculpar porque tú lo obligas, en ese caso no me interesa verlo siquiera.

_Y respecto a lo de ser mi Luna...

_Tranquilo, seré tu Luna. Pero me gustaría hacerlo de una forma especial. Lo haremos el miércoles, que hay luna llena. Pero estaremos solos. Tu avisarás a tu manada cuando te tengas que convertir para que ellos también lo hagan, y se cerrará el círculo.

_ ¿No puede venir nadie?

_Me temo que no, no va a ser aquí. No puedo decirte dónde, pero yo te llevaré.

_Como quieras Luna.

_Jack... _digo mirándolo con mis ojos rojos.

_Dime, mi hermosa Luna _contesta poniendo una mano en mi mejilla.

_Hazme tuya...

Sus ojos se oscurecen y yo saco mis colmillos. Lo miro con deseo y se me ocurre una idea...

_Oye Jack... ¿Los lobos os mordéis sin necesidad de marcaros?

_Si Luna, aunque por lo general sólo se reserva para los mates.

_ ¿Te gustaría morderme? Pero sin marcarme, claro está.

_Me encantaría... _dice sacando sus dientes.

Paso el día con Jack, haciendo cosas de los reinos, buscando enemigos... Un completo. Cuando llego a casa, Diana me da una gran noticia. Al menos ya sabemos quién es cada uno. Me voy a mi despacho y me concentro para tener una visión, contactar con la abuela o lo que sea. Yo me concentro como siempre y busco la paz, ese lugar mágico.

_Hola cariño.

_Abuela, que alegría verte _digo abrazándola.

_Quieres ayuda supongo.