◇◆ TREINTA Y DOS ◆◇

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Jaja, las cosas están resultando de una manera que no esperaba para nada.

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-Kaguya Ōtsutsuki.

¿Enojado? Oh, bueno, el no está enojado

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¿Enojado? Oh, bueno, el no está enojado.

Esta furioso.

La sola idea de tener que venir a buscarlos le desagrada, pensaba pedirles algo de manera "pacifica" al momento de encontrarse con ellos, nunca se le pasó en rebelarse ni exponerse delante de ellos. Pero lo que desató su ira fue lo que escucho en el camino. Cuando estaba saliendo del establecimiento donde se encontraba naruto, escuchó varias conversaciones, mayoría de enfermeras chismosas que viven sabiendo la vida de la gente.

No podía faltar la entretenida y penosa vida de un pequeño niño rubio.

De muchas bocas con diferentes tonos de voz escucho lo mismo.

Naruto fue intercambiado.

No esperaba eso de él grupo de ninjas, osea vamos, nunca a sentido agrado hacia ellos pero sabe bien que ellos querían a naruto. El pequeño niño era notablemente feliz con el solo hecho de hablar uno de ellos. Esperaba cualquier cosa, no lo sé, secuestro, batalla, cualquier cosa, algo normal. Nunca espero que naruto fuera intercambiado tan fácilmente como si fuera un maldito objeto.

Llámalo ignorante, pero el no sabía nada. Al momento de saberlo le daría lo mismo quién pensara lo que quiera, pero se iría de la aldea llevando a naruto consigo. Sin importar si se tenía que exponer o actuar con su chakra.

Sabia que algo fuerte vendría, así que se ocultó dentro del niño para poder observar mejor. Naruto es un niño de seis años que prontamente cumplirá siete, cualquiera persona decidiría por el en preguntas complejas, pero kurama no, kurama en los pocos años que naruto descubrió su existencia, se encargó de hacerle tener una mente más madura, de ver las cosas de una manera moderada.

Por qué el niño ve el mundo de una manera grande, llena de imaginación, kurama lo dejaba imaginar, pero que no se saliera de la realidad.

Tal vez eso le rompió la inocencia pura que poseía de más pequeño, pero era mucho mejor, confiaba plenamente de que naruto podría decidir las cosas por si solo.

No importaba si estaba bien o estaba mal, lo importante estaba en apoyarlo.

Naruto decidió irse con la ninja élite, bien, tendrían que prepararse para cualquier cosa. En el momento que dejaron inconsciente a naruto tuvo muchas sospechas y malos presentimientos, cuando llegaron a la torre del kazekage vio un silueta familiar y no se pudo contener, tomo el cuerpo del niño desgarrando con un movimiento de mano a la ninja élite que trataba mantenerlo quieto.

mi pequeño rubio ◆ Naruto Donde viven las historias. Descúbrelo ahora