Había crecido con una aberración al mar y sus profundas aguas oscuras, desde que tenía memoria el recuerdo de una criatura de ojos verdes atormentaba sus pensamientos robandole el sueño y muy pronto también su corazón.
El toque de sus dedos azules y fríos aun permanecía sobre la piel de mi mejilla, había despertado en casa de mi prometida con todos alrededor de mi y un doctor extendiendo un papel a la madre de Petra con algunas indicaciones supongo, intenté levantarme pero fui detenido por Petra.
-cariño tranquilo, el doctor dice que tuviste una ligera contusión pero no es grave
-que bueno que no sea grave Levi -el padre de Petra se sumó a la conversación- sería una lastima si te perdemos antes de la boda
Sus palabras no sonaban con el mas mínimo toque de amabilidad, sabía de sobra lo mal que había comenzado a caerle a este sujeto. El medico pasó a retirarse acompañado por la madre de Petra.
-hija deberías dejar a Levi descansar, puedes volver mas tarde -con un asentimiento de cabeza Petra pasó a retirarse- de puro milagro éstas vivo Ackerman -su mirada llena de desprecio me hizo fruncir el ceño a mi también- caíste de un barco en medio de una tormenta con la marea revolviéndose como loca, era casi imposible que sobrevivieras a ello
-gracias por los buenos deseos -dije sarcástico- ese casi en su oración resulta extraño ¿hay algo que quiera mencionar?
-dentro de ese casi hay un gran espacio que abre la puerta a múltiples especulaciones, nadie sobrevive a tantos accidentes en el mar y mucho menos teniéndole tanta aberración
Su sonrisa torcida y el fétido olor nauseabundo proveniente de su boca me provocaron ganas de vomitar.
-alguien o algo te salvó y quiero que me digas que fue ese algo
Lo miré completamente confundido lo único que recordaba eran fragmentos borrosos.
-nada, todo estaba oscuro y perdí la conciencia aunque lo intentara no recordaría lo que fuera aun si lo hubiera visto
La expresión en su rostro apuntaba claramente a que no creía una sola palabra de lo que le estaba diciendo, tras unos minutos de miradas retadoras abandonó la habitación. Esperé un par de minutos para quitarme las cobijas de encima, llevé mis manos a la cabeza había una venda lo mas probable era que hubiera una herida debajo de estas, el piso de madera rechinaba un poco con mi peso, llegué hasta la ventana, de todas las malditas habitaciones que habían podido darme esta tenía un jodido balcón con vista al mar que cualquiera amaría pero yo no.
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Llevaba varias horas metido en la cama, me encontraba perfectamente bien pero Petra insistía en que guardara reposo, si en verdad no la amara lo suficiente no me hubiera atrevido a poner un pie encima de ese barco por mas que buscara una explicación lógica dentro de mi cabeza para darle un nombre a eso que vi entre la oscuridad del mar.
-Levi -miré a Petra, en sus ojos había duda sobre si hablar o permanecer callada- .
-no tienes que pedirme permiso para hablar eres una persona libre mientras estés conmigo
-¿estas seguro de irnos en dos días? me preocupa tu estado de salud
-no pasa nada todo está correcto ¿puedes pasarme papel y algo con lo que pueda escribir?
Petra atendió la indicación y enseguida se puso a buscar algo, mañana saldría con su dama de compañía y tenía que aprovechar para mandarle una carta a Farlan con lo que había ocurrido, me pasó el papel y una pluma.
Farlan tuve un accidente apenas llegando y llámame loco pero vi algo bastante extraño antes de quedar inconsciente arreglé todo para largarme dentro de dos días hay cosas que tengo que contarte en persona. No me des respuesta a la carta nos vemos pronto.
Atentamente: Levi Ackerman
Doblé el papel y lo metí en un sobre, le di las indicaciones correspondientes a Petra y se fue a esconder la carta, su maldito padre me va a traer mas problemas de los que pensé.
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