Sweetie [◇] YeonGyu.

O2

— Te lo digo hyung, es un depravado de primera... —lo único que YeonJun escuchaba de la boca de SooBin era bla, bla, blah.

No, Choi YeonJun no podía concentrarse ese día y menos con el insoportable de Choi BeomGyu al otro lado siendo lindo como siempre. En serio, ¿qué le veía la gente? solo era un tipo raro que siempre andaba regalando sonrisas a extraños, ¿de verdad nadie más notaba lo extraño que era eso? nadie, no, en serio, nadie puede ser feliz todo el tiempo, ni siquiera Choi SooBin quien siempre estaba haciendo cosas para animarlo. Él también tenía sus días malos.

Pero Choi BeomGyu, ese niño debía esconder algo muy oscuro... ¿y si por las noches sale a robar o asaltar gente? ¿fuma después de la escuela y sonríe para aparentar las cosas? ¿secuestra chicas inocentes para prostituirlas y luego compra droga con ese dinero para venderla y así generar más dinero? ¡todo era posible!

— ... por eso decidí prostituirte y comprar el nuevo nintendo switch con el dinero, ¿qué opinas?

— ¿Eh? ah sí, claro. Como sea —contestó aburrido.

— ¡Choi YeonJun! —el aludido sintió un zape en su cabeza— ¡no me estás escuchando!

— Claro que sí.

— ¿Qué dije?

Lo pensó un momento— ¿Bla, bla, blah?

SooBin rodó los ojos— Me caes mal.

YeonJun sonrió divertido, era gracioso hacer enojar a su amigo y ver como se cruzaba de brazos haciendo un mohín con su labio. Sí, justo como lo estaba haciendo en esos momentos.

— Lo siento, estoy un poco distraído.

— Si no me dices ni me doy cuenta, gracias por abrirme los ojos.

YeonJun rió ante el sarcasmo de SooBin, logrando que se uniera segundos después.

— Ya llegue, par de maricas —saludó YoonGi, sentándose frente a ellos.

— Hablo el señor heterosexual "nunca saldría con Park JiMin porque soy muy macho" —SooBin imitó, logrando que ambos rieran.

Min YoonGi era un par de años mayor que ellos, hermanastro de SooBin y cursando el último año de su carrera.

— Ya, eso fue hace dos años. Camina hacia el futuro —respondió el pálido, abriendo una bolsa de frituras— ¿de qué hablan?

— Hablamos de porque Jjigong está distraído hoy —SooBin lo miro— ¿por qué estás distraído hoy, hyung?

YeonJun lo pensó e inconscientemente su vista se dirigió hacia el chico que alimentaba una pequeña ardilla al otro lado del jardín.

Era el mal en persona.

— No lo sé —se encogió de hombros.

— ¿Será por una chica? —YoonGi alzó una ceja pícaro— ¿o un chico?

— Dime que es un chico, nunca les has dado oportunidad desde que te declaraste bisexual hace tres años —SooBin sacudió su brazo como un niño pequeño.

— No, no es por una persona ¿por qué tendría que serlo? —cuestionó alejándose de su mejor amigo como si ya estuviese acostumbrado.

— Nunca te distraes —respondió muy obvio— últimamente andas más... gruñón que nunca.

— ¡Ah, ya sé! ¿será por el bombón de segundo año? ¿cómo se llamaba...? —YoonGi chasqueó los dedos como si le ayudara a recordar— el de muslos gruesos y fuertes...

— ¿Quién tiene muslos gruesos y fuertes, Min YoonGi? —una nueva voz se hizo presente.

El pálido se tensó unos segundos para luego levantar la vista lentamente hasta encontrarse con un lindo chico de gruesos labios parado frente a él con los brazos cruzados.

— Hola, JiMin-hyung —saludó SooBin animado.

— Hola, hyung —dijo YeonJun, rezando por su amigo.

— Hola chicos —les sonrió para luego mirar serio al pálido— ¿y bien? ¿no dirás nada?

— Ahm... t-tú mi amor, tú tienes los muslos gruesos y fuertes... ya sabes —intentó mirarlo de forma pícara.

Con ojos serios y labios en una fina línea le pidió en silencio que se levantara, a lo que YoonGi obedeció soltando un suspiro resignado para seguirle. Ambos alejándose de la mesa.

— ¡Adiós, JiMin-hyung! —se despidió SooBin— ¡rezaré por ti, YoonGo!

YeonJun hizo una mueca— Por eso estoy soltero.

— Sí, claro, por eso.