❛ Accident ❜ )) The Legend of Zelda [ AU ]

(( C · 25 - Juicio de Nayru ))

— Actualmente te encuentras en la Hypnea de Nayru —explicó Zeit— siento tardar en contarte todo, pero Fay está transmitiendo la información de los tres juicios a la vez y el proceso no es rápido...

Majora se limitó a asentir, mirando a todos lados a la vez que esperaba a que la explicación de la otra continuase.

— Además solo tenemos unos momentos para comunicarnos contigo...

— ¡¿Qué?! —exclamó Ocarina, sobresaltando un poco a la rubia— ¡¿Cómo se supone que le debemos ayudar entonces?!

Zeit suspiró, intentando tranquilizarlo, no era momento para perder la calma.

— Podemos ayudarle durante un rato... pero el juicio es algo que debe superar él solo, no podemos estar ahí todo el tiempo, Ocarina.

Recibió un gruñido como respuesta, pues para él no era nada justo. Pero no quedaba otra y Hylia y Fay no parecían tenerlas todas consigo en cuanto a cierta batalla que estaba ocurriendo ahí mismo.

— Majora, escucha con atención —frunció el ceño antes de seguir hablando— tienes que recolectar aquella especie de bolas brillantes que ves, son lágrimas de Nayru. Una vez consigas las quince, superarás el juicio.

El más pequeño de quienes se encontraban ahí seguía sin entender qué tipo de ayuda le estaban ofreciendo, hasta que Reikon tuvo la idea de tocar una parte del juicio.

Al hacer eso, una especie de fantasmas que volaban por Hypnea desaparecieron por completo, dejando solo el rasto de luz que traían.

Los ojos de Reikon se iluminaron, rápidamente procediendo a explicar.

— ¡Ya lo entiendo, a esto se refería Fay! —exclamó con emoción— Solo tenemos unos minutos para hablar con él, ¡pero podemos manipular el juicio!

Toon la miró arqueando una ceja.

— O sea... ¿esa especie de fantasmas han desaparecido porque tú quería que desaparecieran?

La otra asintió.

— Supongo que tal y como me ves, la palabra "fantasma" no es de mi agrado... —bufó— así que al hacerlos desaparecer, he hecho que el tiempo no se acabe del todo al tocar la luz, solo se reducirá un poco.

Zeit les dio un toque en el hombro para que no bajasen la guardia.

— Fay explicó que al tocar esa luz, los fantasmas despertarían a esa especie de estatuas que veis, se llaman guardianes y tienen el deber de proteger hypnea.

Ocarina ladeó la cabeza, confundido.

— Pero entonces no hay de qué preocuparse.

La más alta negó con la cabeza, no había terminado de explicar.

— Al tener que superar la prueba de un juicio, ya estás invadiendo hypnea... lo que quiere decir que los guardianes irán a por ti si se te acaba el tiempo, Majora.

Este se llevó una mano a la cabeza, frunciendo el ceño.

— ¿Qué es lo último qué has dicho?

Zeit comprendió que cada vez se les escuchaba menos, por lo que el tiempo que tenían para poder hablarle se les acababa.

— ¡Solo céntrate en recolectar las quince lágrimas y volver, no hagas caso a nada de lo que pase alrededor!

Majora pareció gritar algo, pero no pudieron escucharle. Sin embargo, asintió, por lo que esperaban que al menos eso último lo hubiese podido escuchar.