Enamorada De Tom Riddle [Tom Riddle y Tú]

Sólo queda Esperar

...

Habían pasado unas largas semanas desde aquel incidente en el lago negro, en el grimorio aún no había nada escrito y su madre falsa aún no le decía ninguna novedad "Todo a su tiempo" repetía cada vez que Neela preguntaba algo.

Pasó varias veces delante de la puerta que tenía las iniciales D.R.R. y la curiosidad la comía por saber lo que esa puerta contenía, pero se negó, había sobrevivido a más cosas antes como para ahora sobrevivir a la tentación.

Además de que ya no se veía tan desgastada como antes gracias a aquella hierba extraña que Odette-falsa le había dado y que se metía con regularidad a aquel lugar.

Notó también que la puerta de Tom ya no estaba en su antiguo lugar, y por pura curiosidad fue a la biblioteca cuando observó que desde lejos, unas palabras empezaban a escribirse en el grimorio.

"Hazlo pedazos" decía, confundida buscó entre los libros de las estanterías algo que le diera una pista de qué era lo que eso significaba.

Pero lo más cercando que encontró a la que buscaba fue un libro que tenía escrito en el lomo "Para mensajes confusos".

Lo abrió esperando obtener respuestas, aunque sólo se confundió más "Las cosas salen mejor cuando no planeamos que sucedan".

Arqueó una ceja sin entender, comió la hoja color verde oscuro y despertó.

Estaba en la cama de Tom, ya que desde que pasó lo del lago negro, él se negaba a dejarla dormir sola por miedo a que los que la habían "atacado" regresaran a terminar lo que iniciaron.

El pelinegro estaba sentado frente a su escritorio, escribiendo sin prestar atención a nada más mientras ella se paraba de la cama e iba hacia su espalda, lo abrazó por el cuello depositando unos cuantos besos en ese lugar y también en el cachete, haciéndolo sonreír.

—Veo que estás de buen humor— dijo él aún escribiendo y viendo de reojo a Neela, quien ahora empezaba a dibujarlo.

—Siempre que me despierte fuera del lago negro estaré de buen humor— respondió con un poco de ironía en su voz, no pensaba decirle que Walburga y Druella habían sido responsables de su casi temprana muerte.

—Creo que es lo justo, a mi no me gustaría despertar con agua en mis pulmones— añadió dando por terminada su escritura, haciendo que la curiosa rubia a su lado se parara para ver lo que escribió.

—"Tom Marvolo Riddle"— leyó con pausas —¿Para qué escribes tu nombre?— preguntó confundida tomando asiento en sus piernas.

—No lo quiero, me hace recordar a aquel muggle que decía ser mi padre— respondió con desprecio, haciendo pedazos el escrito, y ahí Neela entendió.

Se paró de repente e hizo que Tom también se parara y se alejara, éste la miró por un momento confundido, pero ella extendió su mano sobre los pedazos de papel, cerró los ojos y se concentró en enfocar energía en su mano.

Dio un par de vueltas a ésta y cuando lo pensó terminado, abrió los ojos, encontrándose con un texto bastante agradable, almenos para ellos.

—"I am Lord Voldemort"— leyó el pelinegro —Lord Voldemort— repitió fascinado mirando a Neela —Increíble— murmuró antes de depositar un beso en sus labios, feliz por lo que había hecho —Es perfecto.

—Además de ser un anagrama de tu verdadero nombre— añadió continuando con su retrato, que apesar de que se lo pidió varias veces, no lo dejó verlo.

Unos minutos después, cuando el desayuno casi estaba por terminar, Neela ayudó a Tom a abotonarse la camisa y colocar correctamente su corbata mientras peinaba sus risos negros.