Inmortal [Y.M] [✓]

16

—Probablemente sea mi culpa. —hablo.

—Pero si no fuera así Jimin hubiera seguido ahí. —habló.

—Lo sé. —suspiro. —por eso decidí cuidarlo porque podía sentir a Lee Jungtae en él.

—¿Qué harás? —le preguntó.

—Como Jimin lo buscaré. —lo vio. —es momento de que él se encuentre con su creador.

—¿Lo matarás? —habló.

—Debo hacerlo. —dijo. —pero Jimin desea eso.

—Dejarás que él lo haga. —habló.

—Él debe hacerlo solo así tendrá paz. —suspiro. —así debe ser.

—Se me olvida que lo ves todo. —sonrió el otro.

El castaño lo vio y rio ambos se alejaron dejando a los chicos ahí Jimin se alejó y lo vio con una sonrisa.

—Eres muy lindo hyung. —susurro el rubio —pareces un lindo gatito.

—Y tu un pollito. —le acarició la mejilla.

—Si me aceptas. —lo vio. —¿Sabes lo que significa?

—No. —negó. —pero sería bueno iniciar por ahí.

—Al aceptarme. —se acomodó. —no solo aceptas el hecho que seré tuyo, sino que tú serás mío, tu cuerpo sangre todo será mío.

—Mi sangre. —lo vio.

—Tranquilo solo en el acto de volvernos uno puedo consumirla. —hablo. —es ahí donde te marco como mío, ningún otro puede beber tu sangre.

—Las veces que me sacaste sangre.  —lo vio. —¿No fue ahí?

—La primera vez fue porque no me controle por eso enfermo. —dijo. —no debió encerrarme con usted en ese espacio tan pequeño.

—Okay aceptó mi error. —hablo. —se me olvidó que estaba con un vampiro.

—La segunda fue porque solo así no lo iban a tocar. —hablo. —ellos debían de ver que yo ya tengo a alguien.

—¿Por cierto quienes eran ellos? —pregunto. —¿Y por qué parecían odiarte?

—Ellos eran los antiguos aprendices de hyung. —bajo el rostro. —ellos me odian porque él me prefirió a mí que a ellos.

Yoongi no dijo nada solo lo acercó a él y lo abrazo, Jimin también lo abrazo podía sentir los latidos, el sonido de la sangre del pálido ir y venir de sus venas, su suave respiración, todo era una suave melodía.

—Ya está pequeño. —le acarició su cabello. —ahora yo estoy contigo.

—Lo promete. —hablo.

—Ahora somos compañeros de una rara forma, ya que beberás mi sangre. —sonrió.

—No lo tocaré hasta que usted lo haga primero. —negó. —es una promesa.

—Vuelve a la universidad. —susurro. —¿Puedes?

—Perdí ya casi medio año. —negó. —además sería la quinta vez que curso la misma carrera necesito un descanso.

—La vez de los mapas estuviste en esa época. —habló.

—Si. —sonrió. —fue buena ahí conocí a Taemin.

—Ya veo. —resoplo.

—¿Está celoso? —se acercó y beso su mejilla. —es lindo.

—¿Así le decías a él? —lo vio de reojo.

—Él era tierno y dulce. —sonrió. —pero no resistió y murió.

—Si decides convertirme. —hablo. —¿Eso me pasará a mí?

—Yo no. —se alejó. —prefiero verte morir de viejo que por mi culpa.

—Eso es egoísta. —lo vio.

—Egoísta es saber que yo te mate. —lo vio. —perdí a Taemin, no quiero lo mismo para ti.

—Ya entiendo. —lo abrazo. —no debes enojarte ¿Si?

—No quiero hablar de ese tema. —hablo. —es pasado.

—Okay. —sonrió. —no lo mencionaremos.