Capítulo 7: Siempre volveré a ti PT2 (Vota x sabados de maratón)

102 11 1
                                    

Nicolás...

Me despierta el sonido de llamada en mi celular. Es un número desconocido, pero es normal no he comprado nada nuevo desde que llegué a Nueva York.

─Si... habla Nicolás

─ ¿Quieres viva a Vaiolet?

─ ¿Quién habla?

─ ¡Responde!

─Si, si claro que sí pero no sé a qué viene la pregunta

─Soy Evan... llevaré conmigo a Vaiolet de regreso al pueblo donde vivía necesito protegerla, pero para que eso pase tengo que alejarla del imbécil de su novio, prefiero que tú me ayudes a resguardarla de modo en que tienes que ir con nosotros, no tienes otra opción─ sus palabras me dejan completamente desconcertado.

─Si, si con mucho gusto señor Black usted dígame cuando

─No siento que estés muy convencido muchacho, aparte no sé por qué te estoy encargando la vida de mi hija si ni siquiera sabes pelear

─Claro que lo estoy y si me sé defender soy maestro de artes marciales señor

─Lo sé, sólo quería probarte, pasaré por ti esta noche─ cuelga el teléfono y no sé de donde diablos pudo conseguir mi número.

Tengo que preparar todo para el viaje al pueblo donde conocí a Vaiolet.

Vaiolet...

Tengo todo preparado para irme esta noche con mi padre. Noah no está contento con la noticia, fue de muy mala gana por mis cosas al departamento ya que aún se sigue buscando a la mujer que causó toda la masacre en el banco de Wall Street.

─Es que no puedo creer que me dejarás sólo porque tu padre te lo dice, ese hombre quiere separarte de mí ¿no lo entiendes?

─Ese hombre es mi padre y a pesar de todo siempre me ha protegido y si cree que es lo mejor para mantenerme con vida, lo haré

─Vaiolet, ni siquiera te explicó la razón del por qué quieren matarlo, Evan sólo quiere jugar con tu mente al igual que lo hacía con tu madre─ mierda en eso no había pensado, Maia siempre caía en las manipulaciones de mi padre.

─El me lo dirá en su momento cuando estemos a salvo, yo no soy mi madre así que estaré bien─ le digo volteándome hacia donde esta él. ─Prometo que volveré, estaremos juntos otra vez y recorreremos el mundo siendo jóvenes por siempre, ya lo verás confía en mi─ no está muy convencido, pero termina aceptando la idea.

─Si no regresas yo iré por ti ¿entiendes? ─ me dice mirándome a los ojos como tratando de encontrar algo más, pero es inútil, estoy siendo completamente sincera con él y si fuese por mí, no lo dejaría nunca.

Terminamos de meter las maletas al auto de Evan. Noah me abraza fuertemente antes de que me vaya. Su chamarra de cuero hace que me produzca mucho frio pues la lluvia que cae ante nosotros comienza a incrementar.

─No te vayas mi amor─ me susurra mi querido Noah al oído con un tono demasiado vulnerable para él. Un fuerte dolor en el pecho hace su aparición tras escucharlo de esa manera.

─Tengo que irme Noah... Te amo─ me besa con apego, con ansias, con necesidad, con amor.

─Hasta ahora me lo dices Vio─ forma su increíble sonrisa que tanto me encanta para regalarme su último beso en la frente.

Entramos al auto para comenzar con nuestro viaje. No puedo evitar voltear para ver por última vez a mi preciado Noah, veo como cada vez me estoy alejando, pero puedo percibir que un auto se estaciona dónde estábamos, eso me parece extraño.

─Antes de irnos, tendremos que pasar por alguien─ dice Evan con la vista en el camino.

Paramos afuera del hotel de Central Park. Un empleado comienza a subir unas maletas, es un tanto desconcertante.

Sale un hombre con una impermeable oscuro, pero con la lluvia es difícil averiguar quién es. Le paga a la persona que subió las maletas y entra al auto descubriéndose la cabeza.

Es Nicolás...

─ ¿Qué mierda Evan? Noah tenía razón sólo quieres alejarme de él, pero no veo por qué utilizar a Nicolás.

─Te equivocas Vaiolet, por supuesto que no me agrada ese imbécil, pero cuando sepas todo entenderás mejor las cosas ahora cierra esa puerta y deja de actuar como niña pequeña─ Dice en tono serio mi padre para después cerrar de mala gana la puerta del auto.

Sigue conduciendo por unos minutos, pero no puedo dejar de pensar que esto fue premeditado.

─Quiero saber el porqué de la presencia de Nicolás aquí

─Es buena persona y creo que nos ayudará a protegerte

─ ¿Protegerme? Este idiota me besó a la fuerza y mi novio nos encontró, por poco y me provoca un problema grave con él─ digo en tono acusatorio.

─No le veo el problema, yo le robé más que un beso a tu madre y ahora mírate─ dice de manera divertida y Nicolás no puede contenerse la risa.

─ ¡Hablo enserio Evan!

─Yo también─ me dice mirándome por el retrovisor ─ Bien te contaré algo que debes saber. Hace aproximadamente dieciséis años, cometí los primeros asesinatos por salvar a Maia de uno de los rufianes que querían raptarla para prostituirla al mejor postor. Maté a cada uno que puso sus sucias manos sobre ella, lo que no sabíamos es que entre ellos se encontraba alguien importante de la mafia enemiga de Edward... tu abuelo. ─va iniciando la historia y comienzo a enterarme de cosas que mi madre nunca mencionó.

─Mi padre vino por mi para que me uniera a su mafia, pero por obvias razones no acepté, y por ello asesinó a mi madre y padrastro quien fue el que me heredó todo lo que tenemos hoy en dia. Como venganza lo maté de la manera más... sádica en la que puedes asesinar a un padre en navidad─ dice Evan apretando las manos contra el volante.

─De modo que tu mataste a mi abuelo... ¿en navidad?

─Si, tu madre me ayudó

─De modo en que tu hiciste a Maia una completa asesina.

─Si yo la entrené para que aprendiera a defenderse. Cuando la conocí era una pobre chica tímida, con buenas notas, amante de los panqueques

─Si... a ella le encantaban los panqueques─ digo haciéndome la fuerte para no llorar ante tal recuerdo.

─Aunque funcionó enseñarle a defenderse nada volvió a hacer igual para ella, su vida cambió y todos los días me culpo por haberla arruinado─ observo como se tensa su rostro mientras se acristalan sus ojos.

─No quería que esto pasara, ahora muchos años después me buscan para cobrarse conmigo porque les prive de hacerlo con Edward, por eso quiero protegerte le pedí ayuda a Nicolás y aceptó amablemente. ─ Nicolás sólo asienta.

─Nicolás siempre fue muy malo para pelear ¿cómo me podría proteger?

─Soy maestro de artes marciales, he viajado por el mundo entrenando a diferentes atletas y tengo una escuela muy prestigiosa en España, ahora que lo recuerdo ¿Por qué no le preguntas a Noah como quedó su brazo y cuello? Después de que me amenazara con un simple cuchillo─ dice de manera sarcástica Nicolás lo cual provoca la risa burlesca de Evan.

Este viaje será muy largo...

Hola chicxs para unirte a la comunidad y enterartede actualizaciones, memes y dedicatorias sígueme en mi INSTAGRAM:@jackhousewattpad

Dulce Sabor InmortalWhere stories live. Discover now