Capítulo 19: La búsqueda PT 2 Vota x maratón sabatino

59 5 0
                                    

Evan

Candela indagó por su parte a los mafiosos que contrataron sus servicios, en cuanto obtuvo la información del lugar exacto donde se quedarían me lo hizo saber.

Se preocupa por Vaiolet, aunque esta no le haya aceptado.

Observo mi vieja navaja, aquella con la que he arrebatado miles de vidas y esta vez no será la excepción. Detesto sentirme nervioso, mis manos sudan frio, así como siento que tiembla cada parte de mi cuerpo.

Voy a matar a quien tenga que hacerlo por tal de salvar a mi hija...

Bajo por las escaleras lo más rápido que puedo, la ansiedad por tener a Vaiolet cerca de mí, me carcome por dentro. Nicolás se encuentra dentro del auto, al igual de Noah y en la parte de atrás se encuentra el estúpido de Mark es una posición demasiado cómoda, con las manos por detrás de su cabeza y los pies encima del asiento del copiloto.

Todo un adonis...

Soy el último en subir al auto, nadie dice nada esta rabia e incomodidad me estresa. Quiero gritar, quiero aniquilar a los que hicieron todo esto. Pero entonces al que debería eliminar sería a mi pues todo esto proviene de mi oscuro pasado. Todo por ese puto pasado que no he podido alejar de mí.

Mark observa mis manos como tiemblan mientras mi vista sólo se fija en la nada. ─Amigo, ¿te encuentras bien? ─ pregunta en tono preocupado el tonto que se encuentra a mi lado.

─ ¿Cómo crees que estoy pedazo de mierda?

─Uy que humor tienes hermano, sólo preguntaba te mueves como pez saliendo del agua.

─No digas estupideces Mark

─ ¿Temes por Vaiolet, cierto? ¿quién lo diría? Hace unos años estuve a punto de comerme a esa exquisitez de chica y ahora estoy en su búsqueda─ dice en muy divertido el estúpido de Mark, la sangre me hierve y si dice otra mierda más no sé qué es lo que haré.

─¿Quién viera a la pobre Maia? Nadie creería que sería capaz de mentir y en últimas instancias resulta que al pobre de Evan le vieron la cara todo este tiempo y Vaiolet si era su hija

─ ¡Basta! ─ abro la puerta de su lado para después abalanzarme sobre él y amenazarle con mi navaja en su garganta.

─ ¡Maia pagó muy caro por lo que hizo, y tú también lo harás si no cierras la puta boca! ¡Sólo sabes hablar mierda! ─ siento como se prepara una pistola por detrás de mí, pero no importa, mi rabia está explotando a puntos descomunales.

─Será mejor que te sientes Evan, no tirare por la borda el rescate de mi mujer por una estupidez, ¡déjalo o te mueres! ─ dice Noah tratando de dispararme por detrás como el vil cobarde que es. Pero tiene razón, puedo cobrarme después del rescate a mi hija.

Nicolás no se inmuta en emitir palabra alguna, sólo sigue el camino sin dejar de ver los otros dos autos que nos siguen por detrás, lleno de hombres contratados para asesinar a los mafiosos que tienen a Vaiolet.

Dejamos los autos en la orilla de la carretera sin importarnos lo que les pudiera pasar. Nos adentramos en el bosque, esto me trae viejos recuerdos con Maia como de aquel diciembre cuando asesiné a mi padre. Trato de borrar esos pensamientos de mi cabeza que hacen que desaparezca mi concentración.

Encontramos el lugar donde acampaban los hombres. Están celebrando con una fogata, mujeres, música y muchas drogas.

Perfecto será más fácil atacar...

─Evan tienes que llegar por enfrente para distraerlos, en lo que nosotros nos enfocamos en sacar a Vaiolet de aquí ¿entendido? ─ dice Nicolás recordándome el plan.

─ ¿Cómo sé que puedo confiar en ti después de esto?

─Le juro por mi vida entera a que sacaré a su hija sana y salva y de no ser así, usted puede acabar conmigo cuando quiera─ menciona aquel chico con su mirada fija en mí, siento su sinceridad, pero eso no me basta, pues por su descuido estamos en este lugar.

─Otra cosa Nicolás, si no salgo vivo dile a Vaiolet que espero que me perdone por toda esta mierda─ digo mostrando mi horrible vulnerabilidad que tanto detesto.

─Lo haré señor─ nos damos la mano con fuerza para cerrar el pacto y camino tranquilamente hacia esos hombres que vigilaban la entrada, con mujeres sentadas en sus piernas.

─Que desconsiderados son por no invitarme a su fiesta─ digo en tono sarcástico mientras que los hombres sacan con dificultad sus armas, levanto las manos sonriendo, pues esto está por empezar.

Nicolás

Voy corriendo a toda velocidad para dirigirme al punto en el que según tenían a Vaiolet. Noah viene por detrás de mí, trepo por la cerca de seguridad sin ninguna dificultad, pero creo que no es igual para este idiota.

Unos hombres se dirigen corriendo para la parte de enfrente en donde se encuentra Evan para distraer a los mafiosos en lo que nosotros sacamos a Vaiolet.

Tomo un bate que se encontraba tirado por el estacionamiento y me dirijo al lugar, pero regresan dos de los hombres que se dirigían a la parte de enfrente, uno de ellos está por decir algo, pero le golpeo el cabeza y cae desmayado.

El otro saca una pistola, pero pateo el arma y le golpeo con el bate. Más hombres aparecen en el lugar, pero Noah no está para apoyarme. Escucho unos disparos desde lejos y me aparto para cubrirme.

Noah y algunos de sus hombres comienzan a disparar. Me escabullo de entre ellos y entro al lugar donde se encuentra Vaiolet semidesnuda con lágrimas en los ojos. Rápidamente me acerco a ella para desatarla. Llora desconsoladamente en mi hombro.

─ ¿Qué te hicieron Vaiolet? ─ no puede hablar y eso me preocupa, niega con la cabeza, comienza a apuntar por detrás de mí, pero cuando volteo una mujer que no logró ver me golpea con torpeza en la cabeza, por suerte no fue tan fuerte para hacerme colapsar. Cuando logró ver con claridad es Candela quien forcejea con Vaiolet para tratar de inyectarle algo.

Me incorporo a cómo puedo y le doy una patada que la hace caer a unos metros de nosotros.

─ ¿Por qué haces esto? ¡déjanos ir! ¡Afuera esta Evan luchando por su hija y tú le traicionas!

─ ¡No quiero hacer esto Nicolás! ─ golpea nuevamente a Vaiolet, pero ella no tiene fuerzas para defender y logra inyectarle algo en su cuello, la rabia surge de mi como no lo había hecho nunca en mi vida. Le doy una patada en la cabeza que la hace caer contra la pared y cae desmayada, comienza a salir sangre, pero no me importa, ella nos traiciono primero.

Vaiolet se encuentra temblando, quiere decirme algo, pero no puede hacerlo. Entra Noah por la puerta rápidamente para ver el estado de Vaiolet que cada vez esta con la mirada más perdida y su corazón está dejando de latir.

Suelta mi mano por completo y siento que cae un cuerpo sobre mí.

─ ¿Qué le hiciste a Vaiolet?

─ ¿Qué le haría?, esta mujer le inyecto algo en el cuello a Vaiolet, trate de detenerla, pero nos traiciono.

─Creo que mataron a Evan, así que tu llévate a esa mujer y yo a Vaiolet─ eso último me impresionó, sacamos a las mujeres del lugar para irnos a un lugar más seguro.

Hola chicxs para unirte a la comunidad y enterartede actualizaciones, memes y dedicatorias sígueme en mi INSTAGRAM:@jackhousewattpad

Dulce Sabor InmortalWhere stories live. Discover now