Desde Ese Día ✓

Capítulo 19 // Primer amor

—Bien muchachos, por favor saquen los materiales que les pedí la semana pasada. Saldremos al patio de forma ordenada y sin gritar, por favor— el profesor de biología estaba dando las instrucciones y todo el salón comenzó a sacar una bolsa con los materiales.

Mis ojos se abrieron y enseguida ví a April.

—¿¡Materiales!?— susurré— ¿Qué materiales?

—La semana pasada pidió materiales Harley... ¿No tienes los materiales?— ella me miró sorprendida. No sabía si prestarme los suyos o lanzarse por una ventana.

—¡Ahg, no puede ser!

—¿Se te olvidaron los materiales Harley?— el querido profesor hizo que todos pusieran su atención en mí.

—No— una voz femenina sonó entre en silenció del salón, dicho eso se levantó y me entregó una bolsa con las cosas— aquí las tiene. No las conseguía.

April y yo miramos sorprendidas a Madison mientras se iba a sentar de nuevo a su puesto.

—Muy bien, salga la primera fila de manera ordenada, luego la segunda y así irán hasta llegar a la última.

Todos comenzaron a recoger sus cosas y a salir del salón.

—¿Qué mosquito le picó? ¿Está drogada? No veo que sus ojos estén dilatados.

Negué con la cabeza al escuchar las sospechas de mi mejor amiga en mi oído.

—Siento que está tramando algo, se comportó muy bien conmigo. Ni si quiera me tiró la bolsa ¿Cómo sabía que se me iba a olvidar esto?— volteé a ver a Logan y él tenía su típica mirada seria. Cuando me vió, se limitó a solo hacer eso, mirarme. Él se levantó cuando le tocó y salió al patio.

Ya se me hacía extraño que su ternura conmigo haya durado tanto.

—¿Sabes que significa esto?— miré de nuevo a mi mejor amiga, quién me estaba dando una mirada picarona.

Sonreí cómplice— código amarillo, al ataque— April y yo etiquetamos todo por códigos de colores. Sí, somos raras.

Código amarillo significaba buscar más información que el FBI.

Nuestra fila fué la última en salir. April y yo mirábamos a Madison pendiente a cada movimiento que hacía.

—¿Crees que le dieron tan duro anoche que eso la puso de buen humor?

—No creo, no he escuchado gemidos de nadie y ella casi no ha salido de la casa— le susurré.

—¡Mi luna y mi sol!— April y yo resaltamos al escuchar la voz de Derek detrás de nosotras.

—¡Derek!— exclamé— casi haces que nos dé un infarto.

—Oh, perdón mi sol. No quería interrumpir su plan espía hacia Madison.

—¿Qué? ¿Nuestro qué? Pff, por favor— April se hizo la loca y jugaba con las puntas de su cabello— ¿Tan obvias éramos?

—Creo que hasta el profesor lo notó.

—Ash, como sea. Siento que Madison está tramando algo. Ella nunca ha sido así conmigo— mi mirada volvió a ella.

—Quizá le dieron tan duro anoche que amaneció de buen humor.

—¡Dije lo mismo!— April y él chocaron las manos y yo rodé los ojos.

Estoy tan acostumbrada a que la maldad de Madison me rodeé, que su bondad me parece increíblemente extraña en estos momentos.