Izuku Midoriya: ASCENSIÓN

Capítulo 4 - Encuentro Predestinado [V]

Los meses restantes para el examen de ingreso pasaron volando. Durante ese tiempo Izuku no paró de entrenar, terminó de limpiar la playa en el octavo mes y en los dos meses restantes decidió centrarse en el uso de su quirk. Tenía un buen físico y un control regular sobre el "One For Me" aún no era capaz de usar todo su poder, pero había muchísima diferencia con respecto a los primeros días. En su escuela las cosas tampoco cambiaron mucho, nadie lo molestaba o hablaba, simplemente lo ignoraban. Al pecoso no le molestaba que digamos, Bakugo tampoco le dirigió la palabra desde lo ocurrido hace diez meses. Ahora nuestro protagonista está saliendo de su departamento junto a su madre para ir de compras, en este preciso momento, Izuku conocerá a una persona que va a cambiar su vida por completo, un encuentro predestinado que podría cambiar el mismo futuro...

Inko: En dos días será la prueba de admisión Izuku -avisó la esbelta peliverde- ¿No estás nervioso?

Izuku: Bueno, mentiría si dijera que no -confesó rascándose la nuca- Pero si mi meta es ser un héroe, tengo que superar las adversidades

???: Sí tío, ya llegué a Japón y me instalé bien -una joven rubia de lentes y ojos azules hablaba por teléfono con un tono cansado- Descuida, puedo cuidarme sola, además tienes mucho trabajo

Inko: Mira Izuku, es nuestra nueva vecina -susurró a su hijo con una sonrisa-

Izuku: Oh, la americana -recordó la charla con su madre hace algunos meses- Parece de mi edad, ¿acaso se está quedando sola?

Inko: ¿Por qué no vas a hablarle? -preguntó sonriendo picaramente- Es una joven muy hermosa

Izuku: ¡M-mamá! -reprendió avergonzado-

???: Nos vemos en unos días tío, cuídate -la hermosa blonda cortó la llamada y estableció contacto visual con el ojiesmeralda-

Por un momento, solo para ambos jóvenes, el tiempo se detuvo... los dos se quedaron mirando uno al otro directo a los ojos. Zafiro y esmeralda chocaron admirándose con detalle, pero no por una atracción física y mucho menos sentimental, no se conocían. Por alguna razón inexplicable sentían la necesidad de hablar con el otro.

Inko: (¿Qué está pasando aquí?) -se preguntó en su mente al estar parada hace cinco minutos al lado de su hijo, no paraba de mirar a la joven ojiazul con cara de... nada, no tenía expresión alguna- Izuku

Izuku: ¿Huh? -al escuchar ligeramente el llamado de su madre salió del trance- ¿Qué ocurre mamá?

Inko: No lo se, tú dime -dijo levantando una ceja- Estuviste observando a esa chica por cinco minutos sin decir una palabra ni moverte un centímetro -señalando a la chica de lentes-

???: ¿Eh? -al ver que el joven peliverde reaccionó, ella también lo hizo, acercándose lentamente a la familia-

Inko: ¿La conoces? -preguntó aún confundida-

Izuku: No, pero algo de ella... -susurró viéndola nuevamente, ahora estaba frente a ellos- H-hola -saludó algo tímido-

Melissa: ¡Hola! Mi nombre es Melissa Shield, soy su nueva vecina -saludó sonriendo-

Inko: Un placer conocerte Shield-chan -saludó respetuosamente- Mi nombre en Inko Midoriya y este es mi hijo Izuku Midoriya

Izuku: Un placer, Shield-san -saludó levantando su mano con timidez-

Melissa: Por favor díganme Melissa -haciendo un ademán con su mano- Perdón por sonar irrespetuosa, pero oí que quieres entrar en la U.A, ¿es cierto? -preguntó genuinamente curiosa-

Izuku: Así es, en dos días tomaré el examen -respondió dejando su timidez de lado- ¿Por qué la pregunta?

Melissa: Me mudé a Japón para ingresar a la U.A -informó sonriente- Quiero ser una gran heroína, la mas fuerte