Capítulo 9

43.3K 2K 1.1K
                                    


Asher

Miré a Kaira y estaba profundamente dormida entre mis sábanas y abrazaba una almohada. Sonreí. Kaira tiene una belleza espectacular y sé que jamás podría cansarme de pintarla, mientras más la miro descubro más rasgo de su hermosa cara.

Me concentro en trazar los últimos rasgos del dibujo. Levantó la mirada y veo que ha cambiado de posición y ahora está en posición fetal. Sonrió, es adorable. Esta chica me ha encantado desde el momento que la vi cruzar la puerta y como sonreía y hablaba con su amigo, supe que tenía que conocerla.

Dejo los lápices a lado y veo que tengo un mensaje de mi padre y otro de mi primo que quiere venirse a España, no respondo a ninguno de los dos. Mientras más lejos esté de ellos, para mí es mejor. Miro la hora son las cuatro de la mañana, normalmente nunca duermo tanto. Me acerco y acaricio la mejilla de Kaira. Ella frunce un poco su nariz y se remueve.

Entró con cuidado y la abrazó con fuerza. Me quedo mirando el techo y no puedo evitar pensar que voy demasiado rápido con Kaira, y tal vez, ella quiere algo más tradicional y yo ya le estaba proponiendo sexo y una relación. No pudo evitarlo es mi forma de ser, siempre voy rápido a la gente le gusta tomarse la cosa con calma y ser cuidadoso y yo no, me encanta ir rápido es algo que necesito, necesito aprovechar cada segundo, antes tal vez, iba un poco más despacio, pero después del accidente entendí que tenía que aprovechar la vida y vivirla cada segundo como si fuera el último día de tu vida y mucho dirán <<"que cursi es esa frase">>, pero cuando roce con la muerte entendí que tenía que seguir adelante por mí y por mi hermano.

Le di un beso a Kaira antes de intentar volver a cerrar los ojos y conciliar de nuevo el sueño.

—¿Te encuentras bien? —preguntó con la voz ronca.

La miré sorprendido, pensé que estaba durmiendo. Ella acarició mi mejilla y su pelo cayó en mi pecho. Me acerqué a ella y le di un beso. Ella puso sus manos en mi pecho y lo que comenzó como un beso tierno poco a poco comenzó a ponerse más caliente. Ambos nos separamos cuando nos faltó el aire.

—Perdóname, no quise despertarte. Soy una persona que no duerme mucho.

Ella acarició mi labio y me miró fijamente, de seguro tenía muchas preguntas y podía ver como su cabecita pensaba sin parar. Puse un mechón detrás de su oreja.

—Puedes preguntar lo que quieras, Kaira.

—¿Por qué no puedes dormir?

La miro.... La seguí mirando. Ella me miraba también hasta que solté un suspiro y acaricié su mejilla.

—No lo sé, pesadillas supongo. Ya es costumbre para mi dormir un par de horas—dije con sinceridad.

Ella frunció el ceño y me dio un beso fugaz.

—Sea lo que sea que te esté sucediendo Asher, tienes que pelear con esos demonios, no dejes que te gane. Siempre en esta vida hay luz, aunque sea pequeña, pero hay. Siempre pienso eso cuando tengo problemas con mi vida, por muy grande que sea el problema, sé que pronto saldrá la luz y volveré a sonreír.

—Eso es cierto, pero lo que a mí me atormenta son recuerdos.

—¿De quién? —preguntó con curiosidad.

Kaira es una chica tan curiosa y llena de vida a pesar de que también tenía problemas en su vida. Ambos somos expertos mentirosos con la gente que nos rodea, pero entre nosotros somos sinceros.

—De mi familia.

—Yo igual—respondió sin dudar—. Mi padre...me golpeaba sin parar hasta que una vez casi me mato a golpes, Asher—sus ojos se llenaron de lágrimas y apreté con fuerza mis puños, lo mató—, tenía solo 15 años.

Insuperable EfímeroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora