LSELL | Charlotte Swan es una adolescente conocida por su corazón bondadoso y su actitud alegre.
Jamás ha creído realmente en el amor de pareja, sin embargo, su vida se pone patas arriba cuando conoce al nuevo miembro de la manada Quileute.
Seth Cl...
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A la mañana siguiente, Charlotte despertó abrazada a su hermana, casi maldiciendo al darse cuenta de que Seth no estaba.
Se levantó y estiró los brazos mientras bostezaba. Intentó despertar a Bella, sin embargo después de varios intentos fallidos se rindió.
Sabía que su cachorro estaba cerca, pues lo sentía en el corazón, así que sin ningún temor salió de la casa de acampar y sonrió al ver la nieve que cubría todo el lugar. Una pequeña brisa movió las ramas de los arbustos y estos hicieron que la nieve cayera sobre sus hombros.
El cosquilleo en la punta de los dedos y el sentimiento de calma la hicieron voltear, encontrándose con el lobo color arena que la idolatraba.
—¡Aquí estás! —chilló corriendo hacia él, como era su costumbre. —Buenos días, lobito.
Acarició sus orejas y arrugó la nariz con diversión cuando el lobo sacudió su pelaje.
La casa se abrió de nuevo y de esta salió Isabella.
—Hola, Seth. —lo saludó y después miró a su hermana. —¿Dormiste bien, Charlie?
—Sip.
Edward llegó de la nada, asustando a la chica.
—¿Dónde está Jacob? ¿Él ya... —dejó la frase al aire.
—Aún no. —respondió su novio acercándose a ella. —Está viendo que todo esté seguro antes de irse.
Charlotte le dio un leve codazo al lobo y le hizo una seña para que la siguiera. Se alejaron de la pareja y se escondieron detrás de las rocas, por que claro, los chismes de ese par eran interesantes.
Se mantuvieron escuchando en silencio, sintiendose decepcionados de no oír nada más que sus planes de casarse. Al menos fue así hasta que Seth alzó las orejas preocupado.
Charlotte se asomó entre los arbustos y abrió los ojos en grande al ver a Jacob. —Edward sabía que estaba escuchando... ¡Hijo de... —el cachorro resopló interrumpiendola.
—¡Jake, Jake, espera! —escuchó a su hermana alejándose.
—¿Qué pasa? —le preguntó a Seth. —¿Qué están diciendo?
El lobo la miró con incredulidad. ¿Cómo esperas que responda?
De pronto volteó bruscamente hacia el lugar al que se habían alejado Jake y Bella.
—¡Esta pasando algo importante!
Seth asintió y le dio un lengüetazo en la mejilla como respuesta.
