"UNA CHICA SOLITARIA"

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DESCUBRIENDO COSAS

Jacob y Elena, se encontraban en la casa de Scott. Él, curiosamente los había invitado a comer.

—Scott, ya me voy— le dijo Harry mientras bajaba las escaleras y observaba a Elena y Jacob.

—Adiós, papá—le contestó Scott—. Por cierto ¿a dónde vas sin haber comido?—preguntó algo curioso.

—Solo saldré por un rato. Además, ya sabes las cosas que hago a estas horas

—Al menos algunas—dijo Scott en voz baja pero Harry escuchó un poco.

—¿A caso dijiste algo?

—No nada, te espero en unas horas

—Está bien— se acomodó la corbata.—Adiós chicos— volteó a ver a Jacob y a Elena.

—Adiós señor Russell—dijeron al mismo tiempo provocando que Harry se conmocionara.

—Ustedes ¿cómo saben mi apellido?

Ellos se quedaron callados.

—Ellos saben cosas, papá— le contestó Scott y se quedó por varios segundos callado, hasta que después volvió a hablar.— Pero bueno, no te quitamos más tu tiempo, de seguro vas tarde y eso no está bien— se levantó y le abrió la puerta de la casa y le hizo una seña para que Harry se fuera.

Su padre se quedó algo confundido y así comenzó a caminar sin dejar de ver a Jacob y Elena. Y después a su hijo, Scott.

—Hablaremos de esto después Scott— fue lo único que dijo y luego salió.

— ¿A caso a tu padre se le hace extraño que nosotros sepamos su apellido?

—Es probable, ya que no solemos dar mucha información personal de nosotros

— ¡Vaya!— exclamó Elena.

Dos horas después...

— Oye Scott— Jacob le habló y él volteó a verlo— Ya ves que Ness te comentó sobre unos papeles de adopción ¿verdad?

— Si ¿por? 

— Estoy seguro que son falsos

— ¿Por qué exactamente?

— Lo estuve analizando, y si fueran verdaderos, tendrían el nombre de Luz y no el de Darkness

— Bueno, pues en eso tienes razón 

— Pues si, eso es obvio. ¿Qué idiota falsifica papeles sin saber el verdadero nombre de su posible víctima?

— Al parecer el que hizo esa estupidez

— Lo hacen para confundirnos. Pero lo que no saben es, que somos más astutos que la mayoría de los que quieren "matarnos"

— Pedazos de mierda— dijo Scott y comenzó a reírse.

— ¡Oye! esa cuenta como mala palabra, no es correcto decirlo

— Yo no nací para hacer lo correcto, yo nací para hacer y decir lo que me gusta y pienso 

— Al perecer Ness no es la única poeta en este equipo—  dijo Jacob refiriéndose a lo que acababa de decir Scott y se rio un poco.   

— A ver cuándo me das clases de poesía, Scott—le dijo Elena.

— Doy clases los viernes, no cobro mucho. Como diría Shrek— Scott dice divertido.

— ¿Puedo ser tu Fiona?— Elena le preguntó.