Una fiesta, un lago, un bosque, un sendero... no son unas vacaciones normales. El primogénito de la adinerada familia Lémieux, se ha suicidado la noche anterior a su cumpleaños. Nadie recuerda con exactitud lo que ocurrió. El oficial Grenier se ve obligado a llamar al departamento de Homicidios y Caden Brisebois tiene motivos para inmiscuirse en la investigación: supone que han matado al hombre y sospecha de sí mismo. Una mentira no puede sostenerse para siempre, mucho menos un secreto.