ʜᴇᴀʀᴛʙᴇᴀᴛs ᴏғ ᴀɴ ᴀɴɢᴇʟ; ʜᴡᴀɴɢ ʜʏᴜɴᴊɪɴ

ᴠᴇɪɴᴛɪᴛʀᴇ́s

ʜᴇᴀʀʙᴇᴀᴛs

ᴄᴏʀᴇᴀ ᴅᴇʟ sᴜʀ.

Estábamos enfrente de mi casa y las manos me temblaban cuando intenté poner la llave en su lugar. El tener a este par de chicos a veces me ponía incómoda por el cambio en el ambiente ¿acaso se llevaban mal? No lo creo, no lo aparentan ¿o será que yo no me doy cuenta?

Minho notó que me costaba abrir la puesta y tomó las llaves para hacerlo él mismo mientras soltaba una suave risa cerca de mí.

Aproveché para mirar de reojo a Hyunjin y este solo me sonrió sin mucho sentimiento, parecía más bien cansado o irritado a mi parecer.
Se abrió la puerta y justo el rubio habló cuando escuchó que el otro chico nos invitaba a pasar de una vez.

— Debo de irme. Hoy trabajo y necesito cambiarme el uniforme antes— sonrió levemente cuando Minho lo miró. Aquel chico no respondió nada, pero al rubio no le importó y me miró enseguida — Solo quería asegurarme de que llegaras a casa. Te veo mañana en la escuela, Min.

Asentí repetidas veces al momento de ver aquella leve reverencia de su parte. Se giró y yo intenté decirle adiós tan siquiera pero nada salió de mi boca.
Este desapareció de mi vista y enseguida Minho volvió a insistir en entrar.

— ¿Ya comiste?— habló cuando dejó su saco sobre el sofá y yo me acercaba a él mientras negaba — Tampoco yo. Haré algo ¿puedo?— señaló la cocina y asentí, todo sin muchos ánimos — Hey...— Me tomó de la muñeca suavemente para acercarme a él, quien estaba de espaldas recargado en el sofá — ¿Tienes algo?

Negué con una sonrisa — Estoy bien. Hoy fue un día agotador.— susurré sin intenciones de hacerlo. Pasé mi vista por la corbata mal puesta de Minho y me di la libertad de quitarla con sumo cuidado.

Una pequeña sonrisa en su rostro fue lo que me distrajo justo después de colocar aquella prenda a un lado del sofá — Necesitas comer, tal vez eso te anime un poco— acarició mi cabeza lentamente y yo terminé por asentir — De acuerdo. Quédate aquí, yo haré todo.— tomó mis mejillas con ambas manos y besó mi frente antes de caminar hacia la cocina.

— ¡Espera!— dije alzando la voz un poco y logrando que frenara su paso enseguida. Me echó una miradita rápida tratando de averiguar que pasaba, pero yo solo corrí hacia él para darle un abrazo — Necesitaba abrazarte.— susurré sobre su espalda, sintiendo como él se giraba y al instante sus brazos me rodearon sin pena, junto a aquel beso sobre mi cabeza.

— Te extrañé mucho, Minseo.— susurró después de unos segundos de puro silencio.

No dije nada en cambio. Solo quería permanecer ahí abrazada a él sin que hubiera un límite de tiempo. Pero aún así, pronto él terminó separándose para sonreírme cálidamente y proseguir el camino hacia la cocina.

Yo caminé hacia mi habitación y dejé la mochila sobre la cama. Busqué ropa más cómoda que la estúpida falda del uniforme y me cambié rápidamente en el baño.

— ¿Puedo?— tocó el marco de la puerta mientras yo miraba los mensajes de mi celular. Lo miré por unos segundos y asentí — Pensé que podríamos comer aquí, después de todo nunca terminamos aquella serie ¿te gustaría verla?— puso la charola con ambos platos sobre la mesita de noche.

— Claro, está bien.— estaba dispuesta a dejar de lado mi celular, cuando de repente me llegaron unos mensajes, por lo que volví a concentrarme en aquello.

Jisung
¡Minnie!
¿Cómo te fue con tu mamá hoy?

Seungmin
Eres idiota Jisung.
Te dije que no dijeras nada, se supone que nosotros no lo sabíamos.

Felix
¿Por qué no meten a Hyunjin al grupo?

Jeongin
¡Yo lo hago!

Jeongin agregó a Hyunjin...

Minseo
¿Quién les dijo?
Bueno, no importa, tarde o temprano les diría. Y me fue bien, Han.

Seungmin
Hyunjin nos dijo, pensamos que no querías decirnos pero igual estás en todo tu derecho.

Minseo
No era eso...
Solo que últimamente ustedes están muy ocupados. Tú Seungmin, estudias mucho para mantener el mejor promedio de la clase y Jisung está con sus cosas de skate.

Felix
¿Y yo? :(

Minseo
Lo siento...
Solo no quería molestar.

Jeongin
Al menos te acompañó Hyunjin ¿no?

Minseo
Sí

Hyunjin
Sí

Ambos escribimos al mismo tiempo por lo que solo terminé por soltar una corta risa. Después de eso siguieron llegando más mensajes, pero la presencia de Minho, recostado en la cama viendo el celular, me hizo dejar de prestar tanta atención al grupo.

Me acerqué y me recosté a su lado con una enorme sonrisa. El chico en cambio solo soltó una risa nasal y dejó su celular lejos de él.

— ¿Comemos?— asentí — Bien.— pasó la charola en medio de nosotros y yo prendí el televisor para comenzar a buscar aquella serie en la pantalla. Todo mientras Minho ya comenzaba a comer, parecía que estaba realmente hambriento.

Las carcajadas de Minho eran el mejor sonido del mundo. Su típica risa era tan adorable, tan contagiosa que me hacía terminar riendo igual que él.
Sus ojos se hacían chiquitos con cada expresión y verlo de reojo me era inevitable, porque su perfil era como perderte en una gran obra de arte.

— Woah, no estuvo tan mal ¿no?— suspiró mientras veíamos la pantalla en negro ahora. La serie había terminado, y no entendía como es que el tiempo se había pasado tan rápido — Pudimos terminarla antes, era corta— me miró ahora a mí y yo solo asentí con una leve sonrisa — Uhm... ¿te gustó la comida?— se encogió de hombros de manera tímida.

Asentí — ¡Sí! Cocinas muy bien.

Minho solo se sonrojó un poco y aclaró su garganta — Gracias— hizo una pequeña pausa pero pronto se sobresaltó al recordar algo más — ¡Por cierto! Ya que hoy no pude acompañarte, tal vez la próxima vez podamos ir juntos ¿no lo crees?

Asentí — Claro. Igual pensaba decirle a los chicos, ellos merecían que les dijera, siempre estuvieron ahí para mí.— susurré mientras jugaba con mis dedos sobre la cama.

— Entiendo.