Lonely Hearts | L.H

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—¿Cómo me veo?

Escuché una risita de su parte y después pasó su brazo sobre mis hombros y besó mi cabello.

—Te ves perfecta Ángel...no te preocupes yo sé que le agradarás a mi madre, estoy seguro que te amará , bueno aunque con lo de ayer puedo decir que ya lo hace.

—Bien —pasé mi mano por mi vestido y me vi al espejo una última vez.

Para ser sincera el corte de cabello que Ashton me hizo ayer es fantástico, tomé mi bolso y al salir de la casa el tomo mi mano y me abrió la puerta de su auto, encendí el estéreo tratando de calmar mis nervios. Funcionó. Pero cuando subimos al avión las inseguridades regresaron.

—Relájate un poco Bella, estás hermosa y mi mamá te ama y si ella lo hace los demás también lo harán.

—Eso me reconforta un poco, pero no lo suficiente.

Sonrió y besó mi frente, durante el vuelo nos pusimos a ver una película, pues sería un vuelo bastante largo. Según mis cálculos estaremos ahí a las tres de la tarde, bueno con el horario de Los Ángeles pero probablemente ahí sea diferente. Definitivamente los horarios no son lo mío.

Luke se durmió en algún punto, intenté hacer lo mismo pero los nervios estaban matándome, ¿así se sintió Luke cuando conoció a mis padres?

Mis manos me sudaron un poco pero después de unos minutos mi cuerpo se relajó y pude dormir un poco al igual que todos los pasajeros. Bueno la mayoría.

Recargue mi cabeza en el hombro de Luke y abrace su brazo y sentí como el tomaba mi mano para entrelazarla con la suya, suspiré y cerré los ojos.

Solo tengo que relajarme un poco, Liz es todo un amor no tengo que preocuparme en ser perfecta como una vez lo hice cuando salí con Alec.

Su madre me odiaba.

Aunque él decía que no era cierto yo sabía que así era y ella nunca se molestó en disimular el desprecio que me tenía. Por algo que nunca supe y que no me interesa saber.

—¿Te encuentras mejor? —preguntó una vez que habíamos bajado del avión y habíamos tomado nuestras maletas.

—Sí, tuve una plática muy extensa conmigo misma anoche.

—Mi mamá me ha mando un mensaje antes de aterriza, me a preguntado si no eras alérgica a algo. Quería asegurarse de que pasarás un momento agradable aquí en Sídney.

—Tú madre es todo un encanto.

—Cómo tú —sonrió.

Tomamos un taxi, colocamos las maletas en la cajuela, era mi primera vez en Sídney una vez metí una solicitud para una pasarela que se llevaría a cabo aquí en Sídney pero esta fue denegada.

Me sentí muy triste pues tenía una gran emoción por conocer Sídney pero ahora estoy aquí y sé que podré disfrutar de mi estancia con mi novio.

Observé la ciudad con fascinación desde al aeropuerto hasta el lugar donde Luke solía vivir antes de salir a perseguir sus sueños. El conductor nos hizo favor de bajar las maletas del auto, Luke salió primero y camino lo más rápido que pudo para abrirme la puerta.

—Bienvenida a mi hogar Bella —sonrió.

Me tomó de la mano y pude ver lo linda que era su casa exteriormente, el jardín tenía varias flores muy lindas y un lindo camino hasta la puerta principal.

Luke tomó su maleta y la mía con una mano para que con la otra me tomara de la mano y me guiara hasta su casa. No había siquiera tocado la puerta cuando esta se abrió dejando ver a una mujer un poco baja rubia sonriente.