Lonely Hearts | L.H

EPÍLOGO

El transcurso a su casa había sido silencioso y bastante incómodo, era como si fuera con un extraño y no con mi novio. Ninguno de los dos decía algo, solo permanecimos en silencio con la mirada al frente sintiendo la tensión que había entre los dos.

Aún no podía comprender cómo es que habíamos discutido por algo tan estúpido, se removió en el sofá y echo su cabeza hacia atrás y dejó salir un gran suspiro. Sobo sus ojos y después los cerró, dejando caer sus manos en sus piernas.

-Es mejor que me vaya a casa...-susurré, cogí mi bolso con la intención de irme.

Esas palabras salieron con tanta dificultad, sentía un gran nudo en mi garganta, me levanté del sofá y comencé a caminar en dirección a la salida, conteniendo mis lágrimas. Mis pasos se escuchaban perfectamente por el tacón y por qué a esta hora todo estaba silencio, lo único que quería era irme a mi casa para poder acostarme y llorar hasta dormirme.

Pero entonces escuché sus pasos apresurados, hizo que me detuviera cuando me tomó de la mano, me obligó a verlo a los ojos y sentí una punzada en mi pecho que hizo que apartará mi vista de él.

-Necesitamos hablar -masculló.

-Hablemos mañana, ahora no quiero hacerlo Luke.

-Tenemos que hacerlo ahora, Bella.

-Luke muero de sueño y no planeó seguir discutiendo contigo por algo tan estúpido.

-Es importante Bella, tenemos que hacerlo ahora, tengo que hacerlo.

Mi garganta me dolía era como si tuviera miles de espinas atravesándome el cuello lentamente, no le respondí solo lo quedé viendo dándole a entender que lo escuchaba.

-Eres alguien sumamente importante para mí Bella -tomo mis dos manos y las acercó a su pecho-, te juro que nunca había sentido esto con alguien, no había sido tan feliz hasta que te conocí y es por eso que me veo en la necesidad de hacerlo -hizo una larga pausa, como si estuviera buscando las palabras correctas-, tenemos que dejar esto, tengo que dejarte ir -sentí un dolor en mi pecho y las lágrimas amenazaban nuevamente en salir-, sé que probablemente después de esto me odies, pero prefiero eso a seguir mintiéndote. Mi mente le hizo creer a mi iluso corazón que mis sentimientos hacia ti eran completamente genuinos...pero me temo que no era así, Bella traté que esto funcionará y lo hice hasta donde pude pero ahora la culpa es demasiada y simplemente no puedo más, pensé amarte con la intensidad de mil soles, corrección, creí amarte con la intensidad de mil soles juntos, pero mi cabeza estaba creando falsos sentimientos intentando sanarme -susurró-, pensando que sí tú me amabas lo suficiente podrías sanarme, no sé cómo pensé que eso era una buena idea, maldición, estaba tan roto, estoy tan roto -su voz se entrecorto- y solo estoy lastimándote...quisiera corresponderte como tú quieres, cómo mereces que te correspondan, pero Bella estoy demasiado roto como para hacerlo -apreté los labios y sentí una lágrima resbalar sobre mi mejilla, su ceño se frunció y rápidamente llevo su mano para limpiar la lágrima-, maldición, no quiero que llores, no por mi ni por nada...

-¿Qué hice para que pasará esto?-no aguanté más y las lágrimas comenzaron a salir, sentía un dolor en mi pecho.

-No, no, tu no has hecho nada -dijo rápidamente y seco mis lágrimas con su mano-, esto no es culpa tuya, es la mía. Sé que tú también estás demasiado rota por dentro, ambos lo estamos y estamos dañándonos inconscientemente y créeme a mí no me importaría seguir quemándome, soportaría todo lo que fuera por seguir a tu lado, pero yo no quiero que sufras y menos por mi, es por eso que estoy haciendo esto. Y por más que me duela decirte esto, tengo que hacerlo, yo no te amo Bella...no como tú lo haces.